Solana propone crear un ministerio europeo de Exteriores con representantes de los Estados miembros de la Uni¨®n
Javier Solana considera que quien ocupe en el futuro su puesto en Bruselas debe presidir las reuniones del Consejo de Ministros de Exteriores y dirigir, a la vez, una especie de 'Ministerio Europeo de Exteriores' integrado por diplom¨¢ticos procedentes de los Estados de la UE. En una intervenci¨®n ante el grupo de trabajo de pol¨ªtica exterior de la Convenci¨®n Europea, el alto representante para la pol¨ªtica exterior de la UE fue ayer mucho m¨¢s lejos que nunca al proponer un refuerzo del cargo, un aumento de sus competencias y un mayor presupuesto.
Para Solana, la puesta en com¨²n de recursos europeos (ministerios de Exteriores, embajadas o delegaciones de la Comisi¨®n) aportar¨ªa m¨¢s fuerza a la UE para lograr sus objetivos. Es en ese terreno en el que propone que los Estados destinen de forma permanente a diplom¨¢ticos de alto nivel tanto al Consejo de la Uni¨®n como a la Comisi¨®n Europea, de forma que se produzca 'un incalculable intercambio de ideas, informaci¨®n y confianza'. 'Tan pragm¨¢tica puesta en com¨²n de recursos ofrece el potencial para desarrollar un Ministerio Europeo de Exteriores', se?al¨®.
En esa misma l¨ªnea, Solana considera 'necesario' que el alto representante presida los Consejos de Exteriores de la UE, hoy dirigidos cada seis meses por el titular del pa¨ªs al que corresponde la presidencia de la Uni¨®n. En esa funci¨®n, reclama que el Consejo delegue en esa figura la representaci¨®n externa de la Uni¨®n y que, adem¨¢s, se le reconozca de jure (hoy s¨®lo de facto) el derecho a presentar sus propias iniciativas pol¨ªticas, sobre todo en casos de gesti¨®n de crisis.
El alto representante insisti¨® a los reunidos, entre ellos el ministro brit¨¢nico para Europa, Peter Hain, y el primer ministro belga, Jean-Luc Dehane, que el actual 'sistema de representaci¨®n exterior, con constantes cambios de caras, una inflaci¨®n de protagonistas y a veces con cambios de prioridades, no est¨¢ adaptado al objetivo de ser un actor de peso en la escena internacional'. Por eso, y al hacer un breve repaso de su experiencia en el puesto, destac¨® los buenos resultados obtenidos cuando los Quince han delegado en el alto representante su acci¨®n exterior, como ha ocurrido en los Balcanes.
M¨¢s coherencia
Tambi¨¦n puso de manifiesto que, en la actualidad, deben encontrarse m¨¦todos de trabajo para reaccionar y coordinarse m¨¢s r¨¢pidamente, 'en tiempo real', pero igualmente destac¨® la conveniencia de reforzar 'la coherencia y la solidaridad entre los Estados'. En ese campo, cit¨® la necesidad de 'compartir an¨¢lisis y fijar prioridades conjuntas', por un lado, y de distribuir tareas, por otro, de modo que algunos Estados puedan aportar medios militares mientras otros contribuyen con dinero o la acogida de refugiados.
En contra del criterio de varias capitales europeas, Solana defendi¨® que sigan coexistiendo las figuras del alto representante y del comisario de Relaciones Exteriores, cargo hoy ocupado por el brit¨¢nico Chris Patten, quien mantiene la misma teor¨ªa. Fue especialmente cr¨ªtico, sin embargo, con el presupuesto que la UE dedica a la Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad Com¨²n: 35 millones de euros para este a?o, una cantidad que calific¨® de 'risible'. Compar¨® esa cantidad con los 29 millones que el Parlamento Europeo dedicar¨¢ este a?o a publicaciones o los 12 de la Comisi¨®n para proyectos de ciudades hermanadas.
Como modo de conclusi¨®n, Solana transmiti¨® a los reunidos que la solidaridad debe ser 'una noci¨®n crucial' de los Estados europeos a la hora de repartirse responsabilidades y cargas en materia exterior, a la vez que minusvalor¨® el debate entre los partidarios de f¨®rmulas intergubernamentales (m¨¢s peso a los Gobiernos) o del m¨¦todo comunitario (m¨¢s poder para Bruselas).
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