"Los iraqu¨ªes no entienden que nuestro Gobierno apoye a Bush"

Han vuelto de Irak "impresionados" por la entereza y "humanidad" de la poblaci¨®n e "indignados" por los efectos de la guerra del Golfo y el posterior embargo. Pero conservan intactas las ganas de luchar contra la guerra.

Bernat Carreras, de 19 a?os, y David Barba y Marc Bret, ambos de 29, formaron parte de la primera caravana de Escudos Humanos por la Paz, un grupo de 12 espa?oles que viajaron a finales de febrero a Bagdad, donde se unieron a los 300 integrantes de la organizaci¨®n internacional Human Shield para mostrar su solidaridad con el pueblo iraqu¨ª y denunciar "la agresi¨®n que sufre y sufrir¨¢ si estalla la guerra".

Una semana despu¨¦s de su regreso, los activistas explican que su estancia en Bagdad se dividi¨® entre acciones de protesta y apoyo a la ciudadan¨ªa, y entrevistas con responsables de instituciones civiles, siempre con la inevitable presencia de alg¨²n miembro del Gobierno iraqu¨ª. "Adem¨¢s de hablar mucho con la poblaci¨®n, que es la que m¨¢s informaci¨®n te aporta", apunta Bernat, que explica que los iraqu¨ªes hacen vida normal aunque la ciudad vive "arruinada por el embargo" y se respira un clima de "calma tensa".

Los tres j¨®venes cuentan que se manifestaron ante embajadas de pa¨ªses que han mostrado su apoyo a Estados Unidos y colgaron de un puente sobre el r¨ªo Tigris una enorme pancarta visible desde el cielo que reza: "Bush, el mundo entero te est¨¢ viendo", entre otras acciones. Pero lo que m¨¢s impacto e indignaci¨®n les caus¨® fueron las visitas al hospital infantil de la capital y a un refugio civil antia¨¦reo que fue alcanzado en 1991.

"Los efectos del uranio empobrecido de las bombas que se utilizaron durante la guerra del Golfo fueron y todav¨ªa hoy son terribles", asegura Marc. Seg¨²n explica, las camas del hospital infantil est¨¢n llenas de ni?os con malformaciones de nacimiento y de enfermos de c¨¢ncer, una afecci¨®n que se ha disparado desde 1991. Pero el embargo que pesa sobre el pa¨ªs impide que reciban el tratamiento que necesitan. En el refugio, contemplaron "horrorizados" las siluetas de cuerpos literalmente fundidos por los efectos de una bomba t¨¦rmica que acab¨® con la vida de 400 personas.

"Los iraqu¨ªes no entienden que nuestro Gobierno apoye a Bush", explica Bernat. "Distinguen perfectamente la actitud del Gobierno de la de los espa?oles y nos consideran hermanos por nuestro pasado dentro del mundo ¨¢rabe", a?ade David, a quien sorprendi¨® la intensa actividad del departamento de Espa?ol de la universidad.

Hace tres semanas, la imprescindible relaci¨®n entre los activistas internacionales y el Gobierno iraqu¨ª era correcta, pero a medida que han pasado los d¨ªas han aumentado la presi¨®n y el control, seg¨²n explica David, hasta el punto de que de 300 escudos humanos s¨®lo 60 permanecen en Bagdad. Entre ¨¦stos hay cinco espa?oles. Otros 14 est¨¢n en Amman (Jordania) a punto de emprender el viaje de regreso.