La coalici¨®n de los voluntarios

El lunes 10 de marzo los tres candidatos a suceder a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y el secretario general del Partido Popular, Javier Arenas, exhortaron a los dirigentes provinciales y regionales a centrar el debate de las pr¨®ximas elecciones del 25 de mayo en los llamados "problemas reales" de la gente: el empleo, la vivienda, los impuestos, la seguridad ciudadana y el terrorismo. El vicepresidente segundo y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato explic¨® que los electores optar¨¢n por el partido que mejor les resuelva sus problemas. Rato tiene la idea fija de que la rebaja de impuestos servir¨¢ para ganar. Al fin y al cabo, parece creer, es de eso de lo que se vive.

Otro de los candidatos, el vicepresidente primero, Mariano Rajoy, apunt¨®: "La gesti¨®n, todo lo realizado, los nuevos proyectos, esas son las cosas que afectan a la gente. La guerra de Irak o la cat¨¢strofe del Prestige son dos asuntos llamativos, pero su influencia en la vida real de la gente no es tanta".

El secretario de Estado de Asuntos Exteriores no hizo en Tele 5 m¨¢s que explicar la realidad

Ni Rato ni Rajoy sab¨ªan a comienzos de semana que el curso de las negociaciones diplom¨¢ticas para que Estados Unidos, Espa?a y Reino Unido obtuvieran una mayor¨ªa de nueve votos en el Consejo de Seguridad para bendecir la guerra estaba condenado al fracaso. Esos nueve votos, si Francia, por ejemplo, ejerce el veto al que tiene derecho, no ser¨ªan m¨¢s que un papel mojado.

Pero George Bush, Tony Blair y Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar estaban entonces con la idea de jugar la partida de p¨®quer hasta el final, es decir, someter la propuesta-ultim¨¢tum a Irak del 17 de marzo a votaci¨®n -t¨¦cnicamente est¨¢ en lo que se llama papel azul, es decir, pendiente- en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Primero, para poner a prueba si Francia, en efecto, veta la resoluci¨®n o si est¨¢ haciendo puro bluff. Segundo, si se consiguiese la mayor¨ªa de nueve votos ser¨ªa presentada por Blair y Aznar como una suerte de victoria moral ante sus respectivos pa¨ªses. Pero a mediados de semana las cuentas no sal¨ªan. Tampoco el globo sonda de Blair de que Sadam Husein comparezca en televisi¨®n y radio para decir que ha ocultado armas de destrucci¨®n masiva consegu¨ªa enredar a aquellos pa¨ªses que anunciaron su rechazo al ultim¨¢tum del 17 de marzo.

Los vicepresidentes Rajoy y Rato no sab¨ªan que esta crisis deparar¨ªa todav¨ªa una sorpresa mayor que el show de Aznar en el rancho de Crawford (Tejas), el pasado mes de febrero. El bloqueo de la propuesta patrocinada por Estados Unidos, Reino Unido y Espa?a en el Consejo de Seguridad llev¨® a Bush, el jueves 13, a sugerirle a Blair una reuni¨®n para analizar qu¨¦ hacer. ?Convocar el Consejo para votar el ultim¨¢tum o retirar la iniciativa? El viernes 14 Bush propuso a Blair y a Aznar celebrar la reuni¨®n y analizar los pasos pr¨®ximos hoy domingo, d¨ªa 16, en las Azores.

Ram¨®n Gil-Casares, secretario de Asuntos Exteriores, es un hombre informado. Lleg¨® al palacio de Santa Cruz procedente de la Moncloa a ra¨ªz del nombramiento de Ana Palacio. Durante largos a?os, ha sido un asesor ¨¢ulico de Aznar en temas internacionales. Mientras se gestaba la reuni¨®n en Azores, Gil Casares acudi¨®, el viernes 13, al programa La Mirada Cr¨ªtica, en Tele 5. La periodista Montserrat Dom¨ªnguez le pregunt¨® por la eventual coalici¨®n internacional para intervenir en Irak.

Espa?a estar¨ªa en ella -dijo Gil Casares-. Las modalidades de la intervenci¨®n las decidir¨ªa el presidente del Gobierno. Esta es una operaci¨®n de las que se llama "fuera de zona". Ser¨ªa una coalici¨®n que representar¨ªa a la comunidad internacional con una mayor¨ªa en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas pero que no se puede votar porque hay un veto de uno de los pa¨ªses al que no se quiere tener en contra, ejemplific¨®.

Gil-Casares no hac¨ªa m¨¢s que explicar la realidad. El prop¨®sito de los nueve votos ser¨ªa servir como cobertura de la citada coalici¨®n. La llamada por Bush, desde hace varios meses, coalici¨®n de los voluntarios. Sin embargo, esos nueve votos no est¨¢n. De ah¨ª, pues, que Bush convocara a sus aliados en el d¨ªa de hoy. El secretario de Estado tambi¨¦n explic¨® que la campa?a militar en Irak no se extender¨ªa m¨¢s all¨¢ de mes y medio, asegur¨® que las tropas norteamericanas ser¨ªan bien acogidas por los iraqu¨ªes, y vaticin¨® que todos aquellos que sufren hoy cr¨ªticas por su actitud -en referencia a Espa?a y Reino Unido- recobrar¨ªan todo el cr¨¦dito pol¨ªtico.

Las declaraciones de Gil-Casares, seg¨²n fuentes informadas, no cayeron bien en la Moncloa. Rajoy interpret¨® que el secretario hab¨ªa ca¨ªdo como un pardillo en los brazos de Montse Dom¨ªnguez.

Fue por ello que en la rueda de prensa que sigue a la reuni¨®n del Consejo de Ministros, el vicepresidente primero, al ser preguntado por la coalici¨®n internacional, explic¨®: "No est¨¢ decidido qu¨¦ participaci¨®n tendr¨ªa Espa?a en las m¨²ltiples hip¨®tesis que se pueden dar. Cr¨¦anme, no est¨¢ decidido nada, porque Espa?a apuesta para que no sea necesaria una intervenci¨®n".

Si a primeros de semana Rajoy sosten¨ªa que la influencia de la guerra no era "tanta" en la vida real de la gente, a finales de la misma intentaba evitar que la cumbre de las Azores volviera a tener efectos devastadores para la credibilidad del Gobierno. Dijo tambi¨¦n que ignoraba si la resoluci¨®n pendiente contaba o no con nueve votos.

"Lo que hay planteado formalmente es una segunda resoluci¨®n que marca el lunes, 17 de marzo, como fecha tope para que Irak demuestre su voluntad real de desarmarse. A partir de ah¨ª, la propuesta pretende hacer una presi¨®n efectiva sobre Husein. Estamos dispuestos a trabajar por el consenso. No es que haya siete votos ni nueve ni ocho. No s¨¦ cuantos votos hay en este momento preciso", explic¨® tras la reuni¨®n del Consejo de Ministros el pasado viernes.

A la luz de las manifestaciones de ayer s¨¢bado en Madrid y las principales ciudades espa?olas -tras las del pasado 15 de febrero- es posible que aquella idea de Rato y de Rajoy seg¨²n la cual la gente s¨®lo se interesa por los "problemas reales" -pagar menos impuestos, por ejemplo- se encuentre completamente desfasada. El economista Alberto Hirschman explic¨® hace a?os ya que hay unos ciclos pol¨ªticos en los que la gente, despu¨¦s de permanecer encerrada entre sus cuatro paredes, decide que hay nuevas razones para irrumpir en la pol¨ªtica activa. Ese momento puede haber llegado aqu¨ª y ahora.