"El patrimonio se hereda; el puesto de trabajo, no"
El empresario explica algunos puntos de su modelo de gesti¨®n y habla de la sucesi¨®n
Asumi¨® la direcci¨®n de Mercadona en 1981. La firma cerr¨® ese a?o con 17 establecimientos en la Comunidad Valenciana. Algo m¨¢s de dos d¨¦cadas despu¨¦s, Juan Roig (Valencia, 1949) preside una firma familiar que tiene 687 supermercados en 38 provincias de 13 comunidades aut¨®nomas. La firma es una de las dos empresas de este segmento de la distribuci¨®n con mayor cuota de mercado en Espa?a. Mercadona factur¨® 5.786 millones de euros en 2002, un 28% m¨¢s que en 2001, y elev¨® su beneficio un 30%. El a?o pasado invirti¨® 312 millones de euros, y para este a?o prev¨¦ 350 millones. Su plantilla, 34.400 personas fijas, creci¨® en 7.000 efectivos. Mercadona trabaja para completar su mapa de Espa?a y busca la mejor forma de internacionalizarse.
"Internet es simplemente una buena herramienta, no es la panacea universal. S¨®lo soluciona el acceso a la compra, pero no el llevarla"
"No estamos dispuestos a que el empleo en comercio sea la 'Cenicienta' en Espa?a. Queremos puestos de trabajo dignos"
"De momento, paramos nuestro proyecto en Portugal porque tenemos que estudiar c¨®mo internacionalizar Mercadona"
Pregunta. ?C¨®mo les afecta la situaci¨®n econ¨®mica?
Respuesta. Una de las ventajas de nuestro sector es que tiene una demanda inel¨¢stica y da igual si la econom¨ªa va hacia arriba o hacia abajo. Nos preocupa como ciudadanos.
P. En Espa?a, ?d¨®nde van a implantarse a partir de ahora?
R. Este a?o empezamos en Galicia y, a medio plazo, en toda Asturias y Cantabria.
P. Llevan un ritmo de aperturas de 100 tiendas al a?o, ?pueden mantenerlo mucho tiempo?
R. En principio, est¨¢n dise?ados dos o tres a?os m¨¢s as¨ª. Llevamos cuatro de expansi¨®n y la estructura de la empresa est¨¢ soportando el crecimiento sin problemas, aunque con mucho trabajo.
P. Hace a?os compraron una cadena en Andaluc¨ªa y otra en Catalu?a, pero no parece la f¨®rmula preferida para crecer, ?por qu¨¦?
R. Cuando compras una empresa, lo m¨¢s f¨¢cil es firmar y pagar, pero lo m¨¢s dif¨ªcil es el d¨ªa siguiente, cuando tienes que poner en sinton¨ªa los equipos de trabajo. Eso conlleva much¨ªsimos problemas. Tenemos una filosof¨ªa y la empresa que puedas comprar o absorber tiene otra, y llegar a unificarlas cuesta much¨ªsimo. Es m¨¢s sencillo el crecimiento por medios propios.
P. Hace unos meses anunciaron para 2004 su implantaci¨®n en Portugal, ?c¨®mo la prev¨¦n?
R. De momento, paramos el proyecto de Portugal, porque tenemos que estudiar c¨®mo internacionalizar Mercadona. Estamos redefiniendo el modelo porque lo que quer¨ªamos hacer en Portugal, empezar con la misma filosof¨ªa de mancha de aceite, es muy dif¨ªcil de implantar y tenemos que estudiar c¨®mo nos internacionalizamos y cu¨¢l es el pa¨ªs que puede adaptarse mejor a nuestro modelo y d¨®nde pod¨ªamos hacerlo m¨¢s r¨¢pidamente.
P. ?Barajan, entonces, m¨¢s de una posibilidad?
R. Exacto, distintas alternativas y c¨®mo tenemos que hacerlo porque creemos que la estrategia de mancha de aceite que hemos utilizado en Espa?a ser¨¢ muy dif¨ªcil hacerla en otro pa¨ªs.
