El TSJC reconoce falta de medidas de seguridad en la muerte de un trabajador

Rosa Mercader ha conseguido tras seis a?os de lucha en los juzgados que alguien le reconociera que su marido no muri¨® por una imprudencia suya como sosten¨ªa la empresa Potasas del Llobregat, donde trabajaba como electricista, sino por falta de medidas de seguridad.

El accidente se produjo el 9 de enero de 1997. Jeroni Moras, un trabajador que seg¨²n consta en la documentaci¨®n judicial hab¨ªa desarrollado su trabajo durante 19 a?os de forma ejemplar y sin tener nunca ning¨²n accidente ni una sola baja por enfermedad, estaba analizando por qu¨¦ no funcionaba el ¨²ltimo tubo de una l¨ªnea de fluorescentes cuando, al tocar la pantalla met¨¢lica, recibi¨® una fuerte descarga el¨¦ctrica que lo fulmin¨®.

Alguien, en una operaci¨®n anterior, hab¨ªa intercambiado los hilos de conexi¨®n, y el error fue mortal. Adem¨¢s, seg¨²n consta en la sentencia, no trabajaba con guantes ni con calzado aislante en una zona h¨²meda de riesgo el¨¦ctrico.

Mercader, con la ayuda de la abogada Eva Simon, intent¨® que el caso se viera en un juzgado de lo penal. Y as¨ª fue, pero pasaron dos a?os entre el momento en que el caso pas¨® por el juzgado de primera instancia y por la Audiencia, y en ambos tribunales perdi¨®. No hubo causa penal; en cambio, encontrar¨ªa en la v¨ªa de lo social la recompensa a la ansiedad de saber qu¨¦ caus¨® la muerte de su marido.

Pensi¨®n y orfandad

La empresa hab¨ªa presentado recurso en los primeros meses tras el fallecimiento ante la decisi¨®n de Inspecci¨®n de Trabajo de considerar que se trataba de un accidente laboral por falta de medidas de seguridad, lo que obligaba a Potasas del Llobregat a pagar el 30% de complemento de la pensi¨®n de viudedad y de las dos de orfandad para los hijos del fallecido.

Este recurso inicialmente tuvo una sentencia favorable tambi¨¦n a los intereses de la empresa, pero la familia present¨® un recurso de s¨²plica que acab¨® vi¨¦ndose en el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a y el pasado mes de febrero la sentencia fue favorable a los intereses de los familiares del fallecido. A¨²n quedaba pendiente la indemnizaci¨®n por la muerte en accidente laboral, y aqu¨ª las partes llegaron a una conciliaci¨®n el pasado mes de noviembre. Ahora la empresa debe hacer la provisi¨®n de fondos en la Tesorer¨ªa de la Seguridad Social para que Rosa Mercader y sus hijos, Carles y Queralt Moras, cobren lo adeudado.

Mercader ha dejado muchas l¨¢grimas y un proceso de depresi¨®n en esta batalla, pero se siente aliviada tras recibir la noticia de que un juez ha dictaminado que su marido muri¨® por falta de seguridad. "Ha sido muy duro, pero desde el primer d¨ªa tuve claro que quer¨ªa llegar hasta el final", asegura Mercader. No siempre es as¨ª, porque el largo proceso y su alto coste alejan muchas veces a la familia del camino de los recursos, como explica Eva Simon, la abogada que ha llevado la acusaci¨®n.