Apuros presidenciales en M¨¦xico
Vicente Fox, cuyo estandarte electoral fue la decencia, se enfrenta a un esc¨¢ndalo sobre financiaci¨®n ilegal de su campa?a
El turbio apu?alamiento de la titular del Instituto Electoral del Estado de M¨¦xico, que renueva hoy alcald¨ªas y esca?os, ocurri¨® el 19 de febrero, despu¨¦s del asesinato en Culiac¨¢n, tierra de narcos, del suegro del secretario del presidente, Vicente Fox, y ocho d¨ªas antes de la detenci¨®n, en la capital federal, del ex titular de la Comisi¨®n Bancaria y de Valores (CNBV), Eduardo Fern¨¢ndez. Los demonios andan sueltos, de nuevo, en M¨¦xico, acogotado por una violencia antigua y un esc¨¢ndalo, plagado de mentiras, verdades y manipulaciones sobre fondos electorales prohibidos, que castiga a Fox, a su antecesor, Ernesto Zedillo (1994-2000) y puede tener efectos expansivos.
"Todos aquellos que quisieran ver caer a la pareja presidencial, todos aquellos que est¨¢n esperando a ver cu¨¢ndo se tropiezan, van a beber una sopa de su propio chocolate", declar¨® el presidente, en referencia a una supuesta maquinaci¨®n para descabalgarlo del poder junto con su esposa, Marta Sahag¨²n, a quien la oposici¨®n critica un protagonismo que excede las prerrogativas de las primeras damas.
El monto de los ingresos ilegales, seg¨²n los cargos, supera los 200.000 d¨®lares
Pero el esc¨¢ndalo de portada se remonta al 21 de junio de 2000, fecha en que todo anticipaba la victoria del ex gobernador de Guanajuato en las elecciones presidenciales del 2 de julio. "Una persona con la que Zedillo despachaba a diario y que ahora coquetea con el Gobierno filtr¨® la informaci¨®n del CNBV al Partido Revolucionario Institucional (PRI) para tratar de parar a Fox", seg¨²n las fuentes consultadas.
Enrique Jackson, diputado del PRI, que fue r¨¦gimen durante siete decenios, acus¨® entonces a Lino Korrodi, recaudador de la agrupaci¨®n Amigos de Fox, de operar un sistema de transferencias de dinero procedente del extranjero, constitucionalmente ilegal. "Y quien reparte se lleva la mayor parte", ironiza la maledicencia, en alusi¨®n a Korrodi, que niega haber cometido delito alguno y obtuvo sucesivos amparos judiciales para no testificar. Los ingresos documentados, seg¨²n los cargos, superan los 200.000 d¨®lares pero otros c¨¢lculos los sit¨²an en cerca de 30 millones.
"Espero que este esc¨¢ndalo no se convierta en el Watergate de Fox", advirti¨® el analista Leo Zuckerman. Todo indica que los remitentes del dinero fueron grandes empresas mexicanas o particulares que apoyaron al PRI y despu¨¦s al emergente Fox, y disimularon las transferencias, efectu¨¢ndolas desde B¨¦lgica o Estados Unidos, seg¨²n fuentes cercanas a la investigaci¨®n. El peloteo, los subterfugios y los problemas de competencias entre tribunales, sospechosos de parcialidad algunos, retrasaron las investigaciones. La bomba estall¨® el pasado 24 de febrero. Sinti¨¦ndose en peligro, y animado en la sombra por gente con otros intereses, Eduardo Fern¨¢ndez, presidente de la CNBV durante el sexenio de Zedillo y los meses previos a la investidura de Fox, en diciembre del 2000, sali¨® a la carga.
"Tengo informaci¨®n microfilmada de todo", avis¨®. "Los mecanismos utilizados por los Amigos de Fox son similares a los que utiliza la delincuencia organizada". Dos d¨ªas despu¨¦s era detenido. Fox, ahora, y Zedillo, tres a?os atr¨¢s, encubrieron a los presuntos delincuentes, afirm¨®.
Fern¨¢ndez pidi¨® este jueves que Zedillo fuera llamado a declarar. Curiosamente, seg¨²n la aguda observaci¨®n de un funcionario, uno de sus abogados trabaja con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), enemigo jurado de Zedillo. "Un ex presidente se queda sin poder, pero rodeado de una corte de lambiscones (pelotas)", dice uno de los personajes de La Silla del ?guila, ¨²ltimo libro de Carlos Fuentes. "Ahora lo enga?an sus allegados. Le ofrecen la tentaci¨®n de la venganza".
