"Am¨¦rica Latina no puede vivir en un permanente ajuste"
"No creo que la democracia est¨¦ en riesgo, pero est¨¢ bajando su credibilidad"
El panorama del mercado laboral en Am¨¦rica Latina lleg¨® en 2002 a las cifras m¨¢s negativas de los ¨²ltimos 22 a?os. La ca¨ªda del PIB de la regi¨®n, de un -0,8%, elev¨® el desempleo al 9,2% este a?o, sobre el registrado en la crisis de la deuda de comienzos de los a?os ochenta, mientras creci¨® el sector informal y disminuyeron la productividad y el salario m¨ªnimo, seg¨²n la Oficina Internacional del Trabajo (OIT), que esta semana realiz¨® en Lima su XV Reuni¨®n Regional Americana. El director general de la OIT, el chileno Juan Somav¨ªa (61 a?os, abogado) denuncia las pol¨ªticas de la globalizaci¨®n que olvidaron el empleo y pide un compromiso pol¨ªtico mundial para crear m¨¢s "trabajo decente", que permita vivir con dignidad.
"Habr¨¢ una buena pol¨ªtica econ¨®mica para el futuro si los due?os de los bancos, del FMI y del Banco Mundial lo deciden"
"A Latinoam¨¦rica se le vendi¨® que con disciplina y abriendo la econom¨ªa iba a crecer y generar empleo. Esto no ha ocurrido"
Pregunta. ?El deterioro es responsabilidad de la globalizaci¨®n?
Respuesta. La insistencia de que las pol¨ªticas econ¨®micas deben regirse por criterios econ¨®micos y monetarios, dejando en un segundo plano una salida productiva, ha hecho que la econom¨ªa de Am¨¦rica Latina viva en permanente ajuste. Esto no puede ser: hay momentos en que se requiere una pol¨ªtica expansiva, como hacen los pa¨ªses que tienen los medios...
P. Estados Unidos el a?o pasado...
R. S¨ª, y en Europa est¨¢n en los l¨ªmites del d¨¦ficit del 3%. Sin duda, las pol¨ªticas econ¨®micas deben estar equilibradas. La receta que se le ha dado a Am¨¦rica Latina es que equilibre sus cuentas, tenga baja inflaci¨®n y haga pol¨ªticas de apertura. No hay nada malo en eso: son buenas pol¨ªticas, sobre todo en sociedades que vivieron una hiperinflaci¨®n; pero si es lo ¨²nico que se hace, terminamos con alto desempleo.
P. La regi¨®n ha cumplido estas condiciones y se ha disciplinado...
R. Sin duda, pero los resultados no se han producido. A Latinoam¨¦rica se le vendi¨® el modelo que disciplin¨¢ndose y abriendo la econom¨ªa iba a crecer y generar empleo, en un c¨ªrculo virtuoso. Esto no ha ocurrido. No critico la globalizaci¨®n como concepto, sino como resultado. Estas pol¨ªticas han reducido el margen de maniobra en un mundo crecientemente competitivo y complejo. La regi¨®n sabe crecer: en los a?os sesenta y setenta lo hizo pr¨¢cticamente al doble que ahora. Es cierto que en una econom¨ªa globalizada hay que crecer de manera distinta. Pero si se le dice (a Am¨¦rica Latina) que su objetivo principal son s¨®lo los grandes equilibrios macroecon¨®micos, concebidos como equilibrios financieros y monetarios, y no la necesidad de invertir para crear empresas y trabajo, y que el trabajo es un resultado y no un objetivo de las pol¨ªticas, terminamos con una situaci¨®n como la actual.
P. Sin embargo, las pol¨ªticas de ajuste de Am¨¦rica Latina han sido empujadas por el FMI, que integra la familia de la ONU como la OIT.
