El duelo del desequilibrio

Pocas veces el cl¨¢sico entre el Madrid y el Barcelona ser¨¢ un duelo entre antagonismos tan marcados. Pocas veces un madridismo tan exaltado se las ver¨¢ en el Bernab¨¦u con un Barcelona tan depresivo. La imagen de Riquelme rasc¨¢ndose el brazo nervioso mientras confesaba el jueves, traicionado por su subconsciente, que el Bar?a no es su sitio, contrast¨® con la mirada astuta de Ronaldo al declarar la superioridad hist¨®rica del Madrid y su intenci¨®n de derrotar a su ex equipo en una noche que deje huella en el p¨²blico.

El cartel gigante de Columbia Pictures que tapa el lateral oeste del Bernab¨¦u anunciando pel¨ªculas de Hollywood como si el estadio sirviese ya para explotar todos los beneficios posibles, sea como soporte publicitario o como empresa de contenidos, habla por s¨ª solo de dos instituciones en caminos divergentes. Que Ra¨²l sufra un esguince de tobillo y que pueda perderse el partido, que el equipo caiga avasallado en Anoeta, o que incluso en muchos casos juegue muy por debajo de las expectativas, no importa. Es parte del gui¨®n de un relato de ficci¨®n con final feliz. El sentimiento tr¨¢gico es hoy exclusivo del Bar?a, que de tan vulnerable a todo parece un club menos artificial, m¨¢s humano.

Ronaldo: "Mi equipo es m¨¢s grande que el Barcelona. Tiene m¨¢s conquistas, m¨¢s t¨ªtulos".

En torno al monolito administrativo de Florentino P¨¦rez, Chamart¨ªn atraviesa una ¨¦poca de solidez institucional y opulencia mercantilista que contrasta con la apariencia fugaz de la directiva de Enric Reyna. En el Madrid, la creciente aglomeraci¨®n de activos se traduce en Zidanes y Ronaldos que transitan por el campo como sombras fant¨¢sticas s¨®lo capaces de probar su realidad a golpe de goleada y exhibiciones que anuncian la d¨¦cima Copa de Europa, la Liga y lo que venga. En el Camp Nou se vive al d¨ªa, en el puesto 12 de la clasificaci¨®n, con 20 goles menos a favor y nueve m¨¢s en contra, y a 24 puntos del liderato que, c¨®mo no, tambi¨¦n corresponde al Real Madrid.

M¨¢s que nunca, el fatalismo juega en contra del Barcelona. Quiz¨¢ por esa tendencia victimista, el choque de hoy tiene valor doble para los azulgrana. Una victoria supondr¨¢ el mejor aliciente para sobrellevar lo que queda de temporada, y, sobre todo, dejar¨¢ al Madrid averiado en la lucha por el campeonato. Como dijo Vicente del Bosque, el t¨¦cnico madridista: "Nuestra preocupaci¨®n es ganarle al Bar?a, al Sevilla, al Rayo... ganar la Liga y La Champions. El Bar?a, y lo digo con la boca peque?a, ha vivido m¨¢s pendiente de ganarle al Madrid que el Madrid de ganarle al Bar?a. El madridismo, en ese sentido, ha tenido una mayor amplitud de miras".

Hombre por hombre, el principal problema del Bar?a pasa por la baja de Saviola, sancionado en el partido de ida. En su lugar, Antic contar¨¢ con Luis Enrique, un jugador que a fuer de tr¨¢nsfuga del madridismo, se gan¨® la mejor consideraci¨®n de la hinchada azulgrana. Al banquillo ir¨¢ Riquelme -otra vez- salvo que Antic enmiende sus ¨²ltimos ensayos. El fichaje estrella del Bar?a esta temporada se confes¨® desarraigado fuera del Boca Juniors. El media punta incurri¨® en un lapsus muy significativo, el jueves: "En mi club, en Argentina, todos sab¨ªan en la posici¨®n en la que pod¨ªa jugar y d¨®nde estaba m¨¢s c¨®modo. Pensaba que en Barcelona ser¨ªa lo mismo, pero no ha sido as¨ª. Jugando en este lugar [la banda], se me hace muy dif¨ªcil que pueda adaptarme".

La dosis morbosa del partido la pondr¨¢ Ronaldo. El goleador est¨¢ obsesionado con ganarse el cari?o del Bernab¨¦u y no halla mejor forma de hacerlo que en este partido, cuando por primera vez se enfrente a su ex equipo. Como quien intenta ganarse un aplauso de antemano, el brasile?o habl¨® del Barcelona con desd¨¦n: "Es muy dif¨ªcil que el Barcelona baje a Segunda, pero puede pasar. En el f¨²tbol europeo hay ejemplos de equipos hist¨®ricos que han bajado. Pero eso a m¨ª me da igual".

"El Real Madrid es m¨¢s grande que el Barcelona", prosigui¨® Ronaldo; "hist¨®ricamente tiene m¨¢s conquistas, m¨¢s t¨ªtulos en su palmar¨¦s y por eso la presi¨®n aqu¨ª es m¨¢s grande. A lo largo de mi carrera como jugador he jugado derbys muy importantes, pero ¨¦ste es especial. Este cl¨¢sico lo jugu¨¦ en la otra parte y tengo muchas ganas de hacerlo con el Madrid, de jugar bien y de ganar".

La pareja de Ronaldo en el ataque del Madrid podr¨ªa no ser Ra¨²l, si el delantero no evoluciona bien de un esguince en el tobillo izquierdo. Ra¨²l sufri¨® una entrada de Makelele en el entrenamiento del jueves. Se mordi¨® los labios en un gesto de dolor y se retir¨® al vestuario cojeando.