Viejos s¨ªmbolos para un nuevo Vietnam

Hay ayuntamientos, estudiantes, veteranos de anteriores guerras, actores, religiosos, ecologistas y pol¨ªticos de izquierda: el movimiento estadounidense contra la invasi¨®n de Irak es un mosaico cada vez m¨¢s amplio, compuesto por miles de ciudadanos e instituciones que tratan de detener la cuenta atr¨¢s hacia una guerra anunciada. Han recuperado viejos s¨ªmbolos de la era de Vietnam, como el anuncio televisivo de una ni?a deshojando una margarita, y argumentos como los utilizados entonces por Martin Luther King: el gasto b¨¦lico obligar¨¢ a reducir o cancelar programas sociales en EE UU.

Desde octubre se celebran casi cada semana manifestaciones contra la guerra. En diciembre, coincidiendo con el 54? aniversario de la Declaraci¨®n de los Derechos Humanos, el grupo Unidad por la Paz, que aglutina a m¨¢s de 70 organizaciones religiosas, medioambientales, feministas y estudiantiles, llevo a cabo actos de desobediencia civil en m¨¢s de 40 ciudades.

El grupo Answer (Respuesta), un acr¨®nimo que en ingl¨¦s significa Actuar Ahora para Parar la Guerra y el Racismo, es uno de los m¨¢s importantes en el ¨¢mbito pacifista estadounidense. Su coordinador es el ex fiscal general Ramsey Clark, que ejerci¨® el cargo bajo la presidencia de Lyndon Johnson durante la guerra de Vietnam. El grupo Veteranos por el Sentido Com¨²n, compuesto por antiguos soldados, considera que George W. Bush no tiene un planteamiento realista de lo que supondr¨ªa la invasi¨®n de Irak. Esta organizaci¨®n asegura que "una guerra incierta con el objetivo de un cambio de r¨¦gimen" que se librar¨ªa en "un ambiente urbano" (Bagdad), colocar¨ªa, en opini¨®n de algunos ex combatientes de la guerra del Golfo de 1991, en situaci¨®n de desventaja a las tropas estadounidenses. Veteranos por el Sentido Com¨²n opina que la guerra contra Irak no se justifica por los informes aportados hasta ahora por los inspectores de la ONU. Seg¨²n Erik Gustafson, un veterano de la guerra de 1991 que dirige el Centro para la Educaci¨®n por la Paz en Irak, Sadam Husein "no supone una amenaza".

La coalici¨®n Ganar Sin Guerra es otra de las plataformas c¨ªvicas que se oponen a la invasi¨®n de Irak. Esta semana el grupo MoveOn.org, uno de los colectivos aglutinados en Ganar Sin Guerra, estren¨® un anuncio en televisi¨®n con un formato casi id¨¦ntico al que los responsables de la campa?a de reelecci¨®n de Lyndon Johnson idearon en 1964 para desacreditar al candidato republicano Barry Goldwater: una ni?a deshoja una margarita como si esa acci¨®n fuera una cuenta atr¨¢s. Al terminar la cuenta, se produce una explosi¨®n nuclear. El mensaje del anuncio es: "Dejen trabajar a los inspectores".

Algunos importantes profesionales de la industria del entretenimiento tambi¨¦n se oponen a la guerra. Estrellas y directores de Hollywood como Barbra Streissand, Susan Sarandon, Martin Sheen, Sean Penn y Martin Scorsese han declarado abiertamente su rechazo a la invasi¨®n de Irak. En una carta enviada a George W. Bush, un grupo de 100 actores argumentaba que un conflicto b¨¦lico en Oriente Pr¨®ximo incrementar¨ªa "las probabilidades de atentados terroristas, da?ar¨ªa la econom¨ªa y perjudicar¨ªa la imagen de EE UU en el mundo".

En los ¨²ltimos meses, m¨¢s de 30 ayuntamientos, incluyendo los de ciudades como Baltimore, Philadelphia y Seattle, han aprobado mociones en las que censuran los planes para la invasi¨®n de Irak. Las mociones expresan inquietud por la posibilidad de que la guerra provoque una escalada de atentados terroristas y agrave la mala situaci¨®n econ¨®mica en Estados Unidos.