Diez ideas en torno a la Constituci¨®n

Como contribuci¨®n a la celebraci¨®n del vig¨¦simo quinto aniversario de la Constituci¨®n que, en uni¨®n de otros seis benem¨¦ritos varones, ayud¨® a engendrar, el autor ha recogido en este volumen tambi¨¦n 25 trabajos sobre diversos temas de Derecho Constitucional. La mayor parte de ellos (23) hab¨ªan visto ya la luz en revistas especializadas o libros colectivos, entre 1979 y la actualidad; dos, procedentes de sendos cursos de verano, aparecen ahora en letra impresa por primera vez y obra nueva es la enjundiosa introducci¨®n (Razones pol¨ªticas de mis escritos jur¨ªdicos) que abre la obra.

Aunque el libro tiene la unidad que resulta de las "razones pol¨ªticas" que lo inspiran, la variedad de los temas tratados y la diversidad de enfoques utilizados por el autor hacen imposible entrar en el an¨¢lisis de los distintos trabajos, muchos de los cuales abordan adem¨¢s cuestiones esenciales para nuestra convivencia que no se pueden despachar con unas pocas l¨ªneas. Por fortuna, el propio Miguel Herrero, que como ya demostr¨® en las conclusiones de El principio mon¨¢rquico , tiene un notable talento para ahorrar al lector apresurado el esfuerzo de seguirlo a lo largo de muchas p¨¢ginas, lo ha utilizado tambi¨¦n ahora para ofrecer en la introducci¨®n las ideas en torno a la Constituci¨®n (10 exactamente, ni una m¨¢s ni una menos) que piensa haber dejado acu?adas en los trabajos aqu¨ª recogidos, con lo que le gustar¨ªa, dice, dar la obra por conclusa, un deseo que debe referirse s¨®lo a esta obra precisa, pues en la misma introducci¨®n anuncia tambi¨¦n el prop¨®sito de completar otros dos libros, uno sobre la monarqu¨ªa y el otro sobre la naci¨®n.

Como la intenci¨®n de Herre

ro de Mi?¨®n es pol¨ªtica, no acad¨¦mica, las 10 ideas que nos ofrece no pretenden servir a la comprensi¨®n de la realidad, sino modificarla; no son categor¨ªas anal¨ªticas, sino principios normativos, propuestas para orientar la acci¨®n sobre diversos aspectos de la vida de la comunidad. El grado de elaboraci¨®n de estas propuestas es muy diverso, y muy distinta tambi¨¦n su relevancia para la pr¨¢ctica. Las m¨¢s importantes son, como el lector puede imaginar, las que se refieren a lo que Herrero llama la "plurinacionalidad" de nuestra Constituci¨®n, y en conexi¨®n con esa "plurinacionalidad", a su concepci¨®n de la Constituci¨®n como pacto, necesitado de permanente actualizaci¨®n. Quiz¨¢ el lector tenga tambi¨¦n alguna noticia de mi discrepancia con tal concepci¨®n, que he hecho p¨²blica en m¨¢s de una ocasi¨®n sin que esa discrepancia haya da?ado, por fortuna, la vieja amistad que entre nosotros existe. Ahora, al enfrentarme de nuevo con ellas, me parece percibir adem¨¢s en el pensamiento de Herrero una cierta equivocidad que quiz¨¢ antes hab¨ªa pasado por alto y que hace posible dos entendimientos distintos de su concepci¨®n de Espa?a. Uno, que me parece errado, el del Estado "plurinacional"; otro que ve en Espa?a lo que el autor llama una "supernaci¨®n", un concepto equivalente, creo, al de "naci¨®n de naciones" , en el que tal vez podr¨ªamos coincidir si se aceptasen todas sus implicaciones. Entre ellas, por ejemplo, la de renunciar a definir las naciones "perif¨¦ricas" por oposici¨®n a Espa?a.