Osasuna borra del mapa al Madrid
Con un juego directo y a todo trapo, el equipo navarro pas¨® por encima del madridista, cuyas figuras se quitaron de en medio
Tal y como suele ser costumbre, Osasuna atropell¨® al Madrid, que se dej¨® atropellar en El Sadar. Como no es novedad, podr¨ªa pensarse en una especie de destino escrito. El Madrid huye de estos partidos como de la peste. Se le ve de lejos. Se le vi¨® desde el primer minuto, abrumado por la marea roja, que no cedi¨® hasta el ¨²ltimo minuto. S¨®lo en el ¨²ltimo acto del partido, en un cabezazo de Morientes que probablemente atraves¨® la raya, el Madrid hizo aquello que desestim¨® durante todo el encuentro: la b¨²squeda del gol. Se borraron casi todas sus figuras y de ah¨ª a la barrida de Osasuna hubo un paso.
Algunas cosas no cambian en el f¨²tbol, ni en estos tiempos, cuando tanto se habla de la distancia que procura el dinero. El Madrid tiene mucho y Osasuna anda escaso, pero poco importa cuando llega el momento de medirles en El Sadar, escenario de duelos vibrantes y muy ¨¢speros, partidos que el Madrid los sufre como un tormento. Cualquier Osasuna, el de ahora o el de Iriguibel, sabe exactamente lo que tiene que hacer frente al lujoso Madrid, el de ahora o el de Butrague?o. F¨²tbol sin tregua se llama al estilo del equipo navarro, con algunos matices que merecen atenci¨®n. Es cierto que Osasuna jug¨® con la excitaci¨®n de los que se juegan la vida, con el punto agresivo de quien sabe el efecto que produce en el Madrid, siempre frente a la guerrilla, y de esto se trat¨® en el partido: de jugadores de rojo que aparec¨ªan por todos los rincones del campo sin dar un respiro a sus rivales, un juego a tambor batiente que result¨® excesivo para las acad¨¦micas figuras madridistas, que no lograron juntar dos pases casi nunca. Pero al vehemente f¨²tbol de Osasuna no le falt¨® criterio y hasta detalles de clase. No hubo rifa de pelotazos y no le falt¨® elaboraci¨®n fina, todo a la m¨¢xima velocidad, eso s¨ª. En cambio, el Madrid hizo lo suyo a la m¨ªnima velocidad, y cuando pudo, porque no oli¨® la pelota durante largas fases del partido. Se la regalaban a las casacas rojas sin el menor pudor.
OSASUNA 1 - REAL MADRID 0
Osasuna: Sanzol; Yanguas, Mateo, Josetxo, Antonio L¨®pez; Pu?al, Alfredo (Palacios, m. 82); Mu?oz, Iv¨¢n Rosado, Manfredini (Gancedo, m. 74); y Aloisi (Morales, m. 90).
Real Madrid: Casillas; M¨ªchel Salgado, Helguera, Pav¨®n, Roberto Carlos; Figo, Makelele, Flavio (Guti, m. 60), Zidane (Morientes, m. 73); Ra¨²l y Ronaldo.
Gol. 1-0. M. 38. Manfredini culimina una jugada individual por la banda izquierda con un derechazo cruzado.
?rbitro: Medina Cantalejo. Mostr¨® trajeta amarilla a Alfredo, Mu?oz, Zidane y Figo. Expuls¨® a Figo con roja directa (m. 63).
18.766 espectadores en El Sadar.
Al Madrid le pint¨® mal desde el principio. Del Bosque dijo en las v¨ªsperas que ten¨ªa miedo al partido. Ven¨ªa avisado por los precedentes, sin ir m¨¢s lejos el del pasado a?o. El entrenador se tem¨ªa el mismo tipo de encuentro, con id¨¦nticas consecuencias. As¨ª ocurri¨®. Osasuna jug¨® a todo trapo, con el aliento incansable de la hinchada, que no desmaya cuando llega el Madrid a El Sadar. Y como ocurri¨® la temporada anterior, el Madrid se sinti¨® intimidado, sin la voluntad necesaria para sobreponerse a un partido que le resultaba detestable. No estaban las estrellas para lo fino, y mucho menos para lo grueso. Osasuna puso unas condiciones que nadie en el Madrid se atrevi¨® a contestar.
La primera condici¨®n fue definitiva: la pelota apenas sali¨® del campo madridista, del ¨¢rea en la mayor¨ªa de los casos, de manera que Helguera y su gente dedicaron la tarde a achicar a agua. Y no muy bien. Claro que no encontraron ayuda. Roberto Carlos dimiti¨®, Zidane acus¨® dos patadas tempranas, Figo perdi¨® los nervios y as¨ª sucesivamente. Nadie arrim¨® el hombro en un partido donde era m¨¢s necesario que nunca. En El Sadar no se gana con los t¨ªtulos de cr¨¦dito, cosa que el Madrid sabe desde hace a?os. En El Sadar hay que a?adir la parte extra de coraje, decisi¨®n y solidaridad que no se vio en el equipo de Del Bosque.
Bastaron cinco minutos para determinar el signo del encuentro, que no vari¨® jam¨¢s. Osasuna empuj¨® a su rival, lo meti¨® en su ¨¢rea, le hizo saber la clase de tarde que iba a padecer y no par¨® hasta conseguir la victoria. No necesit¨® grandes ocasiones para proclamar su autoridad, que era evidente por poder¨ªo y deseo. Y por juego. De eso se encargaron Pu?al, Alfredo y Manfredini, autores de un partido excepcional. La noticia fue Manfredini, un fichaje de ¨²ltima hora que sali¨® convertido en el h¨¦roe del encuentro. El pasado a?o jugo en el sorprendente Chievo y esta temporada regres¨® a su club de origen, el Lazio, donde no le han dado oportunidades. En Osasuna las ha tenido inmediatamente, y ser¨¢ una bicoca de jugador si funciona siempre como lo hizo frente al Madrid. Le dio la tarde a M¨ªchel Salgado y marc¨® un gol de m¨¦rito, por habilidad y precisi¨®n en el remate.
Osasuna administr¨® el tanto con generosidad. Lejos de taparse, continu¨® en su ley, con empuje y f¨²tbol vertical. Del Madrid no hubo noticias en el primer tiempo y casi tampoco en el segundo. Todo el protagonismo correspondi¨® a Osasuna, que remat¨® dos veces al palo en el segundo tiempo, donde no se apreci¨® ninguna mejor¨ªa en las filas madridistas. Ninguno de sus grandes jugadores tuvo peso alguno en el encuentro, y hasta pareci¨® que se borraba m¨¢s de uno. El ¨²nico problema de Osasuna radic¨® en su incapacidad para lograr el resultado que merec¨ªa. Aquel gol de ventaja era cosa peque?a para los m¨¦ritos del equipo y daba para sospechar en la respuesta del Madrid, por mal que jugara. Es lo que sucedi¨® en una acci¨®n que levantar¨¢ pol¨¦mica -el cabezazo de Morientes dio la impresi¨®n de traspasar la l¨ªnea de gol- y que oblig¨® a pensar en las razones que impidieron al Madrid fabricar una ocasi¨®n decente hasta el ¨²ltimo minuto. Ni las fabric¨®, ni tuvo inter¨¦s en hacerlo.
![Ronaldo y Ra¨²l se lamentan tras el gol de Osasuna.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/M376GJPG7UIDXFDVIQPHD6EDUE.jpg?auth=7a4b6b899e041b4360ac8f848e25c82240dd2d7566f57c376bd62b4167ab448a&width=414)
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