Constituci¨®n de Prodi

La propuesta de Tratado Constitucional de la UE en 105 art¨ªculos, un pre¨¢mbulo y cinco actas adicionales presentada ayer por el presidente de la Comisi¨®n Europea, Romano Prodi, es fruto de una mezcla de osad¨ªa y conservadurismo. Apunta a una v¨ªa federalista, con la generalizaci¨®n de las decisiones por mayor¨ªa, la incorporaci¨®n de una cl¨¢usula de defensa mutua "con todos los medios" en caso de agresi¨®n externa (que viene a recoger lo que ya existe en el Tratado de la UEO), e incluso de solidaridad en caso de problemas de "orden p¨²blico" en un pa¨ªs. Y rompe el tab¨² sobre la posibilidad de unos impuestos europeos.

El proyecto nace con una tara b¨¢sica, pues no es la propuesta de la Comisi¨®n como conjunto, sino s¨®lo de Prodi y de los comisarios Barnier y Vitorino. A la Comisi¨®n le hubiera costado forjar un acuerdo en un texto tan preciso casi tanto como a la propia Convenci¨®n Europea encargada de esta tarea. Si con 15 el sistema de presidencias semestrales rotatorias del Consejo ha llegado a sus l¨ªmites, en la Europa atestada de 25 Estados no parece viable mantenerlo. En un claro gui?o a los pa¨ªses peque?os, Prodi aboga por preservarlo, en contra de la idea de un presidente estable, que, sin duda, competir¨ªa en protagonismo con el de la Comisi¨®n. Tampoco parece acertada la creaci¨®n de un ministro de Asuntos Exteriores europeo presente a la vez en el Consejo y, como vicepresidente, en la Comisi¨®n, pues trastoca el equilibrio y la separaci¨®n de las instituciones.

Ateni¨¦ndose a lo pactado en Niza, Prodi tambi¨¦n propugna mantener un comisario por pa¨ªs, lo que favorece la confianza de todos en esta instituci¨®n, la m¨¢s original de la construcci¨®n europea, pero no redunda en su eficacia. En principio, la propuesta de que el Parlamento Europeo elija al presidente de la Comisi¨®n contribuir¨ªa a salvar en parte el d¨¦ficit democr¨¢tico de la UE. Pero una Comisi¨®n politizada no podr¨ªa conservar poderes que tienen que estar en manos independientes, como la pol¨ªtica de competencia para dar el visto bueno a fusiones o ayudas a empresas.

Prodi ha barrido demasiado para casa. El mayor m¨¦rito de este trabajo detallado es que, por vez primera, se ve en qu¨¦ puede consistir una Constituci¨®n europea que resulte comprensible para todos los ciudadanos y suponga una radical simplificaci¨®n de los tratados existentes y de la toma de decisiones. Pero las propuestas de Prodi son insuficientes para la gran Uni¨®n, de 25 o m¨¢s miembros, que ha de nacer la semana pr¨®xima en Copenhague.