El violento Nueva York de Martin Scorsese
Se estrena la pel¨ªcula m¨¢s ambiciosa del cineasta, con Leonardo DiCaprio y Daniel Day-Lewis
Parece imposible que Martin Scorsese, para muchos el mejor cineasta estadounidense con vida, tenga que esperar m¨¢s de 25 a?os para llevar a la pantalla una pel¨ªcula. Pero as¨ª son las cosas en Hollywood. Gangs of New York no es una pel¨ªcula cualquiera. Una producci¨®n de m¨¢s de cien millones de d¨®lares financiados de forma independiente. "Esta pel¨ªcula ha sido mi sue?o, y aunque suene a t¨®pico, es lo que es: un sue?o hecho realidad, porque los t¨®picos a veces tambi¨¦n son ciertos", afirma Scorsese, quien a sus 60 a?os y con una filmograf¨ªa que incluye Taxi driver, Malas calles, Toro salvaje o Uno de los nuestros jam¨¢s ha logrado (como les ocurri¨® a Charlie Chaplin, Howard Hawks, Alfred Hitchcock, Stanley Kubrick y Orson Welles) un Oscar. "Son un negocio", admite el cineasta. "Supongo que en la d¨¦cada de los setenta no me importaba, porque a cambio pude hacer filmes muy interesantes, pero a estas alturas es una gran decepci¨®n". Gangs of New York es candidata este a?o a diez oscars. Entre ellos, el de mejor director, para el que Scorsese es el favorito.
"Este filme ha sido mi sue?o, y aunque suene a t¨®pico, es lo que es: un sue?o hecho realidad"
Gangs of New York se rod¨® durante m¨¢s de un a?o en los estudios Cinecitt¨¤ de Roma, donde Dante Ferretti, el dise?ador de arte de esta pel¨ªcula, recre¨® el barrio neoyorquino de Five Points en un ¨¢rea de cerca de cuatro kil¨®metros cuadrados. "Era como verse inmerso en aquel tiempo, aislados del resto del mundo, viviendo la violencia de aquellos a?os", afirma Leonardo DiCaprio. "Fue como hacer Ben-Hur".
Martin Scorsese hab¨ªa so?ado toda la vida con esta historia de g¨¢nsteres en los or¨ªgenes de su ciudad, con los enfrentamientos entre las hordas de inmigrantes irlandeses y los que ya se cre¨ªan con derechos sobre una ciudad que nac¨ªa. Scorsese hab¨ªa intentado varias veces adaptar la novela del mismo t¨ªtulo de Herbert Asbury. Siempre sin ¨¦xito. Hasta que el que fuera superagente de Hollywood Mike Ovitz le propuso seguir con el viejo proyecto. "Me dijo que por qu¨¦ no hac¨ªamos Gangs of New York. Que ten¨ªa una nueva compa?¨ªa, que acababa de firmar con Leonardo DiCaprio", recuerda Scorsese. "Le conoc¨ªa de antes", indica Scorsese en referencia a DiCaprio. "Robert de Niro me hab¨ªa dicho que echara un ojo al chaval". Harvey Weinstein, el productor m¨¢s temido y adorado de la industria, tambi¨¦n ten¨ªa algo que ofrecer en este nuevo intento de llevar a la pantalla Gangs of New York: la financiaci¨®n a trav¨¦s de Miramax y acuerdos con Europa.
Weinstein logr¨® rescatar, para el papel que inicialmente iba a interpretar Robert de Niro como el violento Bill El Carnicero, a Daniel Day-Lewis, alejado del cine durante cinco a?os y dedicado a hacer zapatos artesanales en Florencia. "Eso es lo bueno de Harvey, que simplemente llama a la gente. Le llam¨® varias veces y algunas de las conversaciones fueron hilarantes, como cuando le dijo: 'Daniel, si no haces el papel lo har¨¦ yo, y conseguir¨¦ todos los galardones que t¨² no habr¨¢s conseguido", cuenta Scorsese. Day-Lewis acept¨® finalmente salir de su exilio voluntario y ahora aspira a un Oscar al mejor actor por tercera vez en su carrera. "En parte, la raz¨®n para alejarme del cine es poder disfrutar m¨¢s de la experiencia de trabajar de nuevo", afirma Day-Lewis. "S¨¦ que puede sonar perverso pero me da placer explorar estos personajes. Hay algo que es extra?amente liberador".
El rodaje de Gangs of New York estuvo plagado de problemas, desde el comienzo hasta el final. Su estreno, previsto para 2001, se retras¨® ante la violencia de sus im¨¢genes y su proximidad con los atentados de las Torres Gemelas. "No fue un tiempo f¨¢cil, y decir eso siempre suena a queja velada, pero casi, de forma invariable, los problemas son parte del placer", confirma el actor brit¨¢nico de origen irland¨¦s. A los problemas econ¨®micos y de planificaci¨®n se sumaron los rumores de enfrentamientos entre los actores. "Nunca he conocido un actor m¨¢s comprometido con su trabajo", afirma DiCaprio sobre Day-Lewis, quien a?ade: "Estoy seguro de que Leo tambi¨¦n acab¨® completamente agotado al final del filme". Lo que nadie niega son las batallas campales entre Weinstein y Scorsese, tanto durante el rodaje como, en especial, a la hora de montar la pel¨ªcula. Se habla de una primera proyecci¨®n de ocho horas que dej¨® fr¨ªos a quienes lo vieron. "Trabajar con Harvey fue toda una experiencia", comenta Scorsese, antes de agregar que todos los fuegos artificiales que se dieron durante el rodaje, los gritos y los insultos fueron un problema de personalidad. "Yo soy de sangre caliente, y ¨¦l es muy efusivo, as¨ª que ten¨ªamos que explotar antes de reunirnos para que la energ¨ªa no hiciera saltar el techo por los aires. A pesar de eso, no s¨¦ si hubiera podido realizar la pel¨ªcula sin ¨¦l".
Uno de los puntos m¨¢s comentados es el metraje del filme, finalmente de una duraci¨®n de dos horas y 45 minutos, en lo que muchos consideran un montaje forzado por Weinstein, conocido en la industria como Harvey Manostijeras. Para Daniel Day-Lewis, los meses de rumores y cr¨ªticas han generado cierta fascinaci¨®n por el filme: "Aunque se piense que ten¨ªa que ser m¨¢s corta o m¨¢s larga, o lo que se quiera pensar, lo que hay es la pel¨ªcula que ¨¦l quer¨ªa hacer". De los sucesivos montajes que Scorsese realiz¨® s¨®lo hay algo que lamenta no haber podido dejar: escenas que mostraran la historia de Nueva York entre 1820 y 1890, "donde se viera la vida de esta ciudad", dice. "Hubiera estado bien, pero no lo pod¨ªa combinar con la acci¨®n y lo dej¨¦", explica. Un sue?o realizado que no ha amilanado la fuerza creativa de Scorsese, unido ahora una vez m¨¢s a DiCaprio y a Weinstein para otro proyecto igual de ambicioso, centrado en la vida de Howard Hughes bajo el t¨ªtulo de The aviator. "Espero poder dise?ar las escenas de vuelo como las tengo en la cabeza", adelanta con ese sentimiento de que lo que est¨¢ por venir tambi¨¦n ser¨¢ igual de ¨¦pico que lo que ha conseguido recrear en Gangs of New York.
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