R. Hay tres tipos de organismos internacionales. Primero, los monetarios y financieros, con una estructura de bancos, donde ocho pa¨ªses tienen la mayor¨ªa del capital en el FMI y Banco Mundial. Segundo, los organismos de la ONU, donde cada pa¨ªs es un voto, salvo el Consejo de Seguridad, donde cinco pa¨ªses tienen veto. Tercero, la OIT, donde cada Estado tiene medio voto, porque el otro medio es de los trabajadores y empleadores. La OIT representa a los actores reales de la econom¨ªa, la vida del trabajo. Cuando el FMI define e impulsa una pol¨ªtica macroecon¨®mica por el mundo, los empleadores y trabajadores son quienes saben qu¨¦ pasa en la vida real con esa pol¨ªtica. Por eso tenemos perspectivas distintas. Es muy importante que en el sistema multilateral haya una diversidad de pol¨ªticas...
P. ?Aunque sean contradictorias entre s¨ª?
R. La gente demanda que sean coherentes. La palabra coherencia se est¨¢ usando cada vez m¨¢s, no porque todo el sistema internacional deba alinearse con lo que plantea el FMI. Es m¨¢s bien al rev¨¦s; es necesario que el FMI se alinee con la realidad pol¨ªtica y econ¨®mica y la aplicaci¨®n de este modelo.
P. ?Qu¨¦ opina de las cr¨ªticas del Premio Nobel de Econom¨ªa Joseph Stiglitz a las pol¨ªticas del FMI en Argentina?
R. El problema principal no es quien tiene la culpa, sino como salimos del l¨ªo. En el FMI se est¨¢ comenzado a producir la evidencia que se deben complementar estas pol¨ªticas. Pueden haberse cometido muchos errores, pero lo importante es que no sigan en el futuro. Hay una salida productiva, con pol¨ªticas macroecon¨®micas que equilibran las necesidades de inversi¨®n y crecimiento sin afectar la inflaci¨®n. No es un sue?o, es posible, pero debemos tomar una decisi¨®n pol¨ªtica fundamental: transformar la creaci¨®n de trabajo decente en un objetivo mundial, porque todas las sociedades deben avanzar en este terreno. Lo que hemos luchado durante mucho tiempo para recuperar la democracia no lo echaremos por la ventana porque un organismo decide que tiene la fuerza y la capacidad de imponer ciertas pol¨ªticas. Eso se lo quiero asegurar: no pondremos en riesgo las democracias latinoamericanas a partir de una ideolog¨ªa econ¨®mica.
P. ?Los ajustes brutales pueden poner en riesgo la democracia?
R. No creo que est¨¦ en riesgo la democracia, pero va bajando su credibilidad y la de los partidos pol¨ªticos. Aunque estos organismos financieros tienen su cuota de responsabilidad, las sociedades latinoamericanas arrastran herencias hist¨®ricas de gran injusticia. La pobreza y la mala distribuci¨®n del ingreso no las invent¨® el FMI ni la globalizaci¨®n. La divisi¨®n pol¨ªtica nacional y la desuni¨®n regional son temas latinoamericanos. El problema de una buena pol¨ªtica econ¨®mica para el futuro se puede resolver si los due?os de los bancos, del FMI y el Banco Mundial, ocho pa¨ªses, lo deciden. Pero la situaci¨®n regional es m¨¢s compleja: su conflictividad interna pol¨ªtica es muy alta. Si la creaci¨®n de empleos no se transforma en una gran forma de movilizaci¨®n nacional, tendremos serios problemas.
P. ?Qu¨¦ efectos podr¨ªa tener el fen¨®meno de Lula? No es usual que un dirigente sindical llegue a la presidencia...
R. Tanto porque Brasil es un faro dentro de la regi¨®n, como porque Lula encarna estas preocupaciones, su presidencia es muy importante. Habr¨¢ una tendencia en Am¨¦rica Latina a sentir que hay un liderato que vendr¨¢ de Lula.
P. ?C¨®mo se puede concebir el trabajo decente para el sector informal, donde est¨¢ uno de cada dos trabajadores en Am¨¦rica Latina?
