Degradaci¨®n humana
Si estremecedor es o¨ªr la confesi¨®n fr¨ªa y sin el menor atisbo de sentimiento, que no s¨®lo han sido tres, sino trece m¨¢s las mujeres por ¨¦l asesinadas y violadas, a¨²n lo es m¨¢s ver a su verdugo salir exultante y vitoreado de los juzgados, tras haber ejecutado lo que ellos llaman la ley de la c¨¢rcel. La espiral de la violencia lleva a la degradaci¨®n de la venganza y ¨¦sta no tiene fin. No me gustar¨ªa ver la misma escena de un nuevo asesino para el vengador, y de nuevo jaleado y vitoreado. Al mismo tiempo, vemos c¨®mo en EE UU los fiscales de los distintos Estados se subastan al presunto francotirador. El espect¨¢culo est¨¢ servido y la degradaci¨®n humana no ha tocado fondo.
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