Temporeros sin techo
Cientos de inmigrantes colapsan los alojamientos abiertos para la campa?a de la aceituna en Ja¨¦n
Nikolau y Loska, un matrimonio que ha dejado a sus tres hijos en Bulgaria y ha venido a Espa?a "para poder comer", reanudan hoy su particular odisea por los campos de olivos de Ja¨¦n. Despu¨¦s de tres d¨ªas bajo un techo decente y comida caliente en el centro de atenci¨®n a inmigrantes de la capital jiennense vuelven a enfrentarse a un oscuro deambular por calles y lugares inh¨®spitos, los mismos que han utilizado como improvisados alojamientos desde su llegada a esta tierra. Como ellos, decenas de temporeros marroqu¨ªes, argelinos, mauritanos, ucranios, rumanos y b¨²lgaros aguardan desde hace varias semanas el inicio de la campa?a de recolecci¨®n de la aceituna, que no se activar¨¢ hasta la primera semana de diciembre. Aunque la situaci¨®n no es tan dram¨¢tica como en otros a?os, los alojamientos p¨²blicos se han saturado dejando a muchas personas durmiendo a la intemperie.
"Tres d¨ªas son muy pocos para que podamos estar aqu¨ª". Oumar y Ahmed se lamentan de la normativa tan estricta que limita a 72 horas el tiempo m¨¢ximo de permanencia en el centro municipal de atenci¨®n al inmigrante de la capital jiennense. Este albergue improvisado, habilitado sobre una antigua nave industrial, tuvo que abrir sus puertas de forma precipitada el pasado viernes porque las inclemencias meteorol¨®gicas hab¨ªan agravado las inhumanas condiciones de vida de muchos inmigrantes que dorm¨ªan refugiados en las calles y parques de Ja¨¦n, seg¨²n denunciaron los sindicatos y constataron los voluntarios de C¨¢ritas, que se vieron obligados a repartir mantas la semana pasada.
Esta estampa sonroj¨® a los pol¨ªticos locales. "No podemos permitirnos im¨¢genes tercermundistas", reconoc¨ªa el alcalde de Ja¨¦n, Miguel S¨¢nchez de Alc¨¢zar (PP), en la inauguraci¨®n del centro de inmigrantes, el primero que abr¨ªa sus puertas en la geograf¨ªa provincial. Apenas 24 horas despu¨¦s de su apertura ya ten¨ªa completadas sus 200 plazas. Lo mismo ha ocurrido con las 50 plazas del albergue de Torredelcampo, que tambi¨¦n se ha saltado la decisi¨®n de la Comisi¨®n Provincial de Inmigraci¨®n -compuesta por representantes de todos los organismos p¨²blicos y colectivos sociales- y ha anticipado su apertura al ¨²ltimo fin de semana. El resto, hasta completar los 17 albergues ubicados en otros tantos municipios de Ja¨¦n, no abren sus puertas hasta hoy lunes, con una capacidad global de 650 plazas.
Incremento de plazas
El dispositivo habilitado por los ayuntamientos, con el apoyo de la Junta de Andaluc¨ªa, ha aumentado en un 72% las plazas de alojamientos. Esta circunstancia, unida al descenso de un 40% en la cosecha de aceituna para esta campa?a, va a provocar que el contingente de trabajadores temporeros que llegue hasta Ja¨¦n sea bastante inferior a otros a?os, donde llegaron a congregarse hasta 8.000 inmigrantes. Con estos datos, la Comisi¨®n Provincial de Inmigraci¨®n fij¨® la apertura de los albergues para la ¨²ltima semana de noviembre con el fin de evitar el efecto llamada que suele producirse entre la poblaci¨®n inmigrante. Sin embargo, nada de eso ha podido evitar que, desde finales de octubre, decenas de inmigrantes colapsaran los centros de transe¨²ntes de muchos municipios.
La finalidad de los albergues es servir de tr¨¢nsito desde la llegada de los trabajadores for¨¢neos hasta que empiecen a trabajar en las fincas agr¨ªcolas. A partir de ah¨ª son los empresarios los responsables de facilitarles el alojamiento, algo que todav¨ªa encuentra mucha resistencia en determinadas organizaciones. Como la patronal agraria Asaja, que el a?o pasado se descolg¨® del pacto suscrito entre la Administraci¨®n andaluza, los sindicatos y los empresarios para pagar los alquileres a los jornaleros extranjeros. El motivo esgrimido entonces fue el agravio comparativo con respecto a los trabajadores locales.
A veces, los recelos de los olivareros provienen de la situaci¨®n laboral irregular de la mano de obra for¨¢nea. El a?o pasado fueron detenidos tres empresarios por contratar inmigrantes en situaci¨®n ilegal, y la Subdelegaci¨®n del Gobierno en Ja¨¦n ha advertido que las multas por esta infracci¨®n pueden llegar hasta los 60.000 euros.
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