Llamadas sin respuesta desde el t¨²nel de la muerte
S¨®lo el hedor a pl¨¢stico quemado y las nubes de humo permit¨ªan suponer los horrores debajo de la superficie, donde un infierno mat¨® ayer a m¨¢s de 120 pasajeros de dos convoyes del metro. Hab¨ªan pasado m¨¢s de 12 horas desde el incendio, provocado en plena hora punta de la ma?ana, y la gente a¨²n se agolpaba llorosa y conmocionada, desesperada por conocer noticias de sus seres queridos. Se mezclaban con cientos de bomberos, polic¨ªas y equipos de rescate.
"Mi hija llam¨® dos veces a las 9.57 gritando: '?Madre, hay humo por todas partes, pero las puertas no se abren!", contaba una mujer en un centro de rescate provisional, a la salida de la estaci¨®n Daegu Joongangro. Kim Bok-sun, de 45 a?os, recibi¨® tambi¨¦n una llamada de su hija, de 21. La madre cont¨® entre l¨¢grimas que le dijo que rompiera una ventana para salir, pero no consigui¨® volver a contactar con ella por el m¨®vil, seg¨²n The New York Times.
Tres niveles m¨¢s abajo, las temperaturas cercanas a las de un alto horno hab¨ªan fundido los cristales y retorcido los armazones de metal de 12 vagones. Cuerpos carbonizados y una gruesa capa de ceniza cubr¨ªan el suelo de los trenes.
Las im¨¢genes de televisi¨®n mostraban trabajadores de rescate con tanques de ox¨ªgeno y m¨¢scaras de gas, registrando a fondo los vagones destruidos y metiendo en bolsas los cuerpos de las v¨ªctimas. "Es imposible identificar los cad¨¢veres de los vagones, est¨¢n demasiado desfigurados", afirm¨® un bombero.
"Llevo aqu¨ª todo el d¨ªa esperando alguna noticia de mi hermana", dijo Kim Mi-ja, un ama de casa de 45 a?os, con los ojos rojos de llorar durante horas. "No s¨¦ c¨®mo ha podido pasar algo as¨ª".
Cerca de ah¨ª, una empresa telef¨®nica intentaba rastrear las se?ales de los m¨®viles de los desaparecidos, a petici¨®n de sus familiares. "A casi la mitad les hemos dicho que la ¨²ltima se?al ven¨ªa de debajo de donde estamos", dijo un empleado.
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