Los Schumacher, pendientes de su madre, en coma

Tras rebasar la l¨ªnea de meta con el mejor tiempo de todos, Michael Schumacher, todav¨ªa dentro del coche, levant¨® un pu?o y mostr¨® un incontenible gesto de j¨²bilo. Siendo el alem¨¢n un se?or que lo ha ganado todo, podr¨ªa resultar extra?o verle adoptar esa pose cuando lo ¨²nico que hab¨ªa conseguido era la 53? pole position de su carrera. Pod¨ªa pensarse que el gesto se deb¨ªa a que el curso no est¨¢ transcurriendo como acostumbra alguien que ha sido cinco veces campe¨®n del mundo y que ha ganado 64 grandes premios. Pero no iban por ah¨ª los tiros. Mientras los Schumacher corr¨ªan en Imola, su madre, Elizabeth, permanec¨ªa ingresada en un hospital de Colonia en estado de coma.

Pese a ello, Michael, como Ralf, que fue el segundo, cumpli¨® con todas las obligaciones que la f¨®rmula 1 exige. As¨ª, acudi¨® a la correspondiente rueda de prensa, m¨¢s breve de lo habitual. En un momento dado, un periodista le pregunt¨® por su madre. "Sobre eso no voy a decir ni una palabra", le respondi¨®. Poco despu¨¦s abandon¨® el recinto y Ralf y ¨¦l se trasladaron en helic¨®ptero al aeropuerto de Bolonia, donde les esperaba un avi¨®n privado con destino a Colonia.

Los Schumacher tienen previsto volver a primera hora de hoy a Imola. Y tienen previsto correr. Y salir delante. El primero, Michael; el segundo, Ralf. No es aqu¨¦lla una posici¨®n desconocida, ni mucho menos, para el mayor de los Schumacher, pero s¨ª es uno de los pocos r¨¦cords que se le resisten. Con la de ayer son ya 53 las veces en las que se ha colocado el primero en una parrilla de salida. Sin embargo, esa cifra queda lejos de la del brasile?o Ayrton Senna: 65. Precisamente fue en Imola donde ¨¦ste se dej¨® la vida en 1994.

Hoy, los hermanos Schumacher, Michael y Ralf, luchar¨¢n por lograr un triunfo con una especial dedicatoria. Si lo consiguen, tras el podio, los trofeos, los parabienes y dem¨¢s adornos de la gloria, volver¨¢n cuanto antes a abordar un helic¨®ptero y luego un avi¨®n para regresar a Colonia y sentarse junto a la cama de su madre.