Verg¨¹enza

Un presidente argumentando lo injustificable, un entrenador que con su cobarde t¨¢ctica hab¨ªa dejado sobrevivir a un Madrid de los peores de la historia queriendo utilizar el arma del desgaste f¨ªsico, y una parte de la afici¨®n que en 10 absurdos minutos acab¨® con un brillante historial de comportamiento. Resumiendo: nunca hab¨ªa sentido tanta verg¨¹enza en el Camp Nou.

Pero ya lo dijo Cruyff: aqu¨ª nunca pasa nada. La culpa, seg¨²n Gaspart, es de Figo; seg¨²n Van Gaal, de los periodistas de Barcelona, y seg¨²n algunos, de la madre Teresa de Calcuta. Pero nadie asume la propia. El s¨¢bado logramos lo m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa. En numerosos partidos, cuando peor estaban las cosas, sal¨ªa de lo m¨¢s hondo de nuestros corazones un ?Bar?a! ?Bar?a! que nos hac¨ªa remontar. El s¨¢bado logramos lo inveros¨ªmil. S¨®lo el grave estado de esquizofrenia que vive nuestro club es capaz de explicar que no gan¨¢ramos un partido que empez¨¢bamos a tener en la mano por lanzar al campo diversos objetos. Lo peor de todo es que no le lanzaron al rival una botella de JB vac¨ªa, sino una bombona de ox¨ªgeno llena cuando se estaba ahogando.