Fuerzas kurdas y de EE UU desbordan las defensas iraqu¨ªes
Los bombardeos masivos acaban con m¨¢s de 24 horas de resistencia en el frente norte
La toma del puente sobre el r¨ªo Gaser y la poblaci¨®n del mismo nombre cerr¨® ayer la primera batalla abierta en el frente norte de la guerra en Irak. Las fuerzas leales a Sadam Husein resistieron m¨¢s de 24 horas en esta estrat¨¦gica posici¨®n -situada en la autov¨ªa que une Erbil, la capital kurda, con Mosul, principal ciudad del norte de Irak-, los bombardeos masivos de la aviaci¨®n de EE UU y el ataque por tierra de los peshmergas (milicianos) kurdos.
Apoyados por fuerzas especiales estadounidenses, los peshmergas controlaban la localidad de Gaser, abandonada por todos sus habitantes, poco despu¨¦s del mediod¨ªa de ayer, y fijaban la l¨ªnea del frente a unos 25 kil¨®metros de Mosul. A pesar de las amenazas de voladura lanzadas por las fuerzas iraqu¨ªes, el puente segu¨ªa intacto.
Tres civiles que atravesaban la autov¨ªa con una camioneta pagaron el precio m¨¢s alto por la conquista del puente. Sus cad¨¢veres abrasados permanec¨ªan all¨ª, junto al veh¨ªculo humeante, a primera hora de la tarde de ayer. Presumiblemente, murieron a consecuencia del impacto de un proyectil de artiller¨ªa iraqu¨ª. Al otro lado de la calzada, los restos de una mano unida a un antebrazo parec¨ªan marcar la magnitud de la explosi¨®n en medio de un paisaje de destrucci¨®n y de los indicios de pillaje.
Los peshmergas del Partido Democr¨¢tico del Kurdist¨¢n (PDK) cerraban por la ma?ana el paso a los periodistas hasta el campo de batalla. "Tenemos ¨®rdenes", se disculpaban, "la zona es ahora muy peligrosa". Los bombardeos registrados a lo largo de la noche anterior sobre las posiciones iraqu¨ªes se reprodujeron con intensidad por la ma?ana. Varios cazas golpeaban con bombas y misiles a las posiciones de la artiller¨ªa iraqu¨ª marcadas por las fuerzas especiales estadounidenses sobre el terreno, mientras que los bombarderos B-52 machacaban b¨²nkeres y trincheras desde gran altura. Mientras tanto, decenas de veh¨ªculos abarrotados de milicianos se dirig¨ªan a reforzar el frente de Gaser por las carreteras de Erbil y Dohuk.
La batalla librada en las colinas de Manguwan, la aldea donde los iraqu¨ªes detuvieron el mi¨¦rcoles su repliegue ordenado hacia Mosul, parec¨ªa haberse estancado a ¨²ltima hora del jueves despu¨¦s de un avance de apenas dos kil¨®metros. Las fuerzas del r¨¦gimen de Bagdad siguieron controlando el estrat¨¦gico puente hasta poco despu¨¦s del mediod¨ªa de ayer, cuando los milicianos kurdos, que exhib¨ªan como trofeos dos veh¨ªculos militares capturados, permitieron el paso de la prensa hasta el frente.
Pero, como ya hab¨ªa ocurrido la v¨ªspera, los ¨²ltimos focos de resistencia iraqu¨ªes, que replicaron con disparos de artiller¨ªa ligera en direcci¨®n a las l¨ªneas kurdas, provocaron una desbandada casi general de peshmergas, comandos estadounidenses y reporteros de guerra. S¨®lo la visita a la zona de operaciones del comandante de los milicianos del PDK, Wazi Barzani, confirmaba una hora m¨¢s tarde que el frente se hab¨ªa estabilizado.
Pueblos abandonados
El avance de las milicias kurdas est¨¢ dejando a su paso un rastro de pueblos abandonados por los habitantes de origen ¨¢rabe que reemplazaron a los originarios pobladores kurdos expulsados por el r¨¦gimen de Bagdad. La localidad de Qarilan, a unos 30 kil¨®metros al este Mosul, es una de las raras excepciones. Sus 2.000 vecinos -kurdos que siguieron viviendo en territorio iraqu¨ª, aunque con nombres ¨¢rabes en sus documentos de identidad- han permanecido en sus casas.
Los soldados iraqu¨ªes abandonaron las posiciones de Qarilan el mi¨¦rcoles, tras una ola de bombardeos de EE UU. Cuando los peshmergas llegaban para ocuparlas, les recibieron con disparos de mortero sobre la poblaci¨®n que, seg¨²n los vecinos, no causaron da?os."?ramos todos prisioneros", aseguraba ayer Yalal Abdelaziz, de 29 a?os. "Ten¨ªamos prohibido visitar a nuestras familias en Kalak o en Erbil". Es extra?o ver c¨®mo los habitantes de Qarilan siguen apegados a una tierra que ahora parece improductiva para siempre. "No tenemos empleo", explicaba Abdelaziz rodeado de hombres a la salida del rezo en la mezquita. "?Qui¨¦n se atreve a trabajar en unos campos que est¨¢n sembrados de minas?". Han vivido durante m¨¢s de 12 a?os separados del territorio aut¨®nomo surgido al final de la guerra del Golfo en el Kurdist¨¢n iraqu¨ª gracias a la protecci¨®n de la aviaci¨®n de combate anglonorteamericana. "Nadie pod¨ªa escaparse de aqu¨ª, sab¨ªamos que nuestros familiares iban a sufrir las represalias".
Mientras tanto, varios pozos de petr¨®leo de la provincia de Kirkuk estaban ardiendo anoche, seg¨²n informaba la cadena brit¨¢nica BBC, sin precisar si los incendios fueron causados intencionadamente por las fuerzas iraqu¨ªes en retirada o se debieron a los bombardeos de EE UU. La amenaza de prender fuego a los campos petrol¨ªferos del norte de Irak, como ya hicieran las fuerzas iraqu¨ªes en Kuwait en 1991 tras su retirada al final de la guerra, pesa tambi¨¦n sobre los yacimientos de Mosul.
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