Necesidad de la Protecci¨®n Oficial

No puedo estar m¨¢s disconforme con las conclusiones del estudio presentado recientemente por la Uni¨®n de los Empresarios de la Construcci¨®n de Alava (UNECA), que se recog¨ªa el pasado lunes en estas p¨¢ginas, por el que los promotores pretenden reducir las reservas de suelo para vivienda de protecci¨®n oficial (VPO). Entre otras cosas, porque adem¨¢s ocultan conscientemente a la poblaci¨®n datos que conocen sobre la evoluci¨®n reciente de los precios de la vivienda en Euskadi o sobre la legislaci¨®n vigente en materia de reservas de suelo para VPO.

Mucho me temo que estas declaraciones de UNECA est¨¦n animadas por otro inter¨¦s, cual es el de trasladar su enfado por la limitaci¨®n a la adjudicaci¨®n a dedo de las viviendas de protecci¨®n oficial de promoci¨®n privada; limitaci¨®n que se ha introducido en la normativa aprobada por el Gobierno vasco a finales de 2002. Parece que UNECA prefiere tener m¨¢s libertad para adjudicar viviendas protegidas y por eso quiere que se reduzcan los suelos para VPO y se aumenten los de vivienda libre.

La revitalizaci¨®n de la VPO, al que los promotores achacan la causa de sus desgracias, se ha producido en los dos ¨²ltimos a?os, y especialmente en 2002, como consecuencia de la nueva pol¨ªtica de vivienda que est¨¢ impulsando Ezker Batua desde el Gobierno vasco. Y hay que decir que, precisamente en este a?o 2002, se ha producido un clar¨ªsimo cambio de tendencia en la evoluci¨®n de los precios en Euskadi, de modo que hoy nos encontramos entre las comunidades aut¨®nomas cuyos precios crecen menos. En concreto, mientras en el conjunto de Espa?a los precios de la vivienda libre han crecido un 16% de promedio en 2002, en la Comunidad Aut¨®noma Vasca esa subida ha sido tan s¨®lo de un 7%. Este dato lo conocen los promotores y cabr¨ªa preguntarse por qu¨¦ no lo incluyen en su informe.

Seg¨²n el an¨¢lisis de los promotores, los precios de la vivienda libre suben en Euskadi como consecuencia de las reservas de suelo para VPO. ?C¨®mo explican entonces las subidas cercanas al 25% de los precios en comunidades como la de Madrid, en donde no han estado vigentes esas reservas?

Lo cierto es que los precios de la vivienda crecen como consecuencia de la pol¨ªtica liberalizadora del PP y de la avaricia de muchos propietarios de suelo y no pocos promotores, que se han aprovechado de una demanda creciente de vivienda por parte de de ciudadanos que est¨¢n dispuestos a pagar lo que sea por disponer de un techo donde vivir. En definitiva, se est¨¢n aprovechando y enriqueciendo claramente a partir de la imposibilidad de muchas personas de ejercer un derecho b¨¢sico como es el de la vivienda.

Y esto es lo que parece que quieren seguir haciendo algunos promotores, como los representados en UNECA. No tienen ning¨²n reparo en despreciar la urgente necesidad de miles de personas que se encuentran inscritas en el Servicio Etxebide y no tienen forma de comprar una vivienda en el mercado libre. Se r¨ªen de ellos diciendo que debe haber m¨¢s suelo para vivienda libre, cuando saben perfectamente que eso s¨®lo va a perpetuar la situaci¨®n de imposibilidad de acceso a una vivienda. Hemos de considerar que el 84% de la poblaci¨®n demandante de primer acceso a la vivienda no puede costear un precio superior a 150.000 euros. Y, si el l¨ªmite lo ponemos en 180.000 euros, tan s¨®lo el 2% de los demandantes son capaces de adquirir esas viviendas. Por lo tanto, la ¨²nica forma de dar respuesta a esta poblaci¨®n demandante es que las nuevas viviendas que se construyan sean mayoritariamente de protecci¨®n oficial, tanto en venta como en alquiler social.

Y es a eso a lo que tenemos que enfocar nuestros esfuerzos, tanto los promotores como el Gobierno. De modo que, si en 2002 hemos iniciado 5.000 viviendas protegidas y 10.000 libres, en los pr¨®ximos a?os podamos construir 15.000 protegidas y 10.000 libres. El Departamento de Vivienda y Asuntos Sociales no pretende perjudicar las expectativas empresariales de los promotores vascos. Al contrario. Deseamos que esas expectativas crezcan, pero dando respuesta a las necesidades de la poblaci¨®n vasca. Sorprende que la postura de UNECA sea precisamente la contraria: la de perjudicar los intereses de los ciudadanos y ciudadanas vascos y la de sus propios asociados.

Finalmente, quiero aclarar que la exigencia de reserva de suelo del 65% no se aplica a municipios de menos de 7.000 habitantes ni tampoco a los suelos calificados como urbanos (donde ese l¨ªmite se establece tan s¨®lo en el 20%). Tan s¨®lo es de aplicaci¨®n en suelos urbanizables. Esta situaci¨®n la resolveremos en la ley del suelo, cuya presentaci¨®n p¨²blica llevaremos a cabo en breve, y que sin duda ser¨¢ m¨¢s rigurosa que la normativa vigente en lo relativo a reservas de suelo para VPO.

Jos¨¦ Javier De¨¢n Pinedo es viceconsejero de Vivienda del Gobierno vasco.