La flexibilidad de la WDR de Colonia

Tras el Brahms de la Orquesta del Concertgebouw, el festival canario ofreci¨® la actuaci¨®n de la Sinf¨®nica de la Radio de Colonia (WDR), fundada en 1945. Es una formaci¨®n superflexible y brillante, que ha desempe?ado un papel protagonista en el desarrollo de la m¨²sica contempor¨¢nea con encargos m¨²ltiples, Penderecki, Berio, Cage, Nono, Ligeti o Stockhausen, pero que es igualmente apta para el repertorio de est¨¦tica tradicional. No deja de ser curioso e interesante que la WDR est¨¦ en el archipi¨¦lago con su coro para ofrecer a los tinerfe?os la Sinfon¨ªa de los salmos, de Stravinski; a los grancanarios, la Sinfon¨ªa Leningrado, de Shostak¨®vich, y unos y otros, el estreno de Hoch-Zeiten, nueva "entrega" del gran empe?o de Stockhausen, iniciado hace 27 a?os: Licht (Luz). Ha sido el encargo del presente festival y ser¨¢ tan "sonado" como el tan distinto solicitado en la edici¨®n anterior a Luciano Berio, o sea, el nuevo final de Turandot, de Puccini.

El mundo de Invenci¨®n y Descubierta, propio del m¨²sico alem¨¢n, en el que el hecho musical parte de la renovaci¨®n de la materia gracias a la mezcla de fuentes tradicionales y tecnolog¨ªa electroac¨²stica, tiene poco que ver con la gran Sinfon¨ªa n¨²mero 7, Leningrado, de Dimitri Shostak¨®vich, pero todo puede convivir en la historia y hasta liberarse de las circunstancias extramusicales que rodearon una Heroica, de Beethoven, una obertura de Chaikowski como 1812 o, en 1942, una Leningrado. Incluso en el caso de la m¨²sica, el valor testimonial disminuye por la misma abstraccion del lenguaje sonoro, de modo que, una vez m¨¢s, podemos ahorrarnos alusiones ajenas al arte: Shostak¨®vich es ya historia musical con contribuciones tan valiosas y representativas como sus ¨®peras o su excelente m¨²sica de c¨¢mara, mientras que la Sinfon¨ªa n¨²mero 7 parece necesaria para explicar el curso evolutivo de su autor.

De cualquier modo, bueno ser¨¢ decir que la Orquesta de Colonia, con un director de la val¨ªa y la fuerte personalidad de Semyon Bychkov (Leningrado, 1952), hizo una magn¨ªfica versi¨®n de la partitura en sus momentos de m¨¢s serena belleza, en las tensiones y distensiones o en la prolongada insistencia del tema banal¨ªsimo de la marcha en el Allegretto inicial. Largas ovaciones rubricaron la esplendorosa ejecuci¨®n de los profesores de Colonia. Otra formaci¨®n, esta vez austriaca, la Bruckner, de Linz, tiene a su cargo, los d¨ªas 9 y 11 de febrero, la primera audici¨®n de Archipi¨¦lago, suite de Joan Guinjoan, escrita, como la obra de Stockhausen, por encargo del 19? Festival.