El secretario municipal de Alicante no aval¨® la cesi¨®n de suelo por 15 millones a dos industriales

El secretario general del Ayuntamiento de Alicante, Carlos Artega, no aval¨® con su firma dos mociones aprobadas por el pleno con los ¨²nicos votos del PP, una sobre un convenio suscrito entre el alcalde, Luis D¨ªaz Alperi, del PP, y dos industriales, merced al cual el Consistorio cede suelo a los empresarios por valor de 15 millones, y otra, sobre la compensaci¨®n de 900.000 euros para el municipio por esa operaci¨®n. En principio, la concejal¨ªa de Urbanismo introdujo en una misma moci¨®n el convenio con un anexo al plan parcial pero, ante la negativa de Arteaga a firmar, la desgaj¨®.

El d¨ªa 13 de enero, cuatro d¨ªas antes del pleno municipal, la Gerencia Municipal de Urbanismo ten¨ªa confeccionadas dos mociones sobre el pol¨¦mico plan parcial Benal¨²a Sur, un vasto terreno junto al mar de gran valor inmobiliario, donde est¨¢ planeada la construcci¨®n de unas 1.500 viviendas de lujo. En una de ellas se inclu¨ªan dos apartados: una documentaci¨®n sobre ese plan parcial y el convenio firmado entre el alcalde y los dos empresarios. En ese convenio, el alcalde cede a los industriales una parcela de m¨¢s de 10.000 metros cuadrados, valorada en unos 15 millones de euros, para compensarles por el desmantelamiento de las industrias de harina que mantienen su actividad en el ¨¢mbito de ese plan parcial. La otra moci¨®n hac¨ªa referencia al compromiso de la urbanizadora de los terrenos en compensar al Ayuntamiento con 900.000 euros para construir un centro de la tercera edad. Ninguna de las dos iniciativas iba avalada con la firma del secretario

En unas horas, las dos mociones se convirtieron en tres: una con la nueva documentaci¨®n sobre el plan parcial, otra con el convenio entre Alperi y los dos industriales y la otra, con el acuerdo entre la urbanizadora y el Ayuntamiento. S¨®lo la primera de ellas lleva la r¨²brica del secretario. Las otras dos se aprobaron en el pleno con la oposici¨®n en bloque en contra.

Los grupos de la oposici¨®n, que no advirtieron en el pleno que las mociones iban sin firmar, solicitaron no obstante al secretario que interviniera en la sesi¨®n para garantizar la legalidad de la operaci¨®n. Lo hizo difusamente, argumentando que no se trataba de aprobar una permuta, sino de un convenio urban¨ªstico.

El expediente del pol¨¦mico trueque de suelo carece de informes t¨¦cnicos. Ni siquiera existe una valoraci¨®n patrimonial de los terrenos que el Ayuntamiento cede a los industriales. Incluso los argumentos que D¨ªaz Alperi incluye en el convenio para justificarlo han quedado desvirtuados. El alcalde sostiene que interviene en esa operaci¨®n privada para desbloquear un litigio entre la urbanizadora y los propietarios de las harineras. Sin embargo, uno de los industriales, Jos¨¦ Cloquell, era vicepresidente y consejero de la urbanizadora hasta poco antes de firmar el pol¨¦mico convenio con D¨ªaz Alperi.

El alcalde defendi¨® el martes su convenio con vehemencia y con reiteradas contradicciones. Lleg¨® a afirmar que no sab¨ªa qui¨¦nes eran los empresarios con lo que firm¨® el acuerdo, aunque luego admiti¨® que negoci¨® con ellos. En cualquier caso, asegur¨® que el acuerdo es muy beneficioso para la ciudad. D¨ªaz Alperi llev¨® las mociones a aprobaci¨®n plenaria por la v¨ªa de urgencia, el mismo d¨ªa en el que la atenci¨®n municipal la acaparaba el pol¨¦mico plan que permite construir un palacio de congresos en el Benacantil.