Ch¨¢vez celebra el fin de la huelga y anuncia duras medidas de castigo contra la oposici¨®n

La huelga general qued¨® definitivamente suspendida en Venezuela, pero la oposici¨®n no permiti¨® que el presidente Hugo Ch¨¢vez se anotara una rotunda victoria. La contundencia de la jornada dominical de recolecci¨®n de firmas contra ¨¦l y su Gobierno revolucionario logr¨® atenuar el impacto que en la moral de millones de opositores habr¨ªa tenido el retirarse con las manos vac¨ªas. Los voceros de la oposici¨®n anunciaron que hab¨ªan logrado recoger m¨¢s de cuatro millones de firmas para forzar una salida anticipada de Ch¨¢vez, cuyo mandato expira en 2006.

La euforia de las masas opositoras funcion¨® como anestesia para una decisi¨®n a la que se le daban largas: finalizar la huelga que comenz¨® el 2 de diciembre de 2002, que, en la pr¨¢ctica, ya se hab¨ªa desvanecido en numerosos sectores y que deja a su paso un desolador panorama econ¨®mico. En teor¨ªa, el ¨²nico sector que se mantiene en huelga es el de Petr¨®leos de Venezuela (PDVSA), pero all¨ª la situaci¨®n es mucho m¨¢s compleja. Ya no se trata s¨®lo de que los trabajadores no quieran regresar al trabajo, sino de que el Gobierno tampoco desea recibirlos de nuevo. M¨¢s de 5.000 despedidos dan fe de ello.

Ch¨¢vez, que el domingo pas¨® el trago amargo del llamado firmazo hablando durante seis horas y media en la radio y la televisi¨®n p¨²blicas en su programa Al¨®, presidente, asegur¨® que la producci¨®n hab¨ªa trepado a 1,8 millones de barriles diarios, para reforzar la idea de que los petroleros rebeldes ya no son necesarios. "Esos traidores no s¨®lo deben ser despedidos, sino que PDVSA debe quitarles sus jubilaciones e intentar acciones penales para que vayan a la c¨¢rcel", dijo.

El domingo, mientras legiones de opositores iban a los improvisados centros de recolecci¨®n de firmas a expresarle su repudio, Ch¨¢vez prefiri¨® mirar al pasado, dada la coincidencia del firmazo con los cuatro a?os de su ascenso al poder, en 1999. Al finalizar el maratoniano programa hasta le cantaron ?Feliz cumplea?os! y le pusieron cuatro velitas a un pastel.

"No hay nada m¨¢s dram¨¢tico en la pol¨ªtica que ignorar la realidad. Como todo revolucionario, de esos que se creen designados por alguna fuerza divina para rescribir la historia, Hugo Ch¨¢vez desconoci¨® el impacto del firmazo", rese?¨® el vespertino Tal Cual, que dirige el veterano pol¨ªtico y ex guerrillero en los a?os sesenta Teodoro Petkoff.

Del lado antichavista, algunos dirigentes tambi¨¦n se niegan a aceptar el hecho real de que la huelga ha fracasado. Pablo Castro, dirigente de la Confederaci¨®n de Trabajadores de Venezuela (CTV), copatrocinador de la huelga, dijo que ¨¦sta no ha sido levantada, "sino que hemos pasado a una etapa de administraci¨®n del paro". En el mismo sentido declar¨® Lope Mendoza, presidente de la poderosa Confederaci¨®n de Industriales, quien argument¨® que los empresarios seguir¨¢n protestando con horarios restringidos, huelgas escalonadas y otras modalidades que se revelar¨¢n en su momento.

Situaci¨®n grav¨ªsima

En medio de los eufemismos de lado y lado, el pa¨ªs intenta retomar sus ritmo enfrentando una situaci¨®n econ¨®mica que unos y otros reconocen como grav¨ªsima. De un momento a otro se anunciar¨¢ el r¨¦gimen de control de cambio, que promete ser otro motivo de controversia entre Gobierno y organizaciones patronales, conformadas por muchos importadores de mercanc¨ªas terminadas y fabricantes que deben comprar materias primas en el exterior para una industria nacional que no ha podido superar el nivel del ensamblaje.

"Saludamos que la oposici¨®n haya tomado finalmente la senda constitucional que siempre estuvo planteada y ellos ignoraron", dijo el dirigente oficialista El¨ªas Jaua. "Si hubiesen comenzado por ah¨ª, nos hubi¨¦semos evitado un golpe de Estado, un sabotaje a la industria petrolera y dos a?os de zozobra. Ahora hace falta un ¨¢rbitro electoral confiable y un ambiente de equilibrio informativo para ir a unas elecciones o a un refer¨¦ndum".

Para hoy, los dos bandos enfrentados tienen programada su siguiente batalla. Al cumplirse 11 a?os del intento de golpe de Estado contra el presidente Carlos Andr¨¦s Perez, que encabez¨® el 4 de febrero de 1992 el teniente coronel de paracaidistas Hugo Ch¨¢vez, ¨¦ste y sus partidarios lo celebrar¨¢n casi como una festividad patri¨®tica. Los dirigentes de la oposici¨®n han convocado a sus partidarios a vestir ese d¨ªa de negro en se?al de luto.