La causa es la desigualdad
En relaci¨®n al reportaje publicado el 13 de octubre con el t¨ªtulo El peor c¨®mplice de la violencia familiar, quiero expresaros, como concejala de Pol¨ªtica de la Mujer del Ayuntamiento de Barcelona, mi desacuerdo con la orientaci¨®n del escrito. No comparto la afirmaci¨®n de que 'el 80% de las agresiones contra las mujeres est¨¢ relacionado con el alcohol'. Dicho as¨ª, parece que el alcohol sea el causante de la violencia contra las mujeres. Los estudios mayoritarios que se han hecho sobre hombres maltratadores y situaciones de violencia desmienten esta aseveraci¨®n. El reciente congreso que se ha celebrado en Valencia por la Red Europea sobre G¨¦nero, Conflicto y Violencia, ha mostrado con estudios procedentes de diversos pa¨ªses europeos que no se puede establecer una relaci¨®n causal.
La violencia contra las mujeres radica en una situaci¨®n de desigualdad entre hombres y mujeres, lo cual se hace evidente al observar que la violencia que ejercen los maltratadores (sean alcoh¨®licos o no) es selectiva, y s¨®lo se produce hacia sus mujeres o, como mucho, hacia los hijos e hijas, tambi¨¦n en situaci¨®n de desigualdad en el seno de la familia. Si el alcohol tuviera una relaci¨®n causal con la violencia familiar, tendr¨ªamos un ¨ªndice elevado de mujeres alcoh¨®licas que agreder¨ªan a sus compa?eros, y no es as¨ª.
Parece ser que hay situaciones que podr¨ªan facilitar el desencadenamiento de episodios violentos, como ahora la pobreza, un entorno sociocultural bajo o alg¨²n tipo de adicciones (aunque haya estudios contradictorios en relaci¨®n a este punto), pero en ning¨²n caso puede considerarse la pobreza, ni el entorno cultural bajo ni la drogadicci¨®n como causantes de la violencia hacia las mujeres. Establecer esta relaci¨®n causa-efecto es peligroso por diversos motivos: porque nos lleva a justificar a los maltratadores, a considerarlos enfermos y a desviar la causa de la violencia (y, paralelamente, nuestras conciencias) del verdadero n¨²cleo, que no es otro que la situaci¨®n de discriminaci¨®n y desigualdad que a¨²n padecemos las mujeres frente los hombres en nuestra sociedad.
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