?Qui¨¦n toma las decisiones?

Aunque seg¨²n el derecho internacional del mar, la jurisdicci¨®n espa?ola tiene su l¨ªmite en las 12 millas n¨¢uticas desde la costa -el mar territorial-, el Gobierno espa?ol no ha perdido en ning¨²n momento su competencia para decidir sobre el destino del Prestige una vez siniestrado, seg¨²n el abogado Carlos P¨¦rez, experto en derecho mar¨ªtimo. "La defensa de los intereses p¨²blicos que corresponde al Gobierno espa?ol convierte sus decisiones en prevalentes sobre cualesquiera otras", a?adi¨® P¨¦rez. Este criterio es el que justifica la competencia espa?ola para alejar el barco cuanto se considere necesario, en funci¨®n de esos intereses o el esgrimido por Portugal, que envi¨® un helic¨®ptero y una fragata para hacer valer su decisi¨®n de impedir todo acercamiento del barco siniestrado a sus aguas jurisdiccionales.

La vigilancia y control de las condiciones de seguridad del propio barco corresponde al pa¨ªs en que est¨¦ registrado y cuyo pabell¨®n enarbole. No obstante, a?ade Carlos P¨¦rez, estar¨¢ obligado a cumplir las medidas de seguridad que rijan en el puerto de embarque o de las normas vigentes en los puertos en que atraque durante su traves¨ªa.

El Prestige parti¨® de un puerto de Letonia y se dirig¨ªa a Gibraltar "a ¨®rdenes", lo cual indica, en la terminolog¨ªa del sector, que comienza la traves¨ªa con ese destino, pero en expectativa de cambiarlo si as¨ª se lo ordena el armador al capit¨¢n. Esta situaci¨®n es bastante frecuente, debido a que en ocasiones los armadores, despu¨¦s de cargar, dan la orden de zarpar sin tener el producto totalmente vendido, o incluso sin haber vendido nada, de manera que s¨®lo durante la traves¨ªa les es posible concretar los compradores y dirigir consecuentemente el rumbo del barco.