Autogobierno: ?pa¨ªs o partido?

Soy de los convencidos de que el tema del autogobierno tiene un discurrir como el Guadiana y hay quien lo plantea o lo aparca seg¨²n conveniencias partidistas. Sin ir m¨¢s lejos, puedo recordar el ¨²ltimo debate de pol¨ªtica general, celebrado en el Parlament hace pocas semanas, en el que nadie, excepto un grupo, habl¨® de lo que puede significar la decisi¨®n de la multinacional Volkswagen de trasladar la fabricaci¨®n del Seat Ibiza a Bratislava, o de los efectos sobre el ahorro como m¨ªnimo de la crisis EE UU-Irak, o de la nueva ola de expedientes de regulaci¨®n en el sector textil, y en cambio casi todo gir¨® sobre el autogobierno. De hecho, la resoluci¨®n o el acuerdo m¨¢s publicitado fue el de la votaci¨®n conjunta de CiU y ERC para comprometerse a reformar el Estatuto; eso s¨ª, en la pr¨®xima legislatura. Una vez m¨¢s el autogobierno serv¨ªa para ahogar el debate concreto y social en sede parlamentaria.

En el debate de pol¨ªtica general casi no se habl¨® de Seat ni de la crisis EE UU-Irak, casi todo gir¨® sobre el autogobierno

Sin embargo, el autogobierno es importante, deber¨ªa ser siempre una cuesti¨®n de pa¨ªs aunque s¨®lo lo fuese por lo anterior, para impedir su posible manipulaci¨®n. Formulado en t¨¦rminos positivos, el tema del autogobierno es una cuesti¨®n como las que los americanos denominan non partisan issues; o sea, una cuesti¨®n de suficiente importancia como para situarla por encima de las luchas partidistas y susceptible de grandes acuerdos de consenso. En esta l¨ªnea se decidi¨® en el Parlament, al iniciarse esta legislatura, constituir una comisi¨®n de estudio sobre la reforma del autogobierno. Tras m¨²ltiples sesiones, tras recibir en audiencia las opiniones de los mejores expertos del pa¨ªs, tras escuchar la posici¨®n de las instituciones m¨¢s implicadas, tras la presentaci¨®n de documentos por parte de todos los grupos parlamentarios, se fue a la redacci¨®n de un dictamen. ?ste recoge las reformas m¨¢s pr¨¢cticas y efectivas para mejorar sensiblemente el autogobierno. Estas posibles reformas, que cambiar¨ªan sustancialmente, en positivo, el marco institucional catal¨¢n, cuentan con el aval de cuatro grupos parlamentarios de los cinco que hay en la C¨¢mara. CiU, el PSC, ERC e ICV est¨¢n de acuerdo b¨¢sicamente sobre aquel texto. La pregunta es elemental: ?qu¨¦ impide aprobarlo y avanzar con ¨¦l en todos los procesos pol¨ªticos, parlamentarios, de negociaci¨®n, aqu¨ª o all¨¢, que hagan falta?

CiU y ERC, como he recordado, aprobaron retrasar la cuesti¨®n hasta la pr¨®xima legislatura. El conseller Mas habla de un nuevo Estatuto para el pr¨®ximo mes de marzo; o sea, a¨²n en esta legislatura. ERC presenta propuestas radicales de mejora del autogobierno estas mismas semanas. ?A qu¨¦ jugamos?

Quiero recordar las palabras de Pujol en abril de 1980, cuando, bajo presi¨®n de ERC, tomaba el siguiente compromiso: 'Yo, en este sentido, les quiero, aqu¨ª, ahora, declarar mi intenci¨®n como candidato a la Presidencia de la Generalitat de iniciar el proceso de reforma del Estatuto dentro del marco estatutario y, de acuerdo con lo que dice la Constituci¨®n, en el curso de esta legislatura'.

En el a?o 1987 Pujol provoc¨® un debate general monogr¨¢fico sobre el Estatuto, donde tambi¨¦n adquiri¨® compromisos solemnes dentro de los que incluso propuso 'exponer ante la jefatura del Estado'.

En el debate de investidura siguiente a las elecciones de 1999 afirm¨® que la mejora del autogobierno, junto con la financiaci¨®n auton¨®mica, ser¨ªa el tema prioritario.

Esta lista de compromisos me sirve para subrayar el car¨¢cter instrumental que da Pujol a sus compromisos institucionales sobre esta cuesti¨®n. Entre cada uno de ellos ha gobernado con el apoyo o dando el apoyo a las fuerzas menos autonomistas del Estado espa?ol en cada periodo. Ha jugado con un tema fundamental, la arquitectura b¨¢sica institucional del pa¨ªs, seg¨²n sus conveniencias peri¨®dicas.

?Imaginan ustedes a un presidente de gobierno de una democracia madura hablando con tanta ligereza y frivolidad sobre este tipo de temas? ?C¨®mo le calificar¨ªan los analistas? ?Por qu¨¦ es posible que suceda eso aqu¨ª, sin pr¨¢cticamente ning¨²n efecto pol¨ªtico?

Quien quiera encabezar una alternativa, el gobierno de la nueva etapa, debe llevar hacia la seriedad y la responsabilidad esta cuesti¨®n, buscando el m¨¢s amplio acuerdo. Y esto empieza por continuar y culminar el trabajo sereno en esta legislatura, la cual, sea dicho de paso, tiene a¨²n 13 meses de vida. As¨ª tambi¨¦n contribuir¨ªamos a separar el tema del autogobierno, tema de pa¨ªs, de las leg¨ªtimas confrontaciones partidistas sobre las pol¨ªticas concretas de gobierno, la sanidad, el territorio, la ense?anza, etc¨¦tera.

Si CiU quiere obturar las instancias catalanas de debate y acuerdo sobre el autogobierno para, entre otras cosas, continuar viviendo de la rifa de agitar dicha cuesti¨®n seg¨²n sus conveniencias partidistas, ser¨ªa positivo que se aclarase pronto si lo har¨¢ con los votos del PP o de ERC. La soluci¨®n, en lo inmediato, la podemos ver en los avatares de la comisi¨®n de autogobierno.

Rafael Rib¨® es presidente del grupo de ICV en el Parlament.