En son de paz

Cuando retumban, una vez m¨¢s, tambores de guerra, resulta estimulante escuchar la voz de estos m¨²sicos que vienen del conflictivo Oriente Pr¨®ximo y hablan de convivencia arm¨®nica. Se les oy¨® decir desde el escenario que Israel no es aquello que se ve en la CNN, y que ellos tocan porque la m¨²sica es m¨¢s poderosa que el miedo.

Sheva, grupo israel¨ª fundado en 1996 en las colinas de Galilea, naci¨® de la amistad de sus siete miembros -jud¨ªos, ¨¢rabes y cristianos, nacidos todos entre 1966 y 1973-, y no tanto como el proyecto profesional que ya ha generado cuatro discos: Celestial wedding, Day & night, The garden y uno que est¨¢ en camino, al margen de una grabaci¨®n con Jai Uttal y Omar Faruk Tekbilek. Sheva recurre para su fusi¨®n musical a instrumentos de cuerda y percusi¨®n de tradiciones como el santur persa, el djemb¨¦ africano o la baglama turca. El aroma oriental perfuma todas sus canciones -aunque hasta el reggae hace acto de presencia-, y las influencias son tan variadas que igual recurren al mism¨ªsimo rey David que se inspiran en mantras de la India o textos suf¨ªes. Cantan en hebreo sobre una base r¨ªtmica muy al gusto de los tiempos. Con una bater¨ªa anclada en la escuela del rock. En directo se emplean con pac¨ªfica contundencia. Y la consigna parece clara: bailar.