El Vaticano condena al te¨®logo Juan Jos¨¦ Tamayo despu¨¦s de tres a?os de investigaci¨®n

Al Vaticano no le gusta lo que escribe sobre Jesucristo el te¨®logo espa?ol Juan Jos¨¦ Tamayo, dirigente de la Asociaci¨®n de Te¨®logos Juan XXIII y profesor de la Universidad p¨²blica Carlos III, de Madrid. Despu¨¦s de tres a?os de trabajo llevado a cabo por funcionarios de la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe (ex Santo Oficio de la Inquisici¨®n), que preside el cardenal Joseph Ratzinger, Roma ha emitido un severo informe contra este pensador cristiano. Tamayo recogi¨® ayer en la Conferencia Episcopal Espa?ola una escueta "nota" de apenas tres folios donde se resum¨ªa su condena.

En realidad, lo que parece escocer a la jerarqu¨ªa cat¨®lica es "la repetida comparecencia" del te¨®logo Tamayo ante la opini¨®n p¨²blica. De esa faceta se ocupa la mitad de la "nota" redactada por la Comisi¨®n Episcopal para la Doctrina de la Fe, brazo espa?ol de la congregaci¨®n romana del cardenal Ratzinger y encargada de resumir en castellano las aclaraciones doctrinales elaboradas por los te¨®logos del Vaticano. El presidente de esta comisi¨®n en la Conferencia Episcopal Espa?ola es Eugenio Romero Pose, obispo auxiliar del cardenal Antonio Mar¨ªa Rouco en el arzobispado de Madrid.

La "nota" episcopal entregada ayer al te¨®logo Tamayo ser¨¢ p¨²blica en los pr¨®ximos d¨ªas por acuerdo del ¨²ltimo Comit¨¦ Permanente de la Conferencia Episcopal. Contiene cuatro puntos y 26 l¨ªneas, y ha sido acompa?ada de una llamada "aclaraci¨®n doctrinal", como anexo de algo m¨¢s de dos folios. Esta parte no llegar¨¢ a la opini¨®n p¨²blica, seg¨²n el portavoz de los obispos, Juan Jos¨¦ Asenjo. Respecto al informe redactado por la congregaci¨®n romana que vigila la ortodoxia doctrinal del catolicismo, ni siquiera ha sido entregado al te¨®logo amonestado, a pesar de la solicitud que ¨¦ste hizo a Romero Pose en una reciente entrevista.

La Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe ha trabajado tres a?os sobre los escritos de Tamayo (libros, colaboraciones en obras colectivas, art¨ªculos en medios de comunicaci¨®n de Europa y Latinoam¨¦rica), antes de emitir un dictamen, enviado a Madrid hace seis meses y centrado en el libro Dios y Jes¨²s, sexto volumen de la serie Hacia la comunidad, publicada en los ¨²ltimos diez a?os. por la Editorial Trotta.

Sin noticias de Ratzinger

Tamayo no tuvo noticia de esa investigaci¨®n porque es un te¨®logo que ejerce la docencia en dos universidades del Estado y publica gran parte de sus libros en editoriales privadas, aunque su famoso Diccionario abreviado de pastoral, que firma junto a Casiano Florist¨¢n y lleva cinco ediciones en espa?ol, editado por Verbo Divino en 1988, est¨¢ publicado en italiano por la Librer¨ªa Editrice Vaticana, de la Ciudad del Vaticano.

Es la figura de Jes¨²s de Nazaret la que centra esta disputa, como antes ocurri¨® con las condenas emitidas por Roma contra los te¨®logos Hans K¨¹ng y Leonardo Boff, entre otros muchos. Roma se queja de que Tamayo, palentino de 56 a?os, autor de 35 libros y colaborador habitual de EL PA?S, es autor de una cristolog¨ªa "que respeta muy poco el m¨¦todo teol¨®gico" porque "la Escritura es seleccionada con criterios arbitrarios y oscuros, tomando y dejando los textos que le convienen, con el pretexto de ser a?adidos o elaboraciones de la comunidad primitiva".

Las tesis de Tamayo en el libro Dios y Jes¨²s le parecen a la comisi¨®n eclesi¨¢stica "una versi¨®n renovada del antiguo error arriano: negaci¨®n de la divinidad de Jesucristo, presentaci¨®n de Jes¨²s como un mero hombre, negaci¨®n del car¨¢cter hist¨®rico y real de la resurrecci¨®n, y de ¨¦sta como dato fundamental de la fe cristiana". Los obispos afirman que "las conclusiones" a las que llega Tamayo "son incompatibles con la fe cat¨®lica".

Antes de esta rotunda aseveraci¨®n, la nota episcopal dice en el punto tres: "Ante la repetida comparecencia de don Juan Jos¨¦ Tamayo Acosta en los medios de comunicaci¨®n, mediante art¨ªculos period¨ªsticos, entrevistas y publicaciones, la Comisi¨®n para la Doctrina de la Fe considera necesario informar de que en la actualidad el citado autor carece de misi¨®n can¨®nica para ense?ar teolog¨ªa y no ejerce la docencia en ning¨²n centro superior de la Iglesia".

La comisi¨®n doctrinal a?ade que Tamayo ha seguido "en los ¨²ltimos a?os una trayectoria que le aparta de la comuni¨®n eclesial, lo cual es incompatible con la condici¨®n de te¨®logo cat¨®lico". Tambi¨¦n expresa su "motivo de preocupaci¨®n" por la Asociaci¨®n de Te¨®logos Juan XXIII, de la que Tamayo es secretario general. "Carece de aprobaci¨®n can¨®nica y no es, por tanto, una asociaci¨®n de la Iglesia cat¨®lica", termina diciendo.

El te¨®logo Tamayo reaccion¨® ayer con serenidad al varapalo episcopal. "Sin el debate sobre la divinidad de Cristo no habr¨ªa teolog¨ªa. Bastar¨ªa con recitar el Credo Nicenoconstantinopolitano sin discusi¨®n. Pero eso es credulidad, no teolog¨ªa", dijo despu¨¦s de subrayar que el debate en torno a la divinidad de Jes¨²s, y sobre la personalidad concreta de ¨¦ste en su tiempo, constituye "el centro de la reflexi¨®n teol¨®gica y el enigma por excelencia de la cristolog¨ªa". "El debate viene plante¨¢ndose desde los or¨ªgenes del cristianismo y es objeto de pol¨¦mica desde los primeros concilios hasta el presente, desde Arrio y Nestorio hasta K¨¹ng y Schillebeeckx, creando muchas v¨ªctimas y provocando sufrimiento innecesario", a?adi¨®.

Cuando ten¨ªa s¨®lo 28 a?os Tamayo ya fue apartado como profesor de Antropolog¨ªa Teol¨®gica en la Facultad de San D¨¢maso (entonces Estudio Teol¨®gico del seminario de Madrid), de forma que no le sorprenden las censuras de la Iglesia oficial. Pero s¨ª lamenta el m¨¦todo seguido por Roma, sin darle audiencia para explicarse, y sin comunicarle el texto completo de las reservas doctrinales, una vez que decidieron entrar a juzgar la tarea de un te¨®logo ajeno funcionalmente a la Iglesia oficial.