Colapso en el Carlos Haya
Soy un enfermero que trabaja en urgencias del hospital regional Carlos Haya de M¨¢laga. Quisiera hacer llegar a la opini¨®n p¨²blica el colapso que sufre este servicio y, por tanto, la presi¨®n laboral a la que nos vemos sometidos el personal adscrito a ¨¦l.
Despu¨¦s de siete a?os en ¨¦l, he visto c¨®mo hemos pasado de atender a 150 pacientes/d¨ªa a 300. Dos de las causas que han determinado este aumente son:
a) Educaci¨®n Sanitaria. Los pacientes vienen a urgencias sin apenas criterios: con dolencias de tres d¨ªas y hasta tres meses de evoluci¨®n, las cuales no han sido vistas o tratadas en otros centros existentes para ello.
b) Atenci¨®n Primaria. Uno de los objetivos de ¨¦sta es velar por la salud, pues al parecer no lo hacen por la enfermedad. Les pregunto a los pacientes por la opini¨®n de su m¨¦dico de cabecera respecto a su dolencia y la respuesta, siempre es: "me da cita para dentro de tres o cuatro d¨ªas". L¨®gicamente el paciente viene a urgencias.
Esta asistencia masiva no ser¨ªa un problema si la plantilla de trabajadores hubiera aumentado como lo ha hecho el n¨²mero de pacientes. No ha sido as¨ª: seguimos siendo los mismos celadores, limpiadoras, administrativos, auxiliares de enfermer¨ªa, enfermeros. S¨®lo el personal facultativo ha sufrido una reestructuraci¨®n para mejora de este servicio, que tampoco es un aumento de plantilla.
Todo lo expuesto va en detrimento de la atenci¨®n al paciente (cada vez hay m¨¢s quejas, l¨®gicamente) y en pro de la explotaci¨®n del trabajador.
Un ejemplo ocurr¨ªa el pasado d¨ªa 27 de diciembre, cuando se produjo el incendio en los calabozos de la Comisar¨ªa de M¨¢laga. Eran las 19.30, la urgencia estaba colapsada cuando nos comunican la posible cat¨¢strofe; tuvimos que despejar en lo posible las dependencias necesarias, prepararnos y estar listos para recibir las v¨ªctimas, todo ello en un ambiente de presi¨®n laboral al que llev¨¢bamos sometidos toda la tarde.
Respecto al salvamento y evacuaci¨®n de las v¨ªctimas s¨®lo me queda felicitar al centro coordinador de emergencias, unidades de rescate y transporte de heridos, y a todos los compa?eros que ese d¨ªa atendieron a las v¨ªctimas, pues todo se realiz¨® de una forma eficaz y ejemplar de la que nos sentimos orgullosos. (Aun esperamos la felicitaci¨®n de alg¨²n o algunos personajes que se vanaglorian de los servicios p¨²blicos. No nos hace falta.) A las 22.00 horas se acababa el turno, est¨¢bamos exhaustos, pero con la conciencia tranquila.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.