Piqu¨¦ da un ultim¨¢tum a las compa?¨ªas para que desarrollen la telefon¨ªa m¨®vil UMTS

El Gobierno no quiere un nuevo fiasco en la telefon¨ªa de tercera generaci¨®n (UMTS), que permitir¨¢ transmitir v¨ªdeos y la navegaci¨®n r¨¢pida por Internet, que lleva un retraso de dos a?os. El Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa ha dado un ultim¨¢tum a las empresas de m¨®viles para que presenten esta misma semana un plan con los plazos concretos de despliegue de red y la inversi¨®n para poner en marcha Internet por el m¨®vil. De no ser as¨ª, retirar¨¢ la oferta de liberar los avales por 6.000 millones de euros que pesan sobre las compa?¨ªas que ganaron las licencias.

El ministro de Ciencia y Tecnolog¨ªa ofreci¨® en octubre rebajar de 7.000 a 1.000 millones de euros los avales exigidos como garant¨ªa de cumplimiento de los compromisos adquiridos para la obtenci¨®n de las licencias de tecnolog¨ªa de tercera generaci¨®n (UMTS), que ganaron Telef¨®nica M¨®viles, Vodafone, Amena y Xfera. A cambio, exigi¨® a las compa?¨ªas que se comprometieran a mantener las inversiones para la nueva tecnolog¨ªa, que ya acumula retrasos.

Pero, despu¨¦s de un mes y medio de negociaciones entre el Ministerio y las compa?¨ªas de m¨®viles sin ning¨²n resultado, Piqu¨¦ ha decidido lanzar un ultim¨¢tum: cada una de las compa?¨ªas debe presentar esta semana por escrito un plan de desarrollo de la tecnolog¨ªa UMTS. Si no es as¨ª, retirar¨¢ la oferta de liberar los avales por 6.000 millones de euros que pesan sobre las compa?¨ªas que ganaron las licencias, seg¨²n informaron fuentes de la negociaci¨®n

Plazos e inversiones

En ese plan deben figurar varios aspectos concretos. Entre ellos, los siguientes: los plazos en los que cada operador puede garantizar servicios de Internet a trav¨¦s del m¨®vil, independientemente de que se lleve a cabo bajo tecnolog¨ªa UMTS o la actual GPRS; el compromiso detallado de las inversiones que se van a realizar en el despliegue de la red o en los nuevos servicios y, por ¨²ltimo, los plazos para ofrecer cobertura en todo el territorio nacional.

En el cap¨ªtulo de inversiones, el Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa se muestra flexible sobre el despliegue de la red, permitiendo que se compartan las infraestructuras. Pero desea que ese ahorro redunde en inversiones en aplicaciones y servicios concretos. Aunque el Ministerio no ha dado un plazo preciso, desea que la implantaci¨®n de Internet m¨®vil se realice a lo largo del a?o 2003. Una vez est¨¦n listos los planes, el Ejecutivo llevar¨¢ a cabo una reforma legislativa que libere a Telef¨®nica M¨®viles, Vodafone, Amena y Xfera de gran parte de los avales con que garantizaron sus compromisos cuando ganaron el concurso, en marzo de 2000.

En ese concurso, las compa?¨ªas se comprometieron a invertir en 10 a?os 16.296 millones de euros, respaldados por avales de m¨¢s de 7.000 millones. El problema precisamente radica en que gran parte de esos avales vencen a comienzos de 2003, sin que se hayan podido cumplir los compromisos.

El Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa aprovechar¨¢ tambi¨¦n la reforma legislativa para adaptar el calendario definitivo de despliegue del UMTS. Seg¨²n las bases del concurso, deb¨ªa haberse puesto en marcha comercialmente en agosto de 2001 y se aplaz¨® hasta junio de este a?o, aunque hasta el momento s¨®lo se han realizado pruebas t¨¦cnicas y ninguna de las compa?¨ªas tiene fecha para el lanzamiento comercial. El retraso afecta a toda Europa.

Compromisos

Entre los compromisos de las operadoras que ganaron el concurso estaba tambi¨¦n la creaci¨®n de 36.350 puestos de trabajo directos en 10 a?os, que tampoco se va a poder cumplir.

Estas medidas suponen un respiro financiero para las compa?¨ªas, al que podr¨ªa sumarse la posibilidad de vender las frecuencias, decisi¨®n que puede tomarse conjuntamente con las autoridades comunitarias.

Las operadoras piden adem¨¢s que se facilite la compartici¨®n de infraestructuras, al considerar que la existencia de cuatro redes, con 9.000 estaciones base cada una, como se contemplaba en el concurso, no es viable ni comercial ni econ¨®micamente y que la licencia, que tiene un plazo de vigencia de 20 a?os, cuente a partir del momento en que entre en servicio.

Adem¨¢s del desarrollo de la sociedad de la informaci¨®n, el Gobierno desea evitar que contin¨²e la ca¨ªda de la inversi¨®n en el sector de las telecomunicaciones, que el pasado a?o fue del 19%.