Un paso adelante en la protecci¨®n t¨¦rmica
La protecci¨®n t¨¦rmica de las naves sigue siendo un elemento cr¨ªtico para los dise?adores de naves espaciales que est¨¢n trabajando en los ingenios del futuro. Las exigencias que tienen que satisfacer son todo un reto. La piel, en forma de escamas, de un transbordador tiene que ser capaz de protegerlo en un rango de temperaturas que va desde 156 grados cent¨ªgrados bajo cero en el espacio a 1.600 grados cent¨ªgrados sobre cero en la abrasadora maniobra de reentrada en la atm¨®sfera. La soluci¨®n de las naves reutilizables actuales de la NASA es muy delicada (materiales aislantes de siete tipos diferentes hechos para cumplir los requisitos t¨¦rmicos en diferentes puntos de la nave) y la revisi¨®n de las aproximadamente 25.000 losetas de compuestos de silicio que recubren la nave completamente exige 30.000 horas de trabajo entre vuelo y vuelo. Con un mantenimiento lento, exhaustivo y costoso, la cubierta t¨¦rmica de un transbordador actual est¨¢ dise?ada para 100 vuelos.
La alternativa para la NASA, desde luego, tiene que ser m¨¢s barata y m¨¢s segura. Se est¨¢ estudiando la protecci¨®n t¨¦rmica basada en placas met¨¢licas con estructura de panal y un dise?o de sellado y anclaje que aumente la hermeticidad de las juntas y facilite enormemente la revisi¨®n y sustituci¨®n de las piezas. Esta alternativa, denominada sistema de protecci¨®n t¨¦rmica Armor (iniciales en ingl¨¦s de adaptable, robusta, met¨¢lica, operable y reutilizable), est¨¢ siendo ensayada en el Centro Espacial Marshall de la NASA, informa el especialista Leonard David. No hay que olvidar que uno de los requisitos de la piel de las naves espaciales es la resistencia a los impactos que puede sufrir la superficie en el espacio por micrometeoritos o por fragmentos de basura espacial que pueden perforar el fuselaje. Adem¨¢s tiene que ofrecer protecci¨®n frente a la corrosi¨®n.
La estructura de panal de las l¨¢minas de Armor permite incrementar la resistencia a los impactos, aunque a costa del aumento de peso, un factor siempre cr¨ªtico en la industria aeroespacial.
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