La en¨¦sima batalla
Sabino Padilla, el m¨¦dico del club bilba¨ªno, se enfrenta de nuevo a las sospechas que siempre le han rodeado
Cuando le fich¨®, el entonces presidente del Athletic, Jos¨¦ Mar¨ªa Arrate, present¨® a Sabino Padilla como el mejor especialista en medicina deportiva. Criado en el ciclismo y el atletismo, como m¨¦dico particular de Miguel Indurain y Mart¨ªn Fiz entre otros, acumulaba tanto prestigio como pol¨¦mica. Imposible rehuir el devate cuando se trabaja en esos deportes. El ciclismo y el atletismo han poblado las estad¨ªsticas de dopaje porque el c¨®digo es m¨¢s duro y la actuaci¨®n de las instancias deportivas y judiciales m¨¢s intensa.
Padilla no pod¨ªa ser una excepci¨®n. Pero parece inmune: "Llevo casi 20 a?os en esta guerra y para muchos soy el m¨¢s sospechoso del mundo. Eso, a pesar de que ninguno de los deportistas que he llevado ha dado jam¨¢s positivo. No le preocupan los comentarios sobre ¨¦l: "Me dedico exclusivamente a la defensa del jugador. Es lo importante".
Lo que tambi¨¦n le importa, aunque lo considera una batalla perdida, es la ligereza en las opiniones y la poca trascendencia que se da a los trabajos cient¨ªficos. Por ejemplo, que, seg¨²n an¨¢lisis serios, casi el 25% de las barritas energ¨¦ticas en Holanda se hallaban contaminadas por sustancias dopantes. O que se categorice sobre si un deportista ha superado en mucho o poco el l¨ªmite permitido de una concreta. Todo es relativo.
El Athletic no ha desvelado las tasas de nandrolona de Gurpegui. Quiere esperar al contraan¨¢lisis, ma?ana, para la cifra definitiva. Ya ocurri¨® con Guardiola y otros, por lo que no quiere especulaciones.
En el Athletic se viven situaciones contradictorias. No se sabe si es mejor que se trate de un caso raro -un chico joven, que empieza su carrera- en un club no de los grandes y cargado de historia futbol¨ªstica o si, por el contrario, esas condiciones facilitan una actitud ejemplarizante.
Padilla trabaja en una doble v¨ªa: la produci¨®n end¨®gena de la nandrolona, basada en multitud de estudios cient¨ªficos rigurosos, en las limitaciones a causa del enorme retraso, tres meses, en la comunicaci¨®n del resultado del an¨¢lisis. Sobre esos dos pilares estructura el Athletic el edificio de su defensa. "Iremos, en cualquier caso, hasta el final, hasta donde haga falta, para defender al jugador", aseguran con convicci¨®n en el club rojiblanco.
Padilla librar¨¢ su en¨¦sima batalla sabiendo que, pase lo que pase, dejar¨¢ alg¨²n pelo m¨¢s en la gatera. Con la sensaci¨®n de que nadie sabe los trabajos de investigaci¨®n que ha publicado y de que nadie se acuerda de que "nunca" ning¨²n deportista de los que haya llevado, ganase o perdiera, ha dado positivo en un an¨¢lisis. Gurpegui es su ¨²ltima prueba.
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