Un irreverente Robbie Williams presenta en Berl¨ªn 'Escapology', su nuevo disco
El cantante brit¨¢nico niega que su inter¨¦s comercial est¨¦ centrado en Estados Unidos
La presentaci¨®n del ¨²ltimo disco de Robbie Williams, ayer en Berl¨ªn, dej¨® clara al menos una cosa. Aquel muchacho que con 16 a?os trataba de abrirse un hueco en el pop ingl¨¦s con Take that se ha convertido en una megaestrella, con un tratamiento que los jefes de Estado no reciben en Alemania. El cantante brit¨¢nico anunci¨® una gira por toda Europa (que de momento no incluye Espa?a) y se ri¨® de los que le atribuyen un inter¨¦s desmedido por triunfar en Estados Unidos, un mercado que hasta ahora se le ha resistido. "Me importa un pimiento", dijo.
Pocos en Berl¨ªn recordaban ayer semejante despliegue de seguridad. Decenas de agentes, coches de polic¨ªa y barreras que aislaban la Embajada brit¨¢nica en la capital alemana, el sitio elegido por Williams para presentar su ¨²ltimo disco, Escapology, y detallar la gira que le llevar¨¢ el a?o que viene por ocho pa¨ªses europeos. La lista que ofreci¨® la organizaci¨®n no incluye, de momento, a Espa?a. El despliegue se corresponde con el nuevo estatuto de Williams, que con 28 a?os se ha convertido en el cantante mejor pagado del mundo tras firmar un contrato r¨¦cord de 100 millones de d¨®lares con su actual discogr¨¢fica, EMI.
Y algo de todo eso se le notaba al cantante. Apareci¨® sencillo, con una cazadora negra abrochada hasta el cuello y unos vaqueros gastados. Pero reconoci¨® que est¨¢ viviendo un momento especial. "Esto es la cumbre de mi carrera; tanto este disco como la gira que voy a emprender el a?o que viene; a partir de aqu¨ª, lo ¨²nico que puede pasar es que vaya cuesta abajo".
El tono general de Robbie Williams durante la presentaci¨®n fue de irreverencia, su pose favorita. Pero en esta ¨²ltima afirmaci¨®n sobre la posibilidad de un traspi¨¦s en la vertiginosa carrera de que ha disfrutado hasta ahora hab¨ªa un trasfondo de sinceridad. Alguien pregunt¨® por Mariah Carey, que, tras firmar tambi¨¦n un contrato multimillonario, fue despedida por su discogr¨¢fica despu¨¦s del fracaso de sus ¨²ltimos discos. Williams hizo una broma, pero no quiso entrar en el fondo de la cuesti¨®n. "No me importa la cuesti¨®n econ¨®mica; tengo dinero, y en lo ¨²nico que me lo gasto es en una casa y en un buen estilo de vida; el resto no me interesa; y desde luego, no voy a devolver lo que me han pagado".
El mercado americano
Lo que s¨ª neg¨® con vehemencia son las desaforadas ambiciones que se le atribuyen en Estados Unidos. Williams ha pasado ¨²ltimamente tiempo all¨ª y grab¨® un v¨ªdeo de su disco anterior con Nicole Kidman (Something Stupid, el viejo ¨¦xito de Frank y Nancy Sinatra), destinado especialmente a ese mercado.
"Ya s¨¦ que todo el mundo dice que mi nuevo disco est¨¢ destinado, obviamente, a los americanos, y que tengo tantas ganar de triunfar all¨ª", explic¨® el cantante. "Pues bueno; me importa un pimiento; no estoy interesado en triunfar en Estados Unidos; es demasiado trabajo", asegur¨® el cantante.
El resto de la presentaci¨®n gir¨® alrededor de las diversas pol¨¦micas sobre la vida privada del cantante, su capacidad o no para escribir sus propios temas, y especialmente sobre uno de los v¨ªdeos que ha grabado recientemente, en el que aparece desnudo durante unos breves instantes. La explicaci¨®n de Williams en torno a su desnudo fue ¨¦sta: "Bueno, el caso es que tengo un pene enorme, y creo que todo el mundo deber¨ªa verlo". Sexo y bromas aparte, Williams confirm¨® que en la gira que iniciar¨¢ en enero tocar¨¢ la guitarra, una habilidad que se le desconoc¨ªa hasta ahora. "He aprendido yo s¨®lo", dijo con orgullo.
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