El Celta abusa de un atrancado Valladolid
El Celta escribi¨® ayer en Valladolid un manual de eficiencia. En apariencia, con lus n¨²meros del partido en la mano, el Valladolid dispar¨® m¨¢s, atac¨® m¨¢s, tuvo m¨¢s bal¨®n, pero le falta lo que al Celta le sobra, soluciones. El equipo de Mor¨¦ est¨¢ cada d¨ªa m¨¢s atrancado y la carencias son cada vez m¨¢s sangrantes, como, por ejemplo, la incapacidad para sacar un solo bal¨®n jugado desde el centro del campo, cada d¨ªa m¨¢s inofensivo. Ayer, para colmo, tuvo enfrente un rival que es dinamita se le mire por donde se le mire.
El equipo de Lotina no se hab¨ªa arrimado al ¨¢rea de Bizarri cuando lleg¨® el cabezazo de Catanha que puso el partido y al Valladolid en estado de emergencia. Ni siquiera era una ocasi¨®n porque el centro de M¨¦ndez era una pedrada, pero Catanha resolvi¨® de una manera magistral. A partir del gol el choque se descarn¨® porque al Valladolid no le queda otra manera de hacer las cosas que la heroica. Adem¨¢s a la falta de sentido t¨¢ctico se le uni¨® ayer la falta de punter¨ªa, porque los delanteros vallisoletanos tuvieron un buen pu?ado de ocasiones.
VALLADOLID 0 - CELTA 2
Valladolid: Bizarri; Torres G¨®mez, Pe?a, Mustaf¨¢, Marcos; Sales, Colsa, Sousa, Aganzo; Olivera (Gaspar, m. 78) y Pach¨®n (?scar Gonz¨¢lez, m. 61). Celta: Cavallero; M¨¦ndez, C¨¢ceres, Sergio (Berizzo, m. 15), Sylvinho; Jesuli (Coudet, m.48), Luccin, Jos¨¦ Ignacio, Gustavo L¨®pez (Juanfran, m. 85) ; Edu y Catanha. Goles: 0-1. Min. 10. Catanha peina en el punto de penalti un centro desde la derecha de M¨¦ndez. 0-2. Min. 52. Edu cabecea en el segundo palo un centro largu¨ªsimo de Gustavo L¨®pez. ?rbitro: T¨¦llez S¨¢nchez. Amonest¨® a Olivera, Sylvinho, Marcos y Oscar Gonz¨¢lez, y expuls¨® a Sousa por doble amonestaci¨®n en el minuto 75. Unos 12.000 espectadores en Zorrilla.
Las ganas de pelea le duraron al Valladolid lo que tard¨® el Celta en marcar el segundo gol en el inicio de la segunda mitad. Gustavo L¨®pez regres¨® del vestuario convencido de resolverlo todo con una diablura por su banda. Hizo dos y a la tercera lleg¨® el segundo gol en un cabezazo de Edu. Fue el ¨²ltimo signo de la hegemon¨ªa casi insultante con la que el Celta se manej¨® durante todo el partido.
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