La reflexi¨®n literaria es un comod¨ªn susceptible de cuadrar en varios ex presidentes mexicanos, aunque los t¨¦rminos de la inducci¨®n al desquite pueden invertirse. "Salinas no perder¨¢ ocasi¨®n de atizarle a Zedillo", aventura el funcionario.
Todo es posible en el M¨¦xico de las caretas, las reyertas y las cloacas. El reacomodo de fuerzas, la violencia pol¨ªtica y la lucha por el poder malogran, mientras tanto, la construcci¨®n del ansiado Estado de derecho. "?Tenemos transici¨®n o descomposici¨®n?", se pregunta una fuente oficial con conocimientos para la interrogaci¨®n.
M¨¢s la segunda que la primera, a juzgar por el griter¨ªo, las intrigas, los focos de violencia y la fragilidad de los poderes del Estado, pese a los esfuerzos del Gobierno por acertar. "El punto central es que es la percepci¨®n de que se pueden hacer cosas extraordinarias sin costos pol¨ªticos ni penales", se?ala el analista Jorge Fern¨¢ndez. "Que la ausencia de control permite aventurarse hasta el exceso con un alto grado de impunidad".
La abrupta y amenazadora entrada en liza de Eduardo Fern¨¢ndez no parece ajena a esas conclusiones. El ex jefe de la CNBV no es un pelanas, ni una hermanita de la caridad y conoce como pocos las entra?as del sistema financiero y la identidad de quienes depredaron las arcas p¨²blicas con complicidades oficiales.
"Est¨¢ queriendo protegerse, pero se ha suicidado. Puede acabar con tiro en la cabeza", se?ala una fuente. Fern¨¢ndez, acusado de violaci¨®n del secreto bancario y de las obligaciones de funcionario, am¨¦n de lavado de dinero, fue el principal operador del monumental y controvertido rescate bancario de 1995. En disputa con otros altos funcionarios, actu¨® a discreci¨®n durante la distribuci¨®n de cerca de 40.000 millones de d¨®lares, que treparon hasta los 70.000 actualmente. Perdon¨® las deudas de grandes empresarios y benefici¨® o perjudic¨®, sin que el inter¨¦s nacional fuese su norte, de acuerdo con sus detractores. No pocos banqueros se prestaron entre s¨ª, se hicieron millonarios, y el Estado corri¨® con las deudas.
M¨¦xico debi¨® dedicar el 11,9% del PIB para evitar la bancarrota nacional, consecuencia del cataclismo financiero de las Navidades del a?o anterior, coincidiendo con el relevo de los presidentes Salinas y Zedillo, que acabaron enemistados por complejas razones. Ambos se imputaron las principales causas de la cat¨¢strofe.
El presidente Fox y su Partido Acci¨®n Nacional (PAN) encajar¨¢n, sin duda, los costes pol¨ªticos derivados de la denunciada financiaci¨®n ilegal de su campa?a porque la decencia fue su estandarte electoral. Pero el esc¨¢ndalo tiene ramificaciones de mayor calado que la actuaci¨®n de los Amigos de Fox, y en su desarrollo ya se detectan movimientos espurios.
Asumiendo responsabilidades que no parecen corresponder, de acuerdo con portavoces oficiales, desde la Auditor¨ªa Superior de la Federaci¨®n parece animarse a un regreso sobre el rescate, sus servidumbres y los organismos que lo controlaron: el Fondo Bancario de Protecci¨®n al Ahorro Bancario (Fobaproa), sustituido el d¨ªa de la guadalupana de 1998 por el Instituto de Protecci¨®n al Ahorro Bancario (IPAB), seg¨²n acuerdo de la C¨¢mara de Diputados.
El debate ser¨ªa un revulsivo nacional porque, seg¨²n recuerda Luis Javier Valero Flores en su ensayo Fobaproa-IPAB. El doble atraco del siglo, "los m¨¢s acaudalados empresarios, aliados a poderosos grupos econ¨®micos extranjeros, precipitaron la crisis financiera que llev¨® a que m¨¢s de siete millones de usuarios de la banca cayeran en cartera vencida, con graves repercusiones para la vida pol¨ªtica, econ¨®mica y social del pa¨ªs".
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