US Airways sale del atolladero

Dentro del negro panorama que viven las compa?¨ªas a¨¦reas, sobre todo las norteamericanas, US Airways se ha dado estos d¨ªas un respiro. La compa?¨ªa ha salido de la suspensi¨®n de pagos en la que cay¨® el pasado 11 de agosto, ha inaugurado una nueva terminal en su hub de Filadelfia y se prepara para entrar en Star Alliance, el grupo liderado por United Airlines y Lufthansa.

Con el plan de refinanciaci¨®n pactado, la aerol¨ªnea se ha asegurado una inyecci¨®n de liquidez de 1.240 millones de d¨®lares

Entrar en Star Alliance supone para US Airways abrirse la puerta del centro y el este de Europa

David Siegel, de 40 a?os, no lleg¨® precisamente a la presidencia ejecutiva de US Airways en un momento dulce para la compa?¨ªa. Nombrado para el cargo el 6 de marzo del a?o pasado, meses despu¨¦s la aerol¨ªnea entraba en el famoso cap¨ªtulo 11 de la ley de bancarrota de Estados Unidos (una suspensi¨®n de pagos). Estaba aquejada de sobrecapacidad, altos costes y ten¨ªa una deuda de casi 8.000 millones de d¨®lares. Siegel tendr¨ªa que utilizar sus mejores artes y todo el conocimiento adquirido en el sector -fue consejero delegado de la filial regional de Continental y directivo de Northwest- para llevar de nuevo a US Airways, la s¨¦ptima compa?¨ªa estadounidense, a una senda de rentabilidad.

Treces meses despu¨¦s, Siegel se sienta en Filadelfia ante un grupo de prensa europea para decir que nunca ha estado tan seguro de la compa?¨ªa. "Hemos salido reforzados y, aunque nos esperan dos a?os dif¨ªciles, hemos sentado las bases para un buen crecimiento".

Esas bases han requerido un ampl¨ªsimo plan de reestructuraci¨®n financiera, con m¨¢s de 700 acuerdos referentes a contratos y financiaci¨®n, y con el que US Airways se ha asegurado una inyecci¨®n de liquidez de 1.240 millones de d¨®lares y la supervivencia, en un momento en el que ya son varios los analistas que advierten de la posibilidad no s¨®lo de nuevas supensiones de pagos en el sector, sino, incluso, de la desaparici¨®n de alguna compa?¨ªa.

El impacto de la guerra

Los efectos de la guerra y la debilidad de la econom¨ªa no permiten que casi ninguna compa?¨ªa se muestre optimista. Siegel, tampoco. "Hemos dado pasos muy dif¨ªciles, algunos incluso cre¨ªan que imposibles, para reestructurar la compa?¨ªa, pero el Gobierno impone continuos costes en seguridad que ahogan a las empresas y el impacto directo de la guerra ha sido sustancial". As¨ª que, pese a todos sus nuevos planes, Siegel no espera este a?o tampoco entrar en rentabilidad. Si acaso, un cash flow (beneficios m¨¢s amortizaciones) "neutro". "No habr¨¢", asegura, "ni grandes ganancias, ni grandes p¨¦rdidas".

El recorte de costes ha sido el eje en el que Siegel ha centrado toda la reconversi¨®n de US Airways. Pero no ha sido el ¨²nico. Hay tambi¨¦n todo un cambio de estrategia que pasa por reforzar la filial de vuelos regionales y un acuerdo de c¨®digo compartido (un acuerdo comercial para coordinar rutas) con United Airlines que le permita extenderse por el oeste de Estados Unidos y paliar as¨ª su excesiva concentraci¨®n en la costa Este. El acuerdo, adem¨¢s, es el paso preliminar para una decisi¨®n de mayor calado como es la entrada de la compa?¨ªa en Star, la alianza capitaneada por United por parte americana y por Lufthansa por parte europea. Entrar en Star Alliance supone para US Airways abrirse la puerta del centro y el este de Europa, mientras Lufthansa, con la que tambi¨¦n alcanzar¨¢ un pacto de c¨®digo compartido, ampliar¨¢ su presencia en Am¨¦rica.

La estrategia comercial queda reforzada con la puesta en marcha, el pr¨®ximo 2 de mayo, de la nueva terminal internacional en el aeropuerto de Filadelfia. Construida en colaboraci¨®n con las autoridades de la ciudad, el proyecto, con un coste aproximado de 550 millones de d¨®lares, permite un mejor desarrollo tanto de la propia compa?¨ªa, que contar¨¢ con 20 accesos (gates) internacionales, como de la propia ciudad, embarcada en varios proyectos para incrementar su n¨²mero de visitantes.

Por ¨²ltimo, US Airways aplicar¨¢ tambi¨¦n una nueva estrategia de cara al cliente. "Despu¨¦s del 11-S", dice Siegel, "la gente no viaja igual, ha cambiado su comportamiento". As¨ª que la compa?¨ªa est¨¢ estudiando c¨®mo adecuar su oferta a esos nuevos usos. Mientras, seguir¨¢ acomodando su capacidad a la demanda, lo que ha supuesto, de momento, un recorte del 30%.