Los vecinos rechazan en una votaci¨®n popular el plan urban¨ªstico de El Carme en Valencia
Los afectados reivindican una rehabilitaci¨®n del barrio y la muralla ¨¢rabe sin desalojos
Los vecinos del centro hist¨®rico de Valencia se adelantaron ayer a las elecciones del 25-M con una votaci¨®n popular sobre el plan urban¨ªstico de El Carme, que prev¨¦ el desalojo de unas 180 personas y m¨¢s de 55 pisos, para dar paso a equipamientos, viviendas y la recuperaci¨®n de la muralla ¨¢rabe. La Asociaci¨®n de Afectados, que organiz¨® el refer¨¦ndum, confirm¨® con el acto el rechazo vecinal al proyecto de la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas y el Ayuntamiento. Los afectados argumentan que no se les ha consultado y que la rehabilitaci¨®n de la muralla no exige su "expulsi¨®n".
La urna de cart¨®n colocada sobre una mesa en la plaza del Carmen se abri¨® a las seis de la tarde y en menos de una hora ya conten¨ªa m¨¢s de 70 papeletas de vecinos deseosos de mostrar su rechazo al plan urban¨ªstico, a tenor de sus declaraciones. "No se han preocupado por la muralla ¨¢rabe en a?os y ahora todo son prisas", critic¨® el primer votante, El¨ªas Dasca, de 35 a?os y vecino del barrio. "Hay vecinos que llevan aqu¨ª toda la vida y lo que tienen que hacer es levantar el barrio para que vengan m¨¢s, no hacen nada por el Carmen", protest¨® Aurelia Huerta, de 74 a?os, due?a de un bar en la plaza del ?rbol. Al final votaron 2.166 personas, y hubo un solo voto a favor de la intervenci¨®n urban¨ªstica, el de una joven que se equivoc¨® de papeleta.
"Hemos hecho el refer¨¦ndum para ver qu¨¦ opina la gente, hay una gran inseguridad en el barrio, sobre todo en el caso de las personas mayores, para las que el plan es la ruina", afirm¨® Josep Montesinos, presidente de la Asociaci¨®n de Afectados, que ha reunido a entidades vecinales y culturales en contra del proyecto. La Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, con el apoyo del Ayuntamiento, argumenta que la modificaci¨®n del plan especial de El Carme permite construir 400 aparcamientos, 180 viviendas, 46 locales y m¨¢s de 6.600 metros cuadrados de dotaciones, adem¨¢s de recuperar espacios de la muralla ¨¢rabe del siglo XI. Los afectados denuncian que el impacto del plan "es dur¨ªsimo" e innecesario porque la muralla "ya est¨¢ a la vista y en terrenos p¨²blicos". Seg¨²n la asociaci¨®n, que no conf¨ªa en el prometido realojo, el proyecto dedica el 6% del suelo a viviendas frente al 49% de equipamientos, lo que supone la "terciarizaci¨®n" de la zona, pero no atrae habitantes ni revitaliza El Carme. El plan ha recibido m¨¢s de 400 alegaciones a¨²n sin respuesta.
Bocadillos para cenar y debate en la calle
Tabatha, de 12 a?os, acudi¨® al refer¨¦ndum del brazo de su abuela pero sin idea de participar. "Es que soy menor de edad, no puedo votar", replic¨® muy seria. Cuando le explicaron que el acto no ten¨ªa fuerza legal, cogi¨® la papeleta del "no a la expropiaci¨®n y expulsi¨®n de los vecinos de nuestro barrio" y la meti¨® en la urna. Ante la mesa tambi¨¦n se detuvo Santiago Grisol¨ªa, presidente del Consell Valenci¨¤ de Cultura (CVC), algo despistado sobre la convocatoria. "El proyecto es bueno para El Carme, ?no?", pregunt¨®. Aclarado que los organizadores no lo creen as¨ª, Grisol¨ªa hizo memoria del proyecto y aclar¨® que le parece "mal que se destruyan casas".
Para "reivindicar la vida en la calle", la asociaci¨®n prepar¨® mesas para una cena de sobaquillo, y trajo para los despistados un centenar de bocadillos de at¨²n y jam¨®n con pisto, adem¨¢s de agua y cerveza. Candidatos socialistas, de EU, el Bloc y Uni¨® Valenciana acudieron a la cita y estaba previsto que en la cena se abriera el micr¨®fono para sus intervenciones y las de los vecinos sobre el proyecto y la vida en el barrio.
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