18 empresarios arrestados en Alicante por emplear a 93 inmigrantes irregulares
Los trabajadores eran explotados en empresas de construcci¨®n, agricultura y servicios
La Guardia Civil ha detenido en las comarcas alicantinas de la Vega Baja y de la Marina Alta a 18 empresarios de los sectores de la construcci¨®n, agricultura y servicios, acusados de explotar laboralmente a inmigrantes en situaci¨®n irregular. La operaci¨®n se sald¨® con el arresto de 93 inmigrantes, 88 por estancia ilegal y otros cinco por tener pendientes reclamaciones judiciales. Los inmigrantes, procedentes en su mayor¨ªa del este de Europa y Suram¨¦rica, en principio, ser¨¢n expulsados.
Los empresarios -13 espa?oles, un marroqu¨ª, un lituano, un rumano y dos rusos- fueron descubiertos por la Guardia Civil en controles en lugares de trabajo en los que se comprob¨® la presencia de extranjeros que no pod¨ªan acreditar su estancia legal en Espa?a. En los controles se arrest¨® a 93 inmigrantes, la mayor¨ªa por no tener permisos de residencia, aunque a cuatro de ellos se les imputa tambi¨¦n la ocupaci¨®n ilegal de una vivienda y cinco est¨¢n reclamados judicialmente.
Las indagaciones concluyeron con la detenci¨®n de 11 patronos de la construcci¨®n, cuatro del sector de la agricultura y tres del sector servicios, seg¨²n inform¨® ayer la Comandancia de Alicante. Los empresarios est¨¢n acusados de un delito contra los derechos de los trabajadores. Seg¨²n recalc¨® la Guardia Civil, abusaban de la situaci¨®n de "necesidad" de los extranjeros y los contrataban al margen de la legalidad, en perjuicio de los propios inmigrantes y del erario p¨²blico.
Seg¨²n estimaciones de UGT, 30.000 extranjeros clandestinos trabajan en condiciones irregulares en la Comunidad Valenciana. Hasta la fecha, los empresarios arrestados por estos delitos quedan en libertad, so pena de abonar las correspondientes multas.
M¨¢s de 50 empresarios fueron arrestados en la provincia de Alicante por explotaci¨®n laboral de extranjeros en 2002. El perfil del empleador de extranjeros irregulares es un patr¨®n aut¨®ctono, conocido por sus convecinos, que act¨²a con la m¨¢s absoluta "impunidad", seg¨²n apuntan los sindicatos. Los jueces, en la mayor¨ªa de los casos, dejan a los empleadores en libertad al considerar que su delito no genera alarma social y no existe riesgo de fuga.
Los sindicatos sostienen que el d¨¦ficit de inspectores prueba la "connivencia" entre la Administraci¨®n y los empresarios en la contrataci¨®n irregular de extranjeros. La nueva Ley de Extranjer¨ªa -que incluye un endurecimiento de penas para quienes contraten a irregulares- no ha amedrentado a los empresarios, en tanto que, seg¨²n UGT, el ahorro de los costes laborales que les supone emplear a sin papeles compensa la posibilidad de ser sancionado. El empleo irregular propicia contrataciones por debajo de las garant¨ªas y de los derechos legales de los extranjeros.
Los inmigrantes, en muchos casos, son sometidos a maratonianas jornadas de trabajo a cambio de m¨ªseros sueldos. A la abusiva situaci¨®n laboral de los trabajadores irregulares, rayana con el r¨¦gimen de semiesclavitud, se suman la carencia de alojamientos dignos. As¨ª, muchos son los inmigranes sin papeles que se alojan en naves industriales y almacenes, y algunos ocupan viviendas usadas por sus propietarios como casas de segunda residencia.
Los ¨²ltimos datos recabados por este diario y aportados por la Inspecci¨®n de Trabajo cifran en 986 los inmigrantes clandestinos localizados en empresas entre enero y octubre de 2002. Durante ese periodo, el importe de las sanciones a empresas valencianas por emplear a irregulares se dispar¨® un 20%, con seis millones de euros en multas.
Las comarcas de la Vega Baja y Las Marinas acumulan las mayores bolsas de econom¨ªa sumergida, que se nutre de mano de obra irregular. Tambi¨¦n concentran la mayor¨ªa de los arrestos de empresarios por explotar a extranjeros sin documentaci¨®n. Si hasta mediados de la d¨¦cada de los noventa el sector industrial -calzado y el textil, principalmente- acaparaba los mayores ¨ªndices de econom¨ªa sumergida-, ahora es en la construcci¨®n y en la agricultura donde predomina esta pr¨¢ctica.
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