Temporeros en Huelva

A la Delegada de Asuntos Sociales de Huelva: Le¨ªdas sus declaraciones del pasado d¨ªa 26 de abril, no puedo m¨¢s que sentir estupor. No aportan ninguna soluci¨®n a la grav¨ªsima situaci¨®n que se est¨¢ sufriendo en el t¨¦rmino municipal de Almonte por temporeros, la mayor¨ªa espa?oles provenientes de otras provincias. Antes bien, a?aden a la precaria realidad que all¨ª se vive un golpe bajo a los verdaderos y ¨²nicos sufridores de ella: los jornaleros.

El problema no es que los padres no quieran escolarizar a sus hijos, el problema es mucho m¨¢s complicado. Los alojamientos de muchas de estas personas no merecen ni el calificativo de cuadras. No hay posibilidad alguna de asearse al no haber ni agua corriente, ni luz, por tanto tampoco cuarto de ba?o, con lo cual las necesidades se hacen en el exterior de la casa. Esta falta de posibilidades de aseo y de poder lavar la ropa hace que los padres renuncien a llevar a sus hijos a la escuela en el penoso estado de deterioro f¨ªsico en que se encuentran sus hijos.

Entiendo que sus declaraciones se basan en el desconocimiento de la dimensi¨®n del problema. No pongo en duda, ante declaraciones de alg¨²n empresario, que la mayor¨ªa de ellos ofrecen vivienda digna a sus trabajadores, pero decir que todos cumplen con este requisito ser¨ªa tambi¨¦n demostrar un gran desconocimiento.

P¨®nganse los medios necesarios para paliar esta situaci¨®n de verdadera explotaci¨®n y no se vuelva a dar otra vuelta de tornillo al m¨¢s d¨¦bil, en este caso el jornalero del campo andaluz, que tanta riqueza trae a nuestras tierras. Amenazar con retirarles la tutela de sus hijos es un golpe bajo y de muy mal gusto.