El Poder Judicial investiga la excarcelaci¨®n de un etarra condenado por seis asesinatos

La excarcelaci¨®n del etarra F¨¦lix Ram¨®n Gil Ostoaga, condenado a 298 a?os de c¨¢rcel por seis asesinatos y puesto en libertad condicional por la juez de vigilancia de Bilbao, Ruth Alonso, desencaden¨® ayer una nueva tormenta pol¨ªtico-judicial en torno al cumplimiento de las penas por delitos de terrorismo. El ministro de Justicia, Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila, anunci¨® la inmediata puesta en funcionamiento de un juzgado de vigilancia para delincuentes y terroristas condenados por la Audiencia Nacional, y el presidente del Consejo del Poder Judicial, Francisco Hernando, encarg¨® a la Inspecci¨®n que investigue lo sucedido.

F¨¦lix Ram¨®n Gil Ostoaga, de 45 a?os, hab¨ªa estado cuatro a?os encarcelado en Francia. El 20 de enero de 1994 fue extraditado a Espa?a, donde fue condenado a 298 a?os por seis asesinatos consumados y dos frustrados. Tras pasar por varias prisiones, lleg¨® el 26 de febrero de 1999 a Nanclares procedente del penal de C¨®rdoba, dentro del grupo de presos que fue acercado a Euskadi durante la tregua como gesto de buena voluntad hacia ETA ante el inicio de las conversaciones.

El pasado abril, Ostoaga pidi¨® a la Junta de Tratamiento de Nanclares su paso al tercer grado (semilibertad), que fue rechazado por unanimidad. El preso recurri¨® a la juez de Vigilancia, quien pidi¨® informes a la c¨¢rcel. Fuentes del Ministerio del Interior indicaron que todos los informes fueron negativos, ya que, se dec¨ªa, Ostoaga 'no se desmarca de su grupo de referencia' [ETA], particip¨® en dos huelgas de hambre este a?o y en sus peticiones se autocalificaba como 'preso pol¨ªtico vasco'.

La juez, seg¨²n fuentes de la Audiencia Nacional, consider¨® acumulable el tiempo pasado en prisi¨®n en Francia y en Espa?a, por lo que estim¨® que Ostoaga hab¨ªa cumplido 13 a?os de condena efectiva. Al haber sido sentenciado por el antiguo C¨®digo Penal, Ostoaga pod¨ªa beneficiarse de la redenci¨®n de penas por trabajo, lo que a?ad¨ªa a los 13 a?os de cumplimiento 9 de redenci¨®n: 22 a?os en total. Con ese tiempo pod¨ªa acceder a la libertad condicional, al tener cumplidas las dos terceras partes de la pena m¨¢xima de 30 a?os, a los que quedan reducidos los 298 de condena. Si no se hubiera incluido el encarcelamiento en Francia, habr¨ªa salido de prisi¨®n en 2007.

Recursos del fiscal

La aplicaci¨®n matem¨¢tica de las penas permiti¨® a la juez llegar a la excarcelaci¨®n, pero esa regla choca con el criterio de Instituciones Penitenciarias. El fiscal de vigilancia recurri¨® de inmediato, argumentando que el preso se hab¨ªa negado a disfrutar de los permisos penitenciarios a que ten¨ªa derecho, 'siguiendo las pautas de los presos de ETA'. La juez rechaz¨® el recurso, y el d¨ªa 9 Ostoaga sali¨® de prisi¨®n. El fiscal ha vuelto a recurrir.

Ostoaga fue condenado por una cadena de atentados cometidos en 1978 y 1979 con el comando Urola. En esos a?os particip¨® en los asesinatos de cinco guardias civiles en varias localidades de Guip¨²zcoa y en el de Juan Vivot Undabarrena, alcalde de Olaberr¨ªa, asesinado a tiros en el portal de su casa (de donde hab¨ªa sido sacado por los terroristas tras amenazar a su familia), el 6 de febrero de 1979.

Tras conocerse ayer la excarcelaci¨®n de Ostoaga, el ministro de Justicia, Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila, anunci¨® la inmediata puesta en marcha del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional para los delitos que son competencia de ese ¨®rgano judicial (narcotr¨¢fico a gran escala y terrorismo). La propuesta, que figuraba entre los primeros documentos para la reforma de la justicia, suscit¨® de inmediato la adhesi¨®n de jueces y fiscales antiterroristas. El presidente de la Sala Penal de la Audiencia Nacional, Siro Garc¨ªa, y el fiscal jefe, Eduardo Fungairi?o, consideraron 'indispensable' crear dicho juzgado.

Las asociaciones de jueces y fiscales tambi¨¦n consideran 'razonable' y 'positiva' la creaci¨®n de ese juzgado, salvo Jueces para la Democracia, cuyo portavoz, Miguel Carmona, opin¨®: 'No es muy razonable que cada vez que se discrepe de una resoluci¨®n judicial concreta se piense en crear un ¨®rgano distinto'. El presidente del Consejo General Poder Judicial (CGPJ), Francisco Hernando, encomend¨® al Servicio de Inspecci¨®n la apertura de una 'informaci¨®n previa' sobre los hechos. Sin embargo, el vocal delegado para las relaciones con los jueces de Vigilancia, F¨¦lix Pantoja, critic¨® esta decisi¨®n por 'absolutamente precipitada' y 'coactiva con la libertad de decisi¨®n jurisdiccional'.

La juez Ruth Alonso indic¨® a este peri¨®dico: 'Nunca en mi vida he tomado una decisi¨®n de este tipo sin contar con los preceptivos informes t¨¦cnicos favorables. Desde 1992 hemos dado luz verde a numerosas libertades condicionales y terceros grados de presos con delitos de sangre o sin ellos, pero nunca de manera arbitraria', informa Aitor Guenaga. Seg¨²n Alonso, existen informes de t¨¦cnicos del centro que aprecian que 'el pron¨®stico de reinserci¨®n social del preso era favorable' y la posibilidad de reincidencia 'era nula o baja'. La juez no ocult¨® su sorpresa por la decisi¨®n del CGPJ de abrirle una informaci¨®n previa. 'No me lo puede creer. ?Alguien se piensa que hacemos las cosas a la ligera?', se pregunt¨®. Alonso revel¨® que este verano concedi¨® el tercer grado a otros presos: dos en julio y otros dos en agosto.

La juez ha otorgado otros beneficios penitenciarios similares a miembros de ETA, algunos de ellos cr¨ªticos con las tesis de la banda, como el expulsado Jos¨¦ Miguel Latasa, a quien se lo dio en 1996. En septiembre de 1994 la jueza se lo concedi¨® al ex ertzaina condenado por colaborar con ETA (luego expulsado de la banda) Jos¨¦ Miguel Sueskun, y en julio de ese mismo a?o al etarra Jos¨¦ Ram¨®n Bidaburu, condenado a m¨¢s de 172 a?os y tambi¨¦n expulsado.