R. Este sector es resultado en gran medida de una pol¨ªtica que no se preocupa del sector productivo, y como no crece, la gente se desarrolla en la informalidad. Lo primero es una salida productiva a la crisis y ah¨ª se reabsorber¨¢ parte de la informalidad. Lo segundo es concentrarse en la peque?a, mediana y microempresa. Las pol¨ªticas que se le han ofrecido a Am¨¦rica Latina ponen enorme ¨¦nfasis en lo global, en la apertura, pero casi ninguna preocupaci¨®n por lo local, aunque ah¨ª es donde vive la gente, se crean las empresas y se genera el consumo.
P. ?Qu¨¦ avances ha logrado la OIT en su lucha contra el trabajo infantil?
R. El motivo por el cual hay ni?os que trabajan es que sus padres no tienen empleo. Con pleno empleo, habr¨ªa much¨ªsimo menos trabajo infantil y m¨¢s ni?os en las escuelas. No podemos esperar que crezca el empleo para resolver el problema: hay ni?os que viven en situaciones de explotaci¨®n y debemos sacarlos de ah¨ª. El papel de la OIT ha sido crear conciencia al respecto. En 1999 aprobamos el Convenio 182 contra las peores formas de trabajo infantil. Decidimos concentrarnos en las peores formas, porque hay otras en que el muchacho puede ir a la escuela y trabajar al mismo tiempo, que son formas de trabajo que educan y capacitan a los j¨®venes. Este Convenio ha sido ratificado por casi todos los pa¨ªses latinoamericanos. Acabo de proponer en esta reuni¨®n que todos los pa¨ªses de la regi¨®n se comprometan a erradicar las peores formas de trabajo infantil en un per¨ªodo de tiempo a determinar por cada pa¨ªs. No es irreal pensar que es posible.
"Si la gente tuviera trabajo, no emigrar¨ªa"
Pregunta. ?C¨®mo observa la OIT el problema de la emigraci¨®n de trabajadores hacia Europa?Respuesta. Si la gente tuviera trabajo donde nace y vive, no emigrar¨ªa. Insisto: crear empleos debe transformarse en el principal objetivo pol¨ªtico mundial. En estos procesos hay que preocuparse de la creaci¨®n de empleos, y de que los emigrantes normalmente pierden derechos y quedan en una situaci¨®n mucho m¨¢s vulnerable, incluso si son legales. Para qu¨¦ decir cuando son ilegales. Muchas de las reacciones que se producen son por la dificultad de aceptar al otro, de absorber la diferencia...P. ?Qu¨¦ piensa de la represi¨®n a los ilegales y de la xenofobia?R. Hay una legalidad y los pa¨ªses deben preocuparse de que se cumpla. El problema se presenta como si estos emigrantes ocuparan trabajos que podr¨ªan ser para los desocupados locales. La verdad es que no es as¨ª. Hay muchos trabajos que, en Europa, la sociedad prefiere que los hagan los emigrantes. El tema es m¨¢s cultural y de estilos de vida. Al exacerbar la competitividad, la globalizaci¨®n transmite mucha incertidumbre e inseguridad a la sociedad y, entonces, las personas se ponen m¨¢s nacionalistas y menos tolerantes, est¨¢n tensas, lo que termina centr¨¢ndose en una v¨ªctima f¨¢cil, el emigrante.P. ?Es arriesgado desde del punto de vista del empleo la expansi¨®n de Europa?R. Si se quiere tener una Europa m¨¢s estable y democr¨¢tica hay que ayudar a los que est¨¢n m¨¢s atr¨¢s a avanzar para llegar a una base similar, como es la concepci¨®n de la UE. ?C¨®mo se manejar¨¢ ahora, en un proceso global con menos crecimiento y m¨¢s inseguridad? Ser¨¢ m¨¢s complejo que la construcci¨®n europea entre seis o quince pa¨ªses. Pero en el largo plazo, uno puede tener fe en la configuraci¨®n de una Europa que ser¨¢ un gran factor de estabilidad en el mundo y de promoci¨®n de valores democr¨¢ticos. Desde Am¨¦rica Latina tambi¨¦n la quisi¨¦ramos ver como un mercado abierto en la agricultura y en otros temas.
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