Los pol¨ªticos malague?os critican a Monteseir¨ªn por pedir un estatuto de capitalidad para Sevilla
El presidente provincial del PP acusa a Chaves de ser el "inductor" de la solicitud del alcalde
La petici¨®n formulada al ministro de Administraciones P¨²blicas, Javier Arenas, por el alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn, de que se sume a Sevilla y al resto de capitales auton¨®micas al estatuto especial solicitado por Madrid y Barcelona, ha desatado las cr¨ªticas de los pol¨ªticos malague?os, que entienden que la futura Ley de Grandes Ciudades no debe hacer distinciones. El PP malague?o acus¨® ayer al presidente de la Junta, Manuel Chaves, de "inducir" la solicitud de Monteseir¨ªn, quien ayer dijo que de su petici¨®n "no se puede deducir un deseo de excluir a M¨¢laga de la ley".
El primero en contestar la petici¨®n de Monteseir¨ªn, formulada el jueves tras una reuni¨®n en el Ministerio de Administraciones P¨²blicas para debatir la futura Ley de Grandes Ciudades, fue el presidente provincial del PP, Joaqu¨ªn Ram¨ªrez, quien, en tono encendido, acus¨® a Monteseir¨ªn de actuar "de forma desleal, fuera de tono y provinciana", y aventur¨® que el alcalde de Sevilla hab¨ªa recibido del presidente andaluz, Manuel Chaves, "el encargo de excluir a M¨¢laga del club de las grandes ciudades".
Ram¨ªrez a?adi¨® que la petici¨®n "fue inoportuna, porque si se trataba de hablar de la Ley de Grandes Ciudades, salir con la capitalidad no ten¨ªa lugar. Si Monteseir¨ªn cree que Sevilla tiene que tener un estatuto de capitalidad, que lo solicite a la Junta y explique a todos los andaluces el motivo de pedir un estatuto especial por algo que le ha reportado inversiones y ventajas".
El candidato a la alcald¨ªa de M¨¢laga por el Partido Andalucista, Ildefonso Dell'Olmo, tambi¨¦n exigi¨® una respuesta del presidente andaluz a la petici¨®n de Monteseir¨ªn, que calific¨® de "solemne chorrada". "Chaves plante¨® un pacto para evitar la confrontaci¨®n entre ciudades, no s¨¦ si se le habr¨¢ olvidado", dijo Dell'Olmo.
Cr¨ªticas del PSOE
Pero la petici¨®n de Monteseir¨ªn no s¨®lo encontr¨® el rechazo de sus adversarios pol¨ªticos. La secretaria provincial del PSOE y candidata a la alcald¨ªa de M¨¢laga, Marisa Bustinduy, recalc¨® su "desacuerdo" con el alcalde sevillano. "Hasta ahora se ha venido trabajando con el grupo de las siete ciudades, y no entiendo por qu¨¦ hay que formar subgrupos. Si se dota a las grandes ciudades de un r¨¦gimen especial, no parece l¨®gico excluir a M¨¢laga y Bilbao. Hay que seguir trabajando en la misma l¨ªnea que antes", coment¨®.
Bustinduy cuestion¨® sin embargo que el PSOE de Andaluc¨ªa participase de las opiniones del alcalde de Sevilla. "Estoy convencida de que son unas declaraciones de car¨¢cter personal. Es leg¨ªtimo que Alfredo, como alcalde que es, pida lo mejor para su ciudad, pero eso en absoluto tiene que ver con una postura de partido", agreg¨® la candidata socialista a la alcald¨ªa de M¨¢laga.
Tambi¨¦n el vicesecretario regional de pol¨ªtica municipal del PSOE, el malague?o Salvador Pend¨®n, puso en duda que Monteseir¨ªn abanderase una propuesta del partido. "El PSOE de Andaluc¨ªa lo que defiende es un equilibrio dado por el hecho de que existe una ciudad que es la capital pol¨ªtica y administrativa de Andaluc¨ªa y existe otra que es la capital econ¨®mica", opin¨® Pend¨®n. Este peri¨®dico intent¨® recabar otros pareceres en el seno de la ejecutiva regional socialista, pero sus miembros declinaron pronunciarse "para no alimentar pol¨¦micas absurdas".
El alcalde de Sevilla, Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn, insisti¨® ayer en que su intenci¨®n no es perjudicar los intereses de M¨¢laga, sino "defender" los de Sevilla. "Madrid y Barcelona quieren un estatus especial por su condici¨®n de grandes capitales auton¨®micas y nosotros exigimos al ministro que se deje la puerta abierta a otras ciudades que pueden cumplir las mismas condiciones", aclar¨®.
Para el alcalde, la adscripci¨®n de M¨¢laga a la Ley de Grandes Ciudades est¨¢ fuera de toda duda. "Al principio esta ley se pens¨® para Madrid, Barcelona y poco m¨¢s, y fui yo quien pidi¨® en el Ministerio de Administraciones P¨²blicas que pudieran entrar todas las grandes ciudades", apunt¨®. "Pero si Madrid y Barcelona piden un tratamiento especial dentro la legislaci¨®n, nosotros tambi¨¦n lo queremos para Sevilla, porque cumple los requisitos", insisti¨® el alcalde.
La pol¨¦mica desatada por las declaraciones de Monteseir¨ªn reaviva el enfrentamiento que el alcalde de Sevilla y el de M¨¢laga, Francisco de la Torre, mantuvieron hace justo un a?o, cuando el sevillano reclam¨® por primera vez un estatuto de capitalidad para su ciudad.
Las ventajas de los grandes
La futura Ley de Grandes Ciudades contempla una serie de privilegios para sus beneficiarias, entre las que de momento se barajan Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Zaragoza, Bilbao y M¨¢laga.Entre otras medidas, se contempla la de ceder al alcalde o alcaldesa de una gran ciudad la responsabilidad de la coordinaci¨®n de las polic¨ªas que operen en su t¨¦rmino municipal, as¨ª como recibir nuevas competencias en materias como Educaci¨®n, Sanidad y Servicios Sociales.El borrador de la ley, en el que se lleva trabajando en torno a un a?o, ha estudiado las competencias de que gozan grandes ciudades en pa¨ªses como Italia, Francia, Gran Breta?a, Estados Unidos o Argentina. El Gobierno anunci¨® en el momento de iniciar los trabajos su intenci¨®n de debatir el borrador antes de su tr¨¢mite parlamentario con los presidentes de comunidades aut¨®nomas, los alcaldes de las grandes ciudades, la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias y representantes de la Uni¨®n Europea.El proyecto contempla que el Estado y las comunidades aut¨®nomas transfieran a los ayuntamientos beneficiados por la ley tanto las materias como la suma econ¨®mica asignada a los servicios que resulten transferidos. Madrid y Barcelona fueron en principio las ¨²nicas ciudades que contaban con la seguridad de gozar de los privilegios del nuevo marco legal. Tras la ampliaci¨®n del grupo de capitales susceptibles de acceder al nuevo r¨¦gimen, ambas capitales plantearon la necesidad de que se las distinguiera con un estatuto especial por poblaci¨®n y situaci¨®n administrativa.
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