Seis a?os de historia del AVE a Lleida

Tres viajes promocionales celebrados con dos meses de retraso, sin los trenes previstos y a una velocidad muy inferior a los 350 kil¨®metros por hora prometidos. Medidas ultramodernas de seguridad que a¨²n no est¨¢n a punto. Cortes, provocados o accidentales, en la catenaria. Un socav¨®n a la altura de Zaragoza que deja un tramo de v¨ªa suspendido en el aire. Movimientos de tierra entre Lleida y Tarragona...

La l¨ªnea de Alta Velocidad entre Madrid y Barcelona, cuyo primer tramo entre la capital y Lleida deb¨ªa estar funcionando desde diciembre de 2002, ha desencadenado la dimisi¨®n del presidente del GIF, el organismo p¨²blico encargado de la l¨ªnea, y ha dejado al ministro de Fomento, Francisco ?lvarez-Cascos, sin fechas que prometer: "Es preferible la seguridad a las prisas", dice ahora.

LA CREACI?N DEL GIF El ente discutido

Mayo de 1997. El Gobierno aprueba la creaci¨®n del ente p¨²blico Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF), para construir la l¨ªnea de alta velocidad AVE entre Madrid y la frontera francesa. A trav¨¦s de este mecanismo, el coste del proyecto no computar¨¢ como d¨¦ficit en los Presupuestos del Estado, lo que permite cumplir con los objetivos del Tratado de Maastricht. A Renfe se le reserva la prestaci¨®n del servicio de ferrocarril.

A partir de ese momento, las intervenciones del Gobierno en el Parlamento en torno al AVE se limitan a informar sobre el presupuesto de la obra y sobre su ritmo de ejecuci¨®n.

La mayor parte de las preguntas orales de entonces proceden de los bancos del PP y de CiU, lo que permite lucirse a Rafael Arias-Salgado, ministro de Fomento hasta 2000. En el Diario de Sesiones del 11 de noviembre de 1998 puede leerse: "En estos momentos est¨¢ en ejecuci¨®n, en sus distintas fases, la totalidad del tren de alta velocidad Madrid-Zaragoza-Barcelona-frontera francesa. Eso es lo que permite a este Gobierno garantizar que en el a?o 2002 el tren llegar¨¢ hasta Zaragoza y Lleida". Un a?o m¨¢s tarde, el ministro alardea de que "se est¨¢ batiendo un r¨¦cord en la Uni¨®n Europea y en el mundo en cuanto a plazos de construcci¨®n de un tren de este calibre".

El ministro ve el futuro con optimismo: "No hay en estos momentos en el horizonte ninguna circunstancia que pudiera hacer prever un retraso en la puesta en servicio de un ferrocarril de alta velocidad que puede ir, en los tramos que se est¨¢n configurando, a una velocidad de 350 kil¨®metros por hora (19 de marzo de 1999)".

Sin embargo, a finales de 2002 se ha superado otra marca: la de accidentes laborales en la obra del AVE, con 11 muertos en 1.425 siniestros.

CONTRATO DE OBRAS Adjudicaciones dudosas

Las actuaciones del GIF pronto se vieron envueltas en la pol¨¦mica. En noviembre de 1999, Arias Salgado comparece ante la comisi¨®n de Infraestructuras del Congreso para aclarar la relaci¨®n de los directores del ¨¢rea de Obras y de Construcci¨®n del ente con tres empresas adjudicatarias de un contrato de un tramo del AVE Madrid-Zaragoza.

La oposici¨®n, que desde un principio no ve con buenos ojos el nuevo organismo por considerarlo "opaco al control parlamentario", critica los procedimientos de adjudicaci¨®n de obras y la estructura de contrataci¨®n, que deja la direcci¨®n de los trabajos en manos privadas, lo que supone "un elemento de riesgo importante", seg¨²n el ex diputado asturiano de IU Mariano Santiso.

