Informar a ciegas
Dos periodistas mueren en el dif¨ªcil frente de batalla y las tropas brit¨¢nicas evac¨²an a otros 60 en el sur de Irak
Seiscientos periodistas viven desde antes de que comenzase la guerra como aut¨¦nticos soldados asignados a diferentes unidades en la invasi¨®n norteamericana de Irak. El Pent¨¢gono ha oficializado este matrimonio de conveniencia bajo el t¨¦rmino de reporteros embedded, que literalmente en ingl¨¦s significa empotrado, incrustado. Uni¨®n semejante, que durar¨¢ lo que dure la guerra o lo que el cuerpo de los reporteros aguante, no ten¨ªa lugar desde la guerra de Vietnam. Pero el chiste resultaba f¨¢cil. Estaba hecho. Los periodistas destinados en Kuwait hablan de reporteros encamados con el Ej¨¦rcito de George W. Bush (bed es cama en ingl¨¦s). En el peque?o emirato kuwait¨ª existen dos clases de periodistas. Los embedados y los otros (m¨¢s de 4.000). Pero para ninguno ha sido f¨¢cil irse a la cama con los soldados estadounidenses.
Los periodistas en Kuwait hablan de reporteros 'encamados' con el Ej¨¦rcito de Bush
Todos, absolutamente todos, tuvieron que firmar 50 reglas para obtener su acreditaci¨®n de prensa. Nada de portar armas de fuego personales. Nada de alcohol ni de revistas pornogr¨¢ficas si se viaja con las tropas. El ardor guerrero es eso, guerrero. No se vayan a confundir y equivocar el objetivo, que sigue siendo Sadam. A la m¨ªnima desobediencia se acab¨® la pareja de hecho.
Se necesita un casco, un chaleco antibalas y una m¨¢scara antig¨¢s. La cantimplora se aconseja. Se recomienda llevar toallitas de higiene personal. Letrina llegar¨¢ a ser una palabra muy odiada. Detestada cuando sea letrina en una trinchera. Pueden pasar entre cinco y diez d¨ªas sin sentir una ducha en el cuerpo. Ropa adecuada y saco de dormir. Dos bultos de no m¨¢s de 30 kilos entre ambos. Requisados los pasaportes y anotados los n¨²meros de los tel¨¦fonos sat¨¦lites. No se puede tomar fotos de soldados estadounidenses "identificables". Por supuesto, se pueden imponer embargos a la informaci¨®n "para proteger la seguridad de las operaciones".
Como no pod¨ªa ser de otra manera, algunos informadores se sintieron insultados ante la propuesta y decidieron quedarse en Kuwait City. El ataque de orgullo les supondr¨¢ que no podr¨¢n pisar territorio iraqu¨ª hasta que el alto mando lo decida. Si lo decide. Los que rehusaron la oferta del Pent¨¢gono alegando libertad informativa creyeron que podr¨ªan moverse a sus anchas en el pa¨ªs que alberga m¨¢s de 150.000 soldados de EE UU. Muy equivocados estaban. Hay un l¨ªmite para la libertad informativa en Kuwait y est¨¢ a 80 kil¨®metros de la frontera. El Ej¨¦rcito norteamericano no informa. El Ej¨¦rcito brit¨¢nico no informa. Ambos s¨®lo confirman o desmienten. Y casi siempre desmienten. Escrito lo escrito, en la pareja entre el militar y el periodista que le acompa?a existe un tercero. Del que el militar ni sospecha su existencia. Los que tuvieron el ataque de orgullo tratan todo lo que pueden de comunicarse con los encamados. Y as¨ª poder informar de lo que pasa en el frente.
Un frente que ya se ha cobrado sus primeras bajas entre los informadores. La cadena brit¨¢nica ITV daba ayer por muerto a su corresponsal Terry Lloyd, desaparecido el s¨¢bado en un posible incidente de fuego amigo cerca de Basora cuando cubr¨ªa la guerra contra Irak adscrito a una unidad de combate brit¨¢nica. El c¨¢mara Fred Nerac y el traductor iraqu¨ª Husein Othman, que viajaban con Lloyd, segu¨ªan anoche desaparecidos, despu¨¦s de que el veh¨ªculo en el que los tres enviados viajaban fuese tiroteado en una carretera cerca de Basora. La muerte de Terry Lloyd se suma a la de Paul Moran, c¨¢mara australiano que el mismo s¨¢bado result¨® v¨ªctima de la explosi¨®n de un coche bomba en el norte de Irak.
Hay "suficientes evidencias para creer que el corresponsal de ITV Terry Lloyd muri¨® ayer en un incidente en el frente sur", se?al¨®, en un comunicado, Independent Television News (ITN), la cadena de noticias de ITV. "Creemos que su cuerpo est¨¢ en un hospital de Basora que se encuentra todav¨ªa bajo control iraqu¨ª. Dos miembros de su equipo, Fred Nerac y Husein Osman, est¨¢n todav¨ªa desaparecidos y ITN no tiene informaci¨®n sobre su paradero o condici¨®n".
Otro c¨¢mara que viajaba con el equipo de ITN, Daniel Demoustier, logr¨® escapar, aunque herido. El c¨¢mara de ITN, que fue rescatado por un equipo de periodistas del diario The Mail on Sunday, aseguraba ayer que hab¨ªan sido recibidos con j¨²bilo por los civiles iraqu¨ªes. De repente, seg¨²n Demoustier, se encontraron en Iman Anas, cerca del frente. Un grupo de iraqu¨ªes decidi¨® seguir al equipo de televisi¨®n. "Inmediatamente los tanques aliados comenzaron a disparar artiller¨ªa contra nosotros", relata el c¨¢mara en el Mail. "El coche se prendi¨®. Est¨¢bamos envueltos en llamas. Fue aterrador", inform¨® Demoustier.
Ante la situaci¨®n, la polic¨ªa brit¨¢nica decidi¨® ayer evacuar a m¨¢s de 60 periodistas de la ciudad de Safwan que cubr¨ªan la guerra con el Ej¨¦rcito brit¨¢nico ante un eventual ataque iraqu¨ª. Los brit¨¢nicos aseguraron haber recibido una alerta en la que se les informaba que se iba a producir un ataque "inminente" contra los reporteros.
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