Un islamista moderado en busca del modelo democristiano
Buen creyente musulm¨¢n, se considera un pol¨ªtico conservador en un Estado laico
Es un buen creyente musulm¨¢n y no bebe. Pero al contrario que el presidente iran¨ª, Mohamed Jatam¨ª, no le molesta que los embajadores de la Uni¨®n Europea en Ankara se sienten a su mesa con una copa de vino.
Su mujer, Emine, no se quita nunca el pa?uelo de la cabeza, mientras que todas las candidatas del Partido de la Justicia y el Desarrollo van peinadas a lo Tansu ?iller (ex primera ministra).
Ha anunciado que su esposa no asistir¨¢ a actos oficiales que proh¨ªben el velo
Se considera ante todo un pol¨ªtico conservador, como los democristianos alemanes, en un Estado laico, seg¨²n relat¨® hace pocos d¨ªas a este peri¨®dico. La biograf¨ªa oficial de Recep Tayyip Erdogan distribuida por el Partido de la Justicia y el Desarrollo dice que naci¨® en Estambul en 1954, pero en realidad vino al mundo en Rize, en la costa del mar Negro. Es cierto, sin embargo, que se cri¨® en las calles de la antigua Constantinopla, donde fue un emprendedor adolescente que vend¨ªa simit: roscas con s¨¦samo.
Pas¨® por la Universidad de M¨¢rmara para cursar Ciencias Empresariales antes de entrar a trabajar en la empresa municipal de transportes de Estambul. Curiosamente, su partido pasa por alto sus estudios secundarios en un imam hatip, una especie de seminario cor¨¢nico donde suelen estudiar los chicos listos sin dinero.
No est¨¢ claro c¨®mo lleg¨® a meterse en pol¨ªtica. Sus correligionarios dicen que a los 15 a?os ya era un l¨ªder juvenil. Al parecer, conoci¨® m¨¢s tarde en la Universidad al entonces profesor Necmettin Erbakan, que en 1996 llegar¨ªa a ser el primer jefe de Gobierno islamista de la Turqu¨ªa moderna. Erdogan alcanz¨® proyecci¨®n p¨²blica en Turqu¨ªa en las filas del islamismo pol¨ªtico en 1994, al ganar en las urnas por un estrecho margen la alcald¨ªa de Estambul frente al candidato socialdem¨®crata, el m¨²sico Zulfu Livaneli.
Tras llegar al poder en la mayor ciudad del Mediterr¨¢neo, se cre¨® fama de buen gestor por su actitud de intocable ante la corrupci¨®n. Representaba entonces a la joven generaci¨®n islamista, el ala liberal del Partido de la Prosperidad, dirigido por beatos septuagenarios.
El acoso y derribo organizado por el aparato laico del Estado contra el Gobierno de Erbakan, que dimiti¨® ante las presiones del Ej¨¦rcito, golpe¨® de lleno tambi¨¦n a Erdogan. Fue expulsado de la principal alcald¨ªa turca y encarcelado durante cuatro meses, en 1998, bajo la acusaci¨®n de 'incitar al odio religioso por leer un poema isl¨¢mico'. Desde entonces se halla inhabilitado para todo cargo p¨²blico.
Hace apenas 15 meses rompi¨® con la vieja guardia de Erbakan, despu¨¦s de que el partidos islamista volviera a ser disuelto, y fund¨® AK (limpio): el partido que controla ahora casi dos terceras partes del Parlamento turco. Sabe que el poder laico vigila sus pasos y mide hasta la m¨¢s insignificante declaraci¨®n. Dentro de dos semanas est¨¢ convocado por la fiscal¨ªa para que deje la presidencia de su organizaci¨®n. De momento, para evitar controversias con jueces y militares, ya ha anunciado que su esposa, con quien ha tenido cuatro hijos, no asistir¨¢ a actos oficiales en Turqu¨ªa, donde ignorar la vestimenta laica est¨¢ a¨²n prohibido.
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