Arias-Salgado sale en defensa del ente reci¨¦n creado: "Toda la contrataci¨®n que se realiza en el GIF es transparente y se realiza mediante el sistema de concurso p¨²blico". Y a?ade: "Con este sistema de contrataci¨®n el ente est¨¢ ahorrando dinero".

LA COMPRA DE TRENES Un contrato pol¨¦mico

Una vez que remite la marejada de los contratos de obra, el Gobierno goza de una temporada de tranquilidad parlamentaria. Arias-Salgado abandona el ministerio sin arrojar la menor sombra de duda sobre la buena marcha del AVE de Barcelona. Es m¨¢s, se va con una declaraci¨®n solemne: "Estoy en condiciones de afirmar que en el a?o 2002 el tren llegar¨¢ a Zaragoza".

No es ¨¦l quien debe asumir el retraso del tren de alta velocidad. Tras las elecciones generales de 2000, su puesto al frente de Fomento lo ocupa Francisco ?lvarez-Cascos, quien el 25 de marzo de 2001 tiene que enfrentarse a la pol¨¦mica por la adjudicaci¨®n, repartida al 50% entre la empresa espa?ola Talgo y la multinacional alemana Siemens, de los 32 trenes que circular¨¢n por la l¨ªnea de alta velocidad (AVE) Madrid-Barcelona-frontera francesa, dejando fuera del gran contrato a la multinacional franco-brit¨¢nica Alstom, cuyos trenes circulan por la l¨ªnea Madrid-Sevilla desde 1992.

La oposici¨®n acusa al Ministerio de Fomento y a Renfe de haber tomado una decisi¨®n pol¨ªtica con la adjudicaci¨®n, dejando al margen los criterios t¨¦cnicos. Al igual que hizo su jefe un a?o y medio antes con las adjudicaciones de obras del GIF, el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, recupera el discurso de la transparencia de las adjudicaciones de Renfe y defiende lo que para ¨¦l es "una adjudicaci¨®n transparente y objetiva".

Sin embargo, el Gobierno declina valorar el hecho de que Siemens firmara posteriormente un acuerdo con Alstom para la cesi¨®n de la fabricaci¨®n de la parte mec¨¢nica de los 16 trenes de alta velocidad que Renfe adjudica a la firma alemana. "Siempre que se cumplan los pliegos de prescripciones que sirvieron de base para la adjudicaci¨®n del concurso y la legislaci¨®n vigente en materia de contratos, el Ministerio de Fomento no tiene nada que decir", reza la respuesta a una pregunta formulada por el grupo socialista en el Congreso.

EL PASO DEL AVE Reivindicaciones territoriales

La hora de la inauguraci¨®n se acerca inexorable y las instituciones de las comunidades por las que va a pasar el AVE comienzan a impacientarse. Sin embargo, la mayor¨ªa de las preguntas parlamentarias a Cascos llegan de las filas populares, que ponen en bandeja al ministro la posibilidad de explicar el pacto con el Ayuntamiento de Barcelona para la entrada del tren a la capital catalana. Tambi¨¦n le dan la oportunidad de clavar una pulla al alcalde de Lleida, el socialista Antoni Siurana, quien en diciembre de 2000 hab¨ªa decretado la paralizaci¨®n de las obras del AVE en protesta porque Fomento se negaba a negociar el trazado del tren de acuerdo a las normas urban¨ªsticas municipales. "El decreto de paralizaci¨®n de las obras supone una grave contradicci¨®n con la actuaci¨®n del Estado de derecho", afirma ?lvarez-Cascos.

EL FUTURO Preguntas sin contestar

El primer viaje promocional del AVE a Lleida se realiza el pasado 24 de febrero. En los d¨ªas siguientes, se precipitan todos los acontecimientos, que acaban con la dimisi¨®n del presidente del GIF, Jos¨¦ Luis Barr¨®n, y con su sustituci¨®n por Ram¨®n Escribano. Ahora, en el registro del Congreso de los Diputados, esperan al Gobierno al menos siete preguntas sobre las razones que provocaron que el AVE de Madrid a la frontera francesa no llegara a nacer.