Controversia en la caja de Vila-real ante la integraci¨®n en Ruralcaja
La fuerte oposici¨®n a la operaci¨®n obliga a suspender la asamblea
La Caja Rural de Vila-real tiene cerca de 10.500 socios de los que, habitualmente, entre 300 y 500 acuden a las asambleas anuales. Sin embargo, la decisi¨®n de integrarse o no en Ruralcaja despert¨® el inter¨¦s de m¨¢s de 3.000 socios que dejaron la noche del viernes m¨¢s que peque?o el lugar habilitado para la celebraci¨®n de la asamblea en la que hab¨ªa de decidirse el futuro de esta caja.
Con m¨¢s de 1.000 personas en la puerta del centro social de la propia entidad, el presidente e impulsor de la integraci¨®n, Jos¨¦ Cantavella, anunci¨®, en la noche del viernes, el aplazamiento de la asamblea "por motivos de seguridad y por respeto hacia todos los miembros con derecho a voto que han tenido que quedarse en la calle por falta de espacio". Los socios hab¨ªan de dar el visto bueno al protocolo de cesi¨®n de actividades a Ruralcaja, que firmaron en noviembre sus m¨¢ximos responsables, Jos¨¦ Cantavella y Luis Juares, con el benepl¨¢cito y ante la presencia del consejero de Econom¨ªa, Vicente Rambla.
El hecho es que, durante las ¨²ltimas dos semanas, los movimientos a favor y en contra de la "cesi¨®n de la actividad" de la Caja Rural de Vila-real a Ruralcaja han sido motivo de enfrentamiento, incluso, entre la vecindad. Los ¨¢nimos se caldearon conforme se acercaba la convocatoria que, finalmente, tendr¨¢ una nueva fecha a partir del lunes. La pol¨¦mica suscitada entre la lucha "por lo nuestro" y el ¨²nico camino para "el futuro" logr¨® que m¨¢s de uno acudiera, por primera vez, a una asamblea de la caja, tal como reconocieron varios de los asistentes. Durante estos d¨ªas, se ha recordado, incluso, a uno de los insignes personajes de la poblaci¨®n, el cardenal Taranc¨®n, y sus palabras sobre la instituci¨®n.
"Indignante"
Una vez suspendido el acto, comenzaron de nuevo las acusaciones. Uno de los m¨¢ximos representantes de la corriente opositora, Jos¨¦ Balaguer, veterano en la caja, calific¨® la situaci¨®n de "indignante" ya que, a su parecer, el acto acab¨® "tal como deseaba la junta", con la suspensi¨®n porque, de lo contrario, opini¨®n que compartieron muchos de los asistentes, la mayor¨ªa del voto se hubiera inclinado al no. Seg¨²n Balaguer, la directiva sab¨ªa de la afluencia que se esperaba y critic¨® la "escasa claridad" de las papeletas. Balaguer adujo que, con el acuerdo, se pretende "regalar un negocio de 32.000 millones de pesetas".
Por su parte, Jos¨¦ Cantavella describi¨® el enfrentamiento como el de "los inmovilistas, por una parte, y quienes tienen una visi¨®n m¨¢s amplia, por otra". As¨ª, lament¨® la tensi¨®n existente y sostuvo que "siempre habr¨¢ gente que no estar¨¢ de acuerdo, pero la visceralidad hay que dejarla a un lado". El presidente de Caja Rural asegur¨® adem¨¢s haber sido v¨ªctima de amenazas.
La Caja Rural de Vila-real cuenta con una cifra de negocio de 328 millones de euros y obtuvo, durante el pasado a?o, un beneficio bruto de m¨¢s de cuatro millones de euros. Adem¨¢s, la caja posee un importante patrimonio cuyo titular es una fundaci¨®n. Ma?ana se decidir¨¢ la fecha de la nueva asamblea.
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