Los 'masters' ganan cuota laboral
Las ofertas de empleo que valoran la formaci¨®n de posgrado se han duplicado en el ¨²ltimo a?o
M¨¢s de un 4,5% de las ofertas de empleo cualificado publicadas entre abril de 2001 y abril de 2002 en el portal Infoempleo valoraban de manera expl¨ªcita que el candidato tuviera estudios de posgrado. Un a?o antes, el porcentaje apenas alcanzaba el 2%. El master es lo que atrae cada vez m¨¢s a las empresas, aunque, seg¨²n los expertos, no garantiza la obtenci¨®n de un trabajo.
En el 4,5% de las ofertas de empleo cualificado se menciona de forma expl¨ªcita como requisito esta formaci¨®n, seg¨²n C¨ªrculo de Progreso
La formaci¨®n de posgrado ha crecido en Espa?a de manera constante en los ¨²ltimos a?os (s¨®lo en 2001 lo hizo un 20%) y las empresas le prestan cada vez m¨¢s atenci¨®n. Seg¨²n un estudio elaborado por C¨ªrculo de Progreso, esta formaci¨®n para licenciados universitarios se requiere ahora en el doble de ocasiones que hace un a?o. Se menciona expl¨ªcitamente en un 4,5% de las ofertas de empleo cualificado, porcentaje que esconde una demanda mucho mayor, seg¨²n Mar¨ªa Benjumea, directora general de esta consultora: 'Las compa?¨ªas que especifican que quieren un t¨ªtulo de posgrado lo hacen porque buscan uno concreto, puntero. Pero hay otras muchas que, aunque no detallan sus preferencias, tambi¨¦n lo valoran'.
El informe Infoempleo 2002, que mide la oferta y demanda de empleo cualificado en Espa?a, destaca la valoraci¨®n creciente de estos cursos en cualquier categor¨ªa profesional y nivel de experiencia, pero sobre todo en el caso de los directivos. El 10,53% de las ofertas que piden este tipo de formaci¨®n se refiere a ellos, mientras s¨®lo el 1,32% va dirigido a los empleados. El director de Estudios de C¨ªrculo de Progreso, Salvador Arag¨®n, cree sin embargo que seguir estudiando despu¨¦s de la Universidad tambi¨¦n aporta beneficios a los reci¨¦n titulados: 'Para un puesto que exija entre seis meses y un a?o de experiencia, el curr¨ªculum de un candidato inexperto, si ha cursado un posgrado, ser¨¢ tenido en cuenta'.
Desde el C¨ªrculo se aclara que son t¨ªtulos como los de especialista y experto universitario los que atraen la atenci¨®n de las empresas, mientras el doctorado no se demanda en absoluto ('s¨®lo en torno al 17% de los doctores se colocan en la empresa privada', aseguran). Pero la estrella del posgrado son los masters. La consideraci¨®n general es que estos programas a?aden al curr¨ªculo m¨¢s puntos que ning¨²n otro, pero cuando se trata de concretar cu¨¢ntos, comienzan las divergencias.
Benjumea opina que un master no garantiza el empleo, pero aumenta las posibilidades si se trata de un curso de calidad: 'No todos los centros ni programas son iguales, pero uno cursado en una escuela de prestigio internacional dice mucho del candidato. Y para eso no hace falta irse al extranjero'.
Enrique de Mulder, presidente de la consultora Hay Group, es bastante m¨¢s reacio con respecto a los masters: 'Pedirlos los piden todas las empresas. Otra cosa es que realmente los valoren. El master es hoy en d¨ªa algo como anta?o la mili y el carn¨¦ de conducir. Se pone en el curr¨ªculo, pero no es determinante'. Para De Mulder, estos programas se han convertido en un recurso habitual: 'Publicas una oferta de trabajo y te contestan 5.000 personas, muchas de ellas con cursos de posgrado'.
Algunos programas muy especializados, como los de Asesor¨ªa Jur¨ªdica o Asesor¨ªa Fiscal, s¨ª se han ganado ya la fama de ¨²tiles en su sector, seg¨²n Benjumea. Pero De Mulder opina que, en estos casos, es la propia empresa la que tiende a impartirlos: 'En vez de buscar gente con estos t¨ªtulos, las compa?¨ªas contratan a reci¨¦n licenciados y los forman'.
Menos MBA
Seg¨²n Infoempleo 2002, estos cursos se exigen sobre todo cuando se ofertan puestos relacionados con marketing, recursos humanos y direcci¨®n general. Sin embargo, importan escasamente a la hora de cubrir plazas en servicios generales, inform¨¢tica o atenci¨®n al cliente. Por titulaciones, aportan mucho para profesionales del derecho, econom¨ªa y marketing, y poco a los ingenieros de telecomunicaciones y arquitectos.
El estudio destaca, adem¨¢s, que aparecen nuevas materias formativas y desciende el peso relativo de los MBA (masters en Direcci¨®n y Administraci¨®n de Empresas). Hace dos a?os supon¨ªan un 57% de la oferta que valoraba este tipo de formaci¨®n, y ahora s¨®lo un 52%. Para Benjumea, el MBA es a¨²n el master m¨¢s extendido porque 'aporta un conocimiento gen¨¦rico que tiene aplicaci¨®n en muchas ¨¢reas'. Seg¨²n De Mulder, 'es quiz¨¢ el programa que tiene m¨¢s validez no para entrar, pero s¨ª para promocionarse' en una empresa.
Ni Benjumea ni De Mulder tienen opiniones directas sobre un reciente informe de la Universidad de Stanford que ha levantado gran revuelo en Estados Unidos. En ¨¦l, los profesores Jeffrey Pfeffer y Christina Fong demuestran que con un MBA no se consiguen mejores salarios ni carreras. Benjumea s¨®lo insiste en la calidad de los cursos: 'Si son buenos, siempre van a tenerse en cuenta'. De Mulder es taxativo: 'Nosotros no miramos el expediente, buscamos competencias. Queremos gente flexible, innovadora, emp¨¢tica, resistente al estr¨¦s, capaz de ponerse los zapatos del cliente. Y eso no te lo ense?a ning¨²n master. Bueno... Si el candidato tiene este t¨ªtulo, todav¨ªa mejor'.
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