P. ?C¨®mo ha evolucionado el peso de su marca propia?
R. No nos gusta hablar de marca propia, no tenemos ninguna marca. Son productos hechos por el fabricante y estamos evolucionando hacia que los fabricantes nos ofrezcan productos de gran calidad a un precio muy bajo. En la cifra de ventas estamos alrededor del 30% de la facturaci¨®n.
P. ?Hasta d¨®nde quieren llegar con esta f¨®rmula?
R. Seg¨²n como vaya respondiendo el consumidor, pero creo que les encanta comprar productos de una gran calidad al precio m¨¢s bajo posible.
P. ?Tienen alguna referencia en el extranjero en este tema?
R. S¨ª, hay dos a nivel europeo: Marks & Spencer en el Reino Unido y Migros en Suiza. El 100% de los productos de Marks & Spencer los hace con proveedores integrados y marca propia, y en Migros estar¨¢ entre el 90% y el 95%.
P. El a?o pasado presentaron una l¨ªnea de fruta pelada y envasada, ?c¨®mo ha funcionado?
R. Ha funcionado bien, con m¨¢s dificultades de lo que cre¨ªamos porque el fabricante ha tenido que aprender el funcionamiento de la fruta pelada. Pese a las dificultades, hemos vendido m¨¢s de un mill¨®n de unidades de fruta pelada y creemos que triunfar¨¢.
P. ?Piensan ampliarla?
R. S¨ª, la filosof¨ªa es llevar el producto lo m¨¢s cerca de la boca del consumidor. Nos dimos cuenta de que el consumidor no com¨ªa m¨¢s fruta porque la ten¨ªa que pelar.
P. El a?o pasado dec¨ªan que su venta en Internet era a¨²n baja.
R. Internet es simplemente una buena herramienta, no es la panacea universal. Se puede comprar a trav¨¦s de Internet en Mercadona. Pero Internet s¨®lo soluciona el acceso a la compra, no el llevarla. Este tipo de venta est¨¢ creciendo y hemos vendido siete millones de euros, que suponen un aumento del 60% sobre el a?o anterior. Pero siete millones sobre el volumen total de Mercadona es el 0,1%. Internet triunfar¨¢, pero hoy por hoy ha hecho m¨¢s ruido que nueces. Para que Internet triunfe, los productos tienen que estar muy estandarizados y el sector de la alimentaci¨®n no lo est¨¢.
P. En los a?os noventa contrat¨® fijos a todos sus trabajadores, ?qu¨¦ busca con esta decisi¨®n?
R. Nuestro objetivo es que el cliente (el jefe) est¨¦ satisfecho y los que tenemos que servirle somos los trabajadores. Los que tienen que hacer que el jefe est¨¦ contento tienen que estar contentos y una de las formas es ser fijo.
P. ?Tendr¨¢n, entonces, m¨¢s ofertas de las que pueden asumir?
R. Cada vez vienen m¨¢s trabajadores pidiendo empleo.
P. ?Mantiene su desinter¨¦s en salir a Bolsa?
R. Totalmente.
P. ?No lo necesita o no est¨¢ el horno para bollos?
R. No lo necesitamos.
P. ?Y le llegan ofertas para comprarle el negocio?
R. Ahora ya no, se han cansado de que les digamos que no. Ahora nos ofrecen empresas.
P. ?Le ofrecen muchas?
R. Algunas, tampoco muchas.
P. Alguna vez ha comentado que el sector de la distribuci¨®n tender¨¢ a concentrarse en Espa?a como lo ha hecho en otros pa¨ªses. Y cada vez hay m¨¢s competencia en el segmento de Mercadona y en algunos casos detr¨¢s hay firmas fuertes, ?le preocupa?
R. Creo que desde Ad¨¢n y Eva el mercado est¨¢ saturado. Las empresas m¨¢s grandes no son las que mejor lo hacen, sino que las m¨¢s ¨¢giles y mejor gestionadas, grandes o peque?as. Creo que gestionamos bastante bien Mercadona y que tendremos ¨¦xito en el futuro.
