Herbert R. Lottman asegura que es "reconfortante que los editores espa?oles lean"
El escritor, que acaba de publicar 'El Par¨ªs de Man Ray', recibe un homenaje en Barcelona
Herbert R. Lottman (Nueva York, 1927) acaba de publicar El Par¨ªs de Man Ray (Tusquets). Pero no habl¨® de eso el martes en Barcelona, donde se le tribut¨® un c¨¢lido homenaje, sino de los secretos de su oficio, de c¨®mo decidi¨® instalarse en Par¨ªs y de uno de los aspectos de su larga y rica trayectoria, quiz¨¢ menos conocidos del gran p¨²blico: su trabajo como periodista cultural especializado en la edici¨®n y la literatura. Conoce bien lo que se cuece en Espa?a. "Es reconfortante que los editores espa?oles lean, no s¨®lo los manuscritos que publican, leen los de sus colegas".
Lottman conquist¨® a los asistentes al homenaje, organizado por la Fundaci¨®n C¨ªrculo de Lectores, antes de empezar a hablar. Llevaba una corbata que atrapaba todas las miradas, grande, ancha y con un discreto estampado de libros. Su esposa, Marianne V¨¦rone, cont¨® que era la herencia de un amigo. "A Herbert le gustaba mucho y cuando su amigo muri¨® su viuda se la regal¨®. Se la pone para las grandes ocasiones".
Y fue una gran ocasi¨®n, sobre todo para el p¨²blico que no se perdi¨® una palabra del "amigo americano", como le defini¨® Hans Meinke. Lottman explic¨® que es periodista desde que ten¨ªa cinco o seis a?os. "Escrib¨ªa peri¨®dicos y los reproduc¨ªa yo mismo". Muy pronto tambi¨¦n se inici¨® su fascinaci¨®n por los americanos que viv¨ªan y creaban en Par¨ªs, Ernst Hemingway, Scott Fitzgerald... En la universidad le dieron una beca Fulbrigth para ir a Par¨ªs, dud¨®, no sab¨ªa franc¨¦s, pero quiso ser un americano en Par¨ªs. Vive all¨ª desde 1956. Lo de escribir novelas no iba con ¨¦l. "No pasaba del cuento corto... Eran tiempos de guerra fr¨ªa y la realidad interfer¨ªa continuamente en la ficci¨®n". As¨ª que se volc¨® en el periodismo cultural, escribiendo de las cosas que conoc¨ªa bien. Fue corresponsal en Europa de la revista Publisher's Weekly y ahora, de The Bookseller.
Luego dio otro paso adelante y empez¨® con las biograf¨ªas, en la tradici¨®n brit¨¢nica y estadounidense, "con hechos y datos verificables". Plante¨® a un editor norteamericano escribir la de Flaubert, la rechaz¨®, pero le pidi¨® la de Camus. "Yo no entend¨ªa c¨®mo no exist¨ªa una buena biograf¨ªa suya, pero pronto averig¨¹¨¦ que la familia no quer¨ªa que se hiciera. No acept¨¦ vetos y pude entrevistarme con muchos amigos de Camus que se reunieron conmigo sin dec¨ªrselo a la familia. Cuando se public¨® [en Espa?a Taurus] las reacciones fueron muy duras: que era demasiado largo, que por qu¨¦ ten¨ªa que contar lo que desayunaba Camus, incluso se dijo que yo prefer¨ªa los hechos, lo que en realidad es un honor. Puedo decir que inici¨¦ una nueva tradici¨®n en Francia".
El periodo de entreguerras en Par¨ªs y la posguerra le fascina. Ha escrito La rive
gauche, La ca¨ªda de
Par¨ªs, La depuraci¨®n, en Tusquets; Los
Rothschild, las biograf¨ªas de Flaubert (Tusquets), la de Colette (Circe), la de Julio Verne (Anagrama)... Acaba de terminar Los escritores
comprometidos, tal como se titular¨¢ en Espa?a: Chateaubriand, Zola, Lamartin, Hugo...
Entre sus escritores contempor¨¢neos preferidos estan Umberto Eco y Mario Vargas Llosa... Lottman, que prefiere desde siempre la vieja Europa, concluy¨®: "?sta es una buena ¨¦poca para ser un americano en Par¨ªs".
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