Cajasur afirma ahora que el ¨²nico derecho de la Iglesia en la caja es nombrar a sus representantes

Cajasur replic¨® ayer al obispo de C¨®rdoba, Javier Mart¨ªnez, que los derechos que tiene la Iglesia en Cajasur consisten "exclusivamente" en el nombramiento de sus representantes y que no "cabe injerencia" eclesi¨¢stica en la forma de administrar la caja, especialmente en la elaboraci¨®n de los estatutos. Esta r¨¦plica se produce despu¨¦s de que el presidente de la entidad, el sacerdote Miguel Castillejo, y los otros cinco can¨®nigos que est¨¢n en el Consejo de Administraci¨®n hayan desobecedido la orden de Mart¨ªnez de retrasar la aprobaci¨®n de los nuevos estatutos de la caja. Esta tesis supone un cambio en el discurso de Castillejo, que hasta ahora hab¨ªa hecho una lectura mucho m¨¢s amplia de lo que significaban los "derechos de la Iglesia" en Cajasur.

El jefe de los servicios jur¨ªdicos de Cajasur, Diego Jordano, remiti¨® ayer a varios medios de comunicaci¨®n una nota de cuatro folios con el t¨ªtulo El obispado de C¨®rdoba y Cajasur: precisiones jur¨ªdicas.

En el comunicado, Jordano hace una disquisici¨®n inicial en la que mantiene que Cajasur fue fundada por el Cabildo catedralicio; que asign¨® a unos patronos la administraci¨®n del "ente creado" y que la "nueva persona jur¨ªdica" adquiri¨® "personalidad propia e independiente". "Esta evidencia jur¨ªdica, que pertenece a la esencia de toda fundaci¨®n, se encuentra en las ant¨ªpodas del criterio que mantiene el se?or obispo seg¨²n la cual la presencia de la Iglesia en Cajasur se parece m¨¢s a la propia de quien invirti¨® una cantidad de dinero al inicio de la fundaci¨®n, que ha de rentarle un inter¨¦s peri¨®dico", dice Jordano intentando, dejar en evidencia a Mart¨ªnez.

El jefe de los servicios jur¨ªdicos incluye en el ¨²ltimo p¨¢rrafo de la nota la siguiente afirmaci¨®n: "Los derechos del fundador de una caja de ahorros son exclusivamente el nombramiento de las personas que han de representarlo en los ¨®rganos de las cajas, con sujeci¨®n a lo dispuesto en el acta fundacional".

Esta frase de r¨¦plica al obispo coincide plenamente con la tesis que a lo largo de los ¨²ltimos a?os ha defendido el Gobierno andaluz sobre la singularidad de la Iglesia en Cajasur. En concreto, la Junta sostiene que esta peculiaridad consiste en que el "nombramiento" y la "duraci¨®n" del mandato de los representantes de la Iglesia en Cajasur debe hacerse conforme a los estatutos vigentes en la entidad en 1985.

Adem¨¢s, esta frase supone una ruptura con los argumentos que en este tiempo ha defendido Castillejo, quien lleva tres a?os proclamando que la Ley de Cajas andaluza eliminaba los derechos de la Iglesia en Cajasur y que ahora dice que la Ley Financiera (que permite a Cajasur situarse bajo el paraguas del Ministerio de Econom¨ªa) es el garante de que en el futuro se van a mantener estos derechos.

En una de las entrevistas que concedi¨® recientemente, Castillejo dec¨ªa sobre la Ley de Cajas: "No ven¨ªan s¨®lo a por m¨ª, aunque yo era la cabecera como presidente del patronato y de la caja, ven¨ªan a por los derechos de la Iglesia, para que no quedara vestigio alguno de sus derechos en Cajasur".

Y es que con el paso del tiempo, Castillejo ha ido haciendo una interpretaci¨®n cada vez m¨¢s amplia sobre los derechos de la Iglesia en Cajasur, como entidad fundadora, que la nota hecha p¨²blica ayer corrige de forma evidente y sit¨²a en la tesis de la Junta.

La nota de Jordano tambi¨¦n intenta enmendar la plana al obispo por su petici¨®n a los can¨®nigos de que retrasasen la aprobaci¨®n de los nuevos estatutos de la caja, as¨ª como por la oferta de "di¨¢logo institucional" que formul¨® para negociar estos estatutos y el futuro de la entidad. "No cabe injerencia u orden alguna sobre la forma de administrar la caja y no se olvide que modificar los estatutos sociales es la forma m¨¢s caracter¨ªstica de ejercer el gobierno de una persona jur¨ªdica", afirma el jefe de los servicios jur¨ªdicos de Cajasur.

Esta acusaci¨®n de injerencia se contradice con la actuaci¨®n real de la caja: uno de los can¨®nigos del consejo de Cajasur, en nombre de los seis que est¨¢n en este ¨®rgano, pidi¨® al obispo que analizase los estatutos que ten¨ªa previsto aprobar Castillejo. Fue en respuesta a esta petici¨®n cuando el obispo de C¨®rdoba pidi¨® a los seis can¨®nigos que retrasasen la aprobaci¨®n de los estatutos para que pudiera estudiarlos con la "seriedad exigible".