Golfos y golfistas
Ayer, fue el d¨ªa de los empresarios; hoy, les toca el turno a los grupos ecologistas, EU e IU, con Rib¨® y Llamazares, a la cabeza, Els Verds y los despendolados que bajan de Arag¨®n y Catalu?a, no contra valencianos y murcianos, "sino contra un plan que atenta contra todos". A los de la Cierval y a los del PP, que no se aclaran entre s¨ª, se les vio la oreja: green por esca?os; hoyos por votos. Los primeros, con la bandera de un PHN, que cubre caudales de especulaciones y de artima?as electoralistas; los segundos, por una nueva cultura del agua, para impedir la voladura medioambiental. Y voces autorizadas que exigen un modelo de agricultura valenciana, porque "lo que interesa a algunos es que la agricultura desaparezca del arco mediterr¨¢neo, para convertirlo as¨ª en el geri¨¢trico de la Uni¨®n Europea. Un pacto entre caballeros", comenta Ernest Blasco, coordinador en las comarcas alicantinas de la Uni¨® de Llauraors. Lamentable que el d¨¦ficit h¨ªdrico, que pasa por una soluci¨®n equilibrada y racional, se utilice como instrumento de confrontaci¨®n.
Del "ni una gota de agua trasvasada para los campos de golf", que anunci¨® el Gobierno del PP, al "los campos de golf producen una rentabilidad que no produce ning¨²n tipo de cultivo", en desafortunada y triunfal declaraci¨®n de Javier L¨®pez, secretario de la Coepa, se abre una contradicci¨®n profunda, reveladora y de dif¨ªcil apa?o. Alguien miente en todo esto. Javier Arenas se ha apresurado a concretar la redacci¨®n del art¨ªculo 17 de la Ley del Plan Hidrol¨®gico Nacional: las aguas del trasvase s¨®lo para el abastecimiento de ciudades, municipios y regad¨ªos. Javier L¨®pez ha tenido que envain¨¢rsela. Aunque algo tarde ya: hab¨ªan ense?ado hasta el plumero.
Pero los campos de golf no s¨®lo se tragan mucha agua, aunque sea de tercera calidad, sino que precisan la tira de hect¨¢reas, para instalaciones e infraestructuras. Y basta visitar una comarca, como la de la Vega Baja, con el Segura envenenado, para percatarse del destino del sector agropecuario: cuatro mil familias residentes y una mano de obra estacional pueden irse al traste. Demasiados empleos en capilla. La agricultura es una profesi¨®n desacreditada a prop¨®sito y lista para su amortizaci¨®n. ?Qu¨¦ previsiones se han tomado en este orden de cosas? Aunque, seg¨²n la UE, para el a?o 2010, el 12 por ciento del suelo agr¨ªcola de nuestra autonom¨ªa deber¨¢ utilizarse para cultivos ecol¨®gicos, en la actualidad s¨®lo se dispone del 4 por ciento.
Y si bien es verdad que los campos del golf, en n¨²mero desorbitado, particularmente en la provincia de Alicante -ya en funcionamiento o en proyecto- exigen un alto consumo de agua, m¨¢s cuantioso es a¨²n el de las urbanizaciones, hoteles y servicios que se han construido y se construir¨¢n en sus inmediaciones. Ah¨ª est¨¢ el negocio. Una especulaci¨®n tan abusiva presagia un futuro ca¨®tico. Cubierta una determinada cuota, el precio del agua se disparar¨¢ notablemente. Aunque el franquismo ha sido condenado, existe y se perpet¨²a. Y se perpet¨²an sus fara¨®nicas obras p¨²blicas. El trasvase del Ebro quiz¨¢ no vaya m¨¢s all¨¢ de un reclamo electoral. De momento, a ver d¨®nde se coloca la presa para regular los caudales del hipot¨¦tico trasvase, porque nadie la quiere. O sea, a d¨ªa de hoy, ni cascabel, ni gato.
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