Un d¨ªa en las entra?as de Harry Potter
Se estrena 'La c¨¢mara secreta', segunda entrega cinematogr¨¢fica de las novelas de J. K. Rowling
Hermione Granger se adelanta a todos y levanta la mano de inmediato, dispuesta a contestar la pregunta que la profesora Sprout acaba de formular a los alumnos de Hogwarts, la escuela de magia y hechicer¨ªa de Harry Potter. Est¨¢n aprendiendo el cultivo de los mandraques, esas extra?as criaturas mitad animal mitad vegetal. En realidad no es Hermione Granger quien levanta la mano, sino Emma Watson, la joven actriz que interpreta a la estudiosa e inteligente amiga de Harry. Emma ha levantado la mano ya multitud de veces cuando por fin se oye una voz que dice "?Estupendo!". La toma, apenas unos segundos, parece ya del gusto de Chris Columbus, el director. "?Media hora de descanso!", anuncia alguien para solaz de la peque?a muchedumbre que abarrota este falso invernadero.
"Este filme es m¨¢s oscuro que el primero, pero hay m¨¢s acci¨®n y m¨¢s humor"
"Nuestro reparto no est¨¢ formado por estrellas. Eso nos ha beneficiado"
Aqu¨ª se mezclan ni?os-actores, t¨¦cnicos, chispas, periodistas, visitantes, familiares. Todos guardan un escrupuloso silencio cuando se rueda. Un se?or de mediana edad mata el tiempo leyendo el Telegraph en las largas y constantes pausas. Es el coordinador de v¨ªdeo. Su trabajo consiste en grabar todas las tomas del d¨ªa. S¨®lo tiene que apretar un bot¨®n para poner en marcha la grabaci¨®n. O pararla. O reproducir las im¨¢genes cuando le llega la orden a trav¨¦s de los auriculares. El hombre parece muy aburrido.
En realidad todo parece un poco aburrido en este antiguo aer¨®dromo, una antigua f¨¢brica aeron¨¢utica de la m¨ªtica Rolls-Royce en Leavesden, en la periferia de Watford, una zona residencial al noroeste de Londres. Viendo el industrioso y met¨®dico rodaje parece mentira que tanta parsimonia se transforme luego en velocidad y ritmo, en coches voladores, partidos de quidditch, peludas ara?as gigantes, o el terrible monstruo al que se enfrenta Harry en la fren¨¦tica lucha final en la c¨¢mara secreta.
Las antiguas naves de la vieja factor¨ªa de Rolls-Royce acogen ahora los estudios Leavesden, donde ya se rod¨® Harry Potter y la piedra filosofal, primera entrega de las novelas de J. K. Rowling. Ahora, un d¨ªa cualquiera de julio pasado, se?ores con peluca y trajes victorianos degustan bocadillos mientras esperan turno para que les acicale una se?orita con minifalda. Un poco m¨¢s all¨¢, un joven llamado Mike Alexander pasea a un perro bastante baboso de tres a?os y 60 kilos llamado Luigi. Alexander es el cuidador de los animales que aparecen en Harry Potter y la c¨¢mara secreta, que hoy se estrena en Espa?a y que en 15 d¨ªas ha recaudado 50 millones de euros en el Reino Unido batiendo su propio r¨¦cord.
En verano, cuando apenas quedaban dos semanas para acabar el rodaje, las enormes naves de los estudios Leavesden a¨²n acog¨ªan los escenarios que dan vida a la segunda aventura de Potter. La gran mayor¨ªa se utilizaron ya en la primera pel¨ªcula y volver¨¢n a ser desmontados y almacenados hasta que se empiece a rodar la tercera entrega, Harry Potter y el prisionero de Azkab¨¢n.
Los escenarios, los set, como dicen los entendidos, impresionan al reportero, novato en cosas de cine. "Es la pel¨ªcula que m¨¢s escayola ha gastado en toda la historia. ?M¨¢s que Gladiator!", presume, orgulloso, el cicerone de la prensa. Se encienden las luces y aparece el formidable sal¨®n-comedor de Hogwarts desvelando los trucos del cine: falsas paredes, decorados que dan enorme profundidad a unos pocos metros de escayola y pintura, potentes focos dirigidos desde fuera a las falsas ventanas para convertir la oscuridad en radiante sol de mediod¨ªa.