P. ?C¨®mo afronta la sucesi¨®n en una empresa familiar?
R. Cuando llegue el momento, la sustituci¨®n ser¨¢ por promoci¨®n interna de una persona de Mercadona. El patrimonio se hereda; pero el puesto de trabajo, no. A mi sustituto, aunque tambi¨¦n tienen opci¨®n mis cuatro hijas, ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil encontrarlo entre 35.000 trabajadores que entre cuatro hijas. As¨ª que mi familia lo tiene muy claro y yo procurar¨¦ nombrar a mi sucesor.
P. Las organizaciones agrarias han criticado en los ¨²ltimos meses la diferencia que recibe el agricultor por un producto y la que paga el consumidor, ?qu¨¦ opina?
R. El tema no es nuevo. Siempre se ha hablado de lo mal que se paga en el campo y lo caro que se vende al jefe. Pienso que habr¨ªa que analizar toda la cadena de valor para detectar mejoras. Hemos facilitado al ministerio toda la informaci¨®n de que disponemos y ¨¦ste es el que tiene que buscar las causas que puedan ayudarnos a mejorar nuestra competitividad.
P. ?C¨®mo piensa capear la libertad horaria a partir de 2005?
R. Pensamos en hacer lo mejor para el cliente. Como trabajadores, no estamos dispuestos a que el empleo en comercio sea la Cenicienta en Espa?a. Queremos empleos dignos y, si cambian las reglas de juego y todo el mundo abre los domingos, empezando por los ministerios, los ayuntamientos y los bancos, pensar¨ªamos en abrir. Mientras, vamos a luchar con todas nuestras fuerzas para no abrir.
P. De un tiempo a esta parte tiene m¨¢s presencia visual en los foros empresariales, ?significa que piensa ganar protagonismo en las instituciones?
R. Soy una persona bastante vergonzosa, pero creo que tengo que estar donde la empresa necesita. Tampoco queremos tener un excesivo protagonismo, s¨®lo el que nos corresponda.
Un apellido de peso
Detr¨¢s del apellido Roig hay una familia, varias de las empresas con m¨¢s nombre de la Comunidad Valenciana y algunos de sus clubes deportivos m¨¢s potentes. Juan, Fernando y Francisco Roig forman parte de una estirpe con peso en el entramado empresarial valenciano.
El tronco de su genealog¨ªa econ¨®mica arranca con un negocio familiar de compraventa de carne, C¨¢rnicas Roig. En 1977 se constituy¨® la sociedad an¨®nima Mercadona. Ten¨ªa entonces ocho tiendas y fue de la mano de Juan Roig, que asumi¨® la direcci¨®n poco despu¨¦s, cuando la empresa de distribuci¨®n empez¨® a andar a zancadas.
Fernando Roig es due?o de Pamesa Cer¨¢mica, una de las firmas m¨¢s potentes de la industria azulejera castellonsense, provincia que concentra el 80% de las empresas espa?olas del sector. La biograf¨ªa de los Roig est¨¢ muy unida al deporte. Fernando y Juan irrumpieron juntos en el Pamesa Valencia Basket Club (como se llama en la actualidad) justo despu¨¦s de que el equipo se segregara del Valencia Club de F¨²tbol, cuando ¨¦ste baj¨® a Segunda Divisi¨®n. En la actualidad, los dos hermanos poseen la mayor¨ªa accionarial de un club que pelea con solvencia en la m¨¢xima competici¨®n del baloncesco y que presidi¨® Fernado Roig hasta que entr¨® en el Villareal y cedi¨® el cargo a Juan.
La trayectoria del Villareal Club de F¨²tbol tambi¨¦n tuvo un punto de inflexi¨®n con la entrada en 1997, como m¨¢ximo accionista, de Fernando Roig. El equipo lleva tres temporadas seguidas en la m¨¢xima divisi¨®n del f¨²tbol espa?ol.
Y, por ¨²ltimo, la figura de Francisco Roig est¨¢ muy ligada al Valencia Club de F¨²tbol, que presidi¨® entre 1994 y 1997, cuando dimiti¨®, en una etapa pol¨¦mica. Francisco, m¨¢ximo accionista del club, anunci¨® hace poco su intenci¨®n de presentarse a las elecciones que se convocar¨¢n este a?o.
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