IU rechaza la revisi¨®n del PGOU de Estepona y acusa a la Junta de hacer "dejaci¨®n de funciones"
El gobierno municipal quiere legalizar las modificaciones de elementos propuestas
Estepona es una joya de la Costa del Sol. Sus 13.678.000 metros cuadrados de extensi¨®n incluyen 20 kil¨®metros de playas y casi 50 millones de metros cuadrados de sierra. Su Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) data de 1994, pero las 76 modificaciones de elementos propuestas por el Ayuntamiento desde 1996 han llevado a la Junta pedir su revisi¨®n. El equipo de gobierno (PP y ex ediles del GIL) ha aceptado la revisi¨®n, que espera que sirva para legalizar las modificaciones. IU recuerda que el plan s¨®lo se ha ejecutado en un 30% y se opone a la revisi¨®n.
El PGOU de Estepona fue redactado en la primera mitad de la d¨¦cada de los noventa, despu¨¦s de una grave crisis econ¨®mica que golpe¨® severamente el sector tur¨ªstico en la zona. "Los planes de esa ¨¦poca", explica el delegado provincial de Obras P¨²blicas de la Junta, Enrique Salvo, "empezaron a ajustarse a criterios de crecimiento moderado y b¨²squeda de la calidad". Pero en la segunda mitad de la d¨¦cada, la recesi¨®n dio paso a un periodo de crecimiento y la costa volvi¨® a convertirse en objeto de deseo de inversores y constructoras.
Entre 1991 y 1995, la poblaci¨®n de Estepona creci¨® s¨®lo un 0,32%, pasando de los 36.307 a los 36.766 habitantes de derecho. Siete a?os despu¨¦s, en 2001, el censo ascend¨ªa a 43.527 personas. Hoy, seg¨²n datos municipales, Estepona cuenta hoy con unos 50.000 habitantes empadronados, y concentra una importante poblaci¨®n flotante. "El crecimiento de Estepona, como el de muchos otros n¨²cleos costeros, no parece que pueda detenerse en los pr¨®ximos a?os por variables macroecon¨®micas como conflictos internacionales, crisis o ca¨ªdas de la bolsa", explica Salvo. "Por eso es fundamental que revise ahora su planificaci¨®n urban¨ªstica. No es l¨®gico tener vigente un plan de ordenaci¨®n y someterlo constantemente a modificaciones".
El delegado de Obras P¨²blicas reconoce que son las 76 propuestas de modificaci¨®n de elementos del PGOU las que han llevado a la Junta a concluir que es necesario modificarlo. "Las modificaciones puntuales est¨¢n concebidas para peque?os cambios necesarios que no lo alteren en su filosof¨ªa. No se puede dise?ar una ciudad a golpe de convenio, porque eso lleva a la desvertebraci¨®n del territorio", dice. Hasta ahora, la Junta ha dado el visto bueno a 52 peticiones, ha requerido informaci¨®n complementaria sobre otras 22 y ha denegado siete. "En algunos casos se propon¨ªan cambios de uso del suelo o incrementos de edificabilidad no admisibles", comenta.
IU recela
El portavoz de IU en el Ayuntamiento, Antonio Murcia, cree que la solicitud de modificaci¨®n de la Junta, aceptada por el equipo de gobierno y por parte de la oposici¨®n (PSOE y PA), es err¨®nea. "Nosotros entendemos que es una dejaci¨®n de funciones por parte de la administraci¨®n auton¨®mica. Si la Junta considera que el equipo de gobierno est¨¢ infringiendo la ley, lo que tiene que hacer es retirar al Ayuntamiento las competencias urban¨ªsticas que le tiene delegadas, que para eso son suyas. El PGOU de Estepona s¨®lo est¨¢ desarrollado en un 30%, y actualmente no se da ninguno de los supuestos legales para la revisi¨®n", argumenta.
Esta opini¨®n es compartida por la Asociaci¨®n de Afectados por Problemas Urban¨ªsticos (Adapu). Su presidenta, Paqui Fern¨¢ndez, lo argumenta as¨ª: "lo que estamos viviendo en Estepona es un problema de corrupci¨®n y de incumplimiento de la legalidad vigente en el que los perjudicados somos los vecinos, que vemos c¨®mo para aumentar el volumen de edificabilidad y de negocio de una gran empresa, los peque?os propietarios de las fincas circundantes pierden todos sus derechos".
Inmaculada Gonz¨¢lez Mena, abogada especialista en Urbanismo y representante jur¨ªdica de Adapu, considera que "el proceso de revisi¨®n del PGOU va a suponer un periodo de inseguridad jur¨ªdica que se aprovechar¨¢ para consolidar ilegalidades cometidas por el equipo de gobierno por la v¨ªa de convenios con grandes constructoras". Gonz¨¢lez Mena destaca que el descontento de los vecinos es creciente: "En los ¨²ltimos meses me han requerido para constituir hasta cinco asociaciones de damnificados por la gesti¨®n urban¨ªstica. Cuando la gente empieza a organizarse es porque las administraciones no responden como debieran".
Otra inc¨®gnita es el modelo de ciudad que se busca. Salvo considera que Estepona est¨¢ en condiciones de apostar por "un desarrollo sostenible y extensivo, huyendo de la creaci¨®n de n¨²cleos de poblaci¨®n abigarrados y apostando por una dotaci¨®n suficiente de servicios y por la reserva de suelo para viviendas de protecci¨®n oficial (VPO) de bajo coste en distintos lugares del municipio, para evitar la formaci¨®n de guetos".
El concejal de Urbanismo, Ignacio Mena (PP), asegura que el equipo de gobierno afronta la revisi¨®n "con la mejor disposici¨®n hacia las directrices de la Junta". "Apostamos por un desarrollo de calidad, por proyectos que diferencien nuestra oferta, pero creemos que para no crear inseguridad es tambi¨¦n necesario consolidar en el PGOU las modificaciones de elementos que hemos propuesto", dice.
Turismo residencial, cara y cruz
El turismo residencial de alto standing es defendido tanto por la Junta como por el equipo de gobierno de Estepona como la referencia de crecimiento en el futuro, en oposici¨®n al modelo Benidorm, de torres abigarradas y superpobladas. Con todo, el responsable de Urbanismo matiza que "hay que tener oferta para todos los bolsillos".Sin embargo este modelo, desarrollado en la localidad gaditana de San Roque, entra?a tambi¨¦n riesgos. David Torralba, ex gerente de la Fundaci¨®n para el Desarrollo Econ¨®mico de Estepona, que contribuy¨® a la elaboraci¨®n del informe sobre la Costa del Sol Occidental del Plan de Actuaciones Estrat¨¦gicas Madeca 10, advierte que "el ¨¦xito del modelo residencial de alto standing radica en que la oferta sea muy limitada"."Ese desarrollo urban¨ªstico tambi¨¦n es depredador del suelo. Requiere gran cantidad de agua para los jardines y campos de golf, y una enorme dotaci¨®n de servicios. Y no deja de suponer una alteraci¨®n del paisaje", advierte. En opini¨®n de Torralba, Estepona debe convertirse en "escaparate" de las localidades serranas circundantes. "Deber¨ªamos moderar nuestro crecimiento y potenciar los servicios, y empezar a pensar en una interacci¨®n beneficiosa para todos con los municipios vecinos".
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