Aqu¨ª est¨¢ la c¨¢mara secreta, sus 16 serpientes y el gigantesco monstruo que aterroriza Hogwarts desde sus entra?as. "Cuando rodamos hab¨ªa un palmo de agua en el suelo; era impresionante", informa el cicerone. Aqu¨ª est¨¢ tambi¨¦n, a medio desmontar ya, la horripilante casa de los Dursley, en el n¨²mero 4 de Privet Drive. O el destartalado y encantador hogar de los Weasley, adonde Harry lleg¨® volando con el m¨¢gico Ford Anglia que luego le llevar¨¢ con Ron hasta la escuela. O la enfermer¨ªa en la que se repone tras su duelo de quidditch con Draco Malfoy. O el despacho del narciso profesor Lockhart, abarrotado con sus libros, con sus fotograf¨ªas, con decenas de espejos que devuelven su imagen.
El papel de Gilderoy Lockhart parece hecho a la medida del desmedido y egoc¨¦ntrico Kenneth Branagh, gran novedad en el reparto de la segunda entrega. "Kenneth ha interpretado de manera maravillosa el narcisista y divertid¨ªsimo personaje de Gilderoy Lockhart", asegura David Heyman, productor de la pel¨ªcula para Warner. Branagh acab¨® arrebat¨¢ndole el papel a Hugh Grant, primer candidato. "Casi todo el mundo sabe qui¨¦n es Hugh Grant pero no sabe qui¨¦n es Kenneth Branagh. Y eso es bueno porque la gente no tiene tantos prejuicios. Soy un admirador enorme de Hugh Grant, pero nuestro reparto, aunque bastante conocido, no est¨¢ formado por estrellas. Eso nos ha beneficiado".
"Apenas hemos tenido descanso. Empezamos a rodar el 19 de noviembre de 2001, s¨®lo tres d¨ªas despu¨¦s de estrenar la primera pel¨ªcula", explica Heyman. "Lo m¨¢s dif¨ªcil ha sido hacerlo todo en el tiempo previsto y acabar una pel¨ªcula y ponerse a hacer la otra de inmediato. Nos ha obligado a trabajar en las dos a la vez".
"El primer libro es sobre todo el descubrimiento de un mundo. El segundo es m¨¢s misterioso. Esta pel¨ªcula es m¨¢s una aventura; es m¨¢s oscura, pero hay m¨¢s acci¨®n y m¨¢s humor", explica Chris Columbus, norteamericano, director de las dos primeras entregas de Harry Potter. "Aunque no ha habido pausa, siempre hemos tratado las dos pel¨ªculas como dos cosas distintas. En la segunda hemos querido tener otra cinematograf¨ªa, otro movimiento de c¨¢mara, otra actitud. Porque cada libro tiene su propia personalidad y pide una mirada diferente", explica Columbus, director de Solo en casa, Nueve meses, Mrs. Doubtfire o Qu¨¦date a mi lado.
Columbus no dirigir¨¢ la tercera entrega, Harry Potter y el prisionero de Azkab¨¢n, pero mantendr¨¢ un v¨ªnculo como productor y har¨¢ la transici¨®n con su sucesor, casi con seguridad el mexicano Alfonso Cuar¨®n, director de Y tu mam¨¢ tambi¨¦n. Padre de cuatro hijos de 5 a 12 a?os, Columbus quiere pasar m¨¢s tiempo con la familia. "Tom¨¦ la decisi¨®n al ver que llevaba ya un a?o y medio trabajando y viendo a mi familia s¨®lo los fines de semana", explica. "No pod¨ªa estar en casa a la hora de la cena. Siempre llegaba pasadas las 10, con los ni?os ya en la cama. Y por las ma?anas me iba antes de que ellos se levantaran. En otras pel¨ªculas puedes ir a cenar a casa. Pero aqu¨ª nos hemos quedado muchas veces trabajando por la noche, despu¨¦s de rodar", se lamenta.
Uno de los retos de la pel¨ªcula es trabajar con ni?os, algo no siempre f¨¢cil. Entre los descansos obligatorios, las comidas y las horas que han de dedicar a estudiar, los ni?os apenas pueden rodar m¨¢s de tres o cuatro horas al d¨ªa en el Reino Unido. "Normalmente no me gusta trabajar con ni?os, pero ¨¦stos son muy naturales", confiesa Miriam Margolyes, 61 a?os, ataviada todav¨ªa como la profesora Sprout. "Hace dos a?os eran realmente ni?os; ahora han madurado, tienen m¨¢s confianza en s¨ª mismos", asegura esta actriz brit¨¢nica, pol¨ªglota y viajera, que vive a caballo entre California y la Toscana. "Es un filme muy brit¨¢nico porque los ni?os son ingleses. Si los ni?os fueran americanos ser¨ªa una pel¨ªcula muy diferente. Eso marca la diferencia", opina "La pel¨ªcula desprende valores positivos: lealtad, curiosidad, coraje, humor", asegura.
